PREFACIO

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Prefacio


El reloj de la ciudad parecía detenerse cada vez que Sebastián Rinaldi ponía un pie en sus calles. Una jungla de concreto y sombras se sacudía bajo el peso de su presencia, un hombre cuya sola mención bastaba para sembrar terror en los rincones más oscuros de la ciudad y entre quienes desafiaban sus órdenes. Rinaldi no era un simple ejecutor de la mafia italiana; era la mano dura, el arma más implacable y letal de un imperio construido sobre sangre y muerte. Pero, por encima de todo, era un hombre marcado por una promesa.

Seis años atrás, en una noche oscura y desolada, Sebastián conoció a una joven mujer perdida en el laberinto de malicia que era la ciudad de Nueva York. De inmediato pudo notar que no era una chica cualquiera. Isabella era diferente: estaba rota y perdida, víctima de una red de trata de personas que la había despojado de su libertad y parte de su humanidad, dejándola vacía y resignada a que aquel cruel destino sería irremediablemente su final. Sin imaginarlo, acababa de despertar el interés del hombre que, años después, cambiaría su vida para siempre.

Porque Sebastián, con solo verla allí, frente a él, intentando dar esperanzas a un completo desconocido cuando incluso ella misma ya no las tenía, sintió que algo en su interior se quebraba. Una determinación feroz nació en su corazón. Bastaron una frase, un crucifijo y el leve intento de una sonrisa amenazando con formarse en los labios agrietados de la chica para encadenarla a la bestia. Él la arrancaría de las garras de la oscuridad que la rodeaba. Pero la vida, con su cruel ironía, le arrebató esa oportunidad. Isabella desapareció sin dejar rastro y, más allá de su carácter implacable y su alma endurecida por años de violencia, Sebastián no pudo olvidarla.

Ahora, con el paso de los años, la búsqueda de aquella joven se había convertido en una obsesión que lo consumía. Nada ni nadie podría detenerlo. Cada calle, cada burdel, cada rincón de la ciudad era un destino inevitable en su guerra personal. Sabía que la red de trata era mucho más grande de lo que había imaginado, que los hilos de corrupción y maldad se extendían como una plaga, infectando su ciudad. Pero no le importaba. Su deseo por encontrarla era más destructivo que cualquier obstáculo que se interpusiera en su camino.

Así, en su incansable búsqueda, Sebastián Rinaldi comenzó a desmantelar, poco a poco, el imperio de la trata con la misma ferocidad con la que había destruido a sus enemigos en el pasado. Una a una, las casas de placer cayeron, reducidas a cenizas bajo su paso. Los burdeles, antes imponentes, que lucraban a expensas de mujeres inocentes, se desintegraron. Cada capa de la red fue arrancada de cuajo, dejando a su paso un rastro de cadáveres y ruinas que casi destruyó la ciudad.

Pero, más allá de la violencia y el caos, algo profundo lo impulsaba: la promesa de que acabaría con todo y todos los que se interpusieran en su camino. No descansaría hasta cumplirla, hasta encontrar a la mujer que se había convertido en su obsesión.

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Recuerden que aquí no se subirán todos los capítulos chicas, por favor lean el capitulo anterior donde sale toda la información.

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La Redención del Mafioso © #3 [Borrador] ¡YA EN FÍSICO!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora