Leonardo's sleepless night / rottmnt

20

Capítulo 20: ¿aún.. lo recuerdas?

Bajo la tenue luz de la habitación, Yuichi observó a Leonardo dormir profundamente a su lado. Una mezcla de emociones confusas invadió su mente, recordando sueños y momentos que parecían entrelazarse en una trama compleja y surrealista.

Leonardo, ajeno al torbellino de pensamientos de Yuichi, seguía envuelto en un sueño apacible. Su respiración tranquila y sus suaves ronroneos llenaban el silencio de la habitación. Yuichi acarició suavemente la cabeza de la tortuga, preguntándose si los recuerdos compartidos eran reales o simplemente fragmentos de un mundo onírico.

La brisa suave movía las cortinas, creando danzas de sombras en la habitación. Yuichi decidió romper el silencio.

"¿Recuerdas aquel puente donde hablamos de las estrellas?" murmuró Yuichi, más para sí mismo que para Leonardo.

Los ojos de Leo se entreabrieron levemente, como si estuviera sintonizando el hilo de la conversación desde el limbo entre el sueño y la vigilia. Emitió un sonido suave, algo parecido a un "chrrp", como si intentara comunicarse de una manera que solo ellos dos comprendieran.

Yuichi sonrió ante la respuesta, aunque no estaba seguro de si entendía completamente el significado detrás de esos sonidos. "Quizá fue solo un sueño, pero era hermoso, ¿no crees?"

Leo asintió débilmente y se acomodó, manteniendo el contacto físico con Yuichi. En ese momento, la barrera entre el sueño y la realidad parecía desdibujarse.

"¿Qué piensas de todo lo que hemos vivido, Leo?" preguntó Yuichi, su mirada perdida en las sombras que bailaban en las paredes.

Otra vez, Leo emitió sonidos indescifrables. Yuichi podía sentir la intensidad de la conexión entre ellos, algo que trascendía las palabras convencionales.

"Quizás no necesitamos entenderlo todo", reflexionó Yuichi. "A veces, lo importante es simplemente vivir el momento."

Leo respondió con un suave roce de su cabeza contra el pecho de Yuichi. Ese gesto simple hablaba más que cualquier palabra.

Mientras el tiempo se deslizaba, Yuichi y Leo continuaron compartiendo momentos en esa habitación llena de misterio y recuerdos. No sabían si aquello era un sueño, un recuerdo o algo más allá de su comprensión.

Con Leonardo a su lado, Yuichi se sumergió nuevamente en la tarea de entablar una conversación, como si cada palabra pudiera arrojar luz sobre la verdad que parecía esquivarlos. La habitación, envuelta en una atmósfera etérea, solo intensificaba la sensación de estar atrapados entre sueños y recuerdos.

"Leo, ¿recuerdas la primera vez que nos conocimos?" preguntó Yuichi, buscando respuestas en la mirada de la tortuga.

Leo levantó la cabeza, sus ojos expresando curiosidad. Emitió un sonido suave, un "chrrp" que resonó en la habitación.

"Es extraño, ¿verdad?" continuó Yuichi. "Como si estuviéramos enredados en un hilo invisible que nos une, incluso cuando las memorias parecen difuminarse."

La tortuga asintió levemente, y Yuichi notó una chispa de reconocimiento en sus ojos. Sin embargo, la conexión entre ellos iba más allá de las palabras. Era un lazo que se construía en silencios compartidos y gestos comprensivos.

"Recuerdo aquel día en el puente", murmuró Yuichi, dejando que los recuerdos fluyeran. "Hablar contigo bajo las estrellas me hizo sentir una conexión especial, como si nuestros destinos estuvieran entrelazados."

Leo emitió otro sonido, esta vez más largo, como si estuviera respondiendo a la nostalgia que impregnaba la habitación.

"¿Crees que todo lo que hemos vivido es real?" preguntó Yuichi, dejando que la duda se filtrara en sus palabras.

Leo, en lugar de emitir sonidos, colocó suavemente una de sus patas en la mano de Yuichi. Era como un gesto tranquilizador que decía más de lo que cualquier palabra podría expresar.

"Me gustaría entenderlo, Leo", confesó Yuichi. "Pero a veces, creo que la magia está en la incertidumbre. En dejar que la vida nos sorprenda."

Los minutos se deslizaron en un susurro, y Yuichi y Leo compartieron silencios cómodos, donde las palabras no eran necesarias. Era como si estuvieran tejiendo una historia con cada gesto y cada mirada.

"Independientemente de lo que sea esto, estoy agradecido de tenerte a mi lado, Leo", expresó Yuichi, rompiendo la quietud. "Ya sea un sueño, un recuerdo o algo más, es nuestro."

Leo se acomodó más cerca de Yuichi, su caparazón sirviendo como un refugio cálido. El misterio que rodeaba su historia no importaba en ese momento; lo único que importaba era el lazo compartido entre dos seres que se encontraron en un rincón singular de la existencia.

Donatello, en su laboratorio lleno de monitores y cables, examinaba la situación a través de las cámaras dispersas por la habitación. Sus ojos se movían rápidamente, tratando de captar cada detalle, cada gesto que pudiera revelar la verdad que se ocultaba entre sombras.

Mientras observaba la pantalla, la imagen de Leo y Yuichi compartiendo momentos se volvía más clara. Donatello se inclinó hacia adelante, sumergiéndose en la escena como si pudiera tocarla. Había una mezcla de nostalgia y desconcierto en su mirada.

Miguel Angel, en su nueva forma robótica, se acercó a Donatello con curiosidad. "¿Qué estás viendo, Donnie? Parece una situación tranquila".

Donatello suspiró, sus dedos danzando sobre el teclado. "Es complicado, Mike. Leo y Yuichi están ahí, como si estuvieran en su propio mundo. Pero no sé si es real o solo una ilusión".

Miguel asimiló la información, sus ojos digitales parpadeando en una suerte de expresión pensativa. "Donnie, a veces la realidad y la ilusión se entrelazan de maneras extrañas. ¿No crees que, en este momento, la felicidad de Leo es lo que importa?"

Donatello levantó la mirada hacia su hermano robótico, reflexionando sobre sus palabras. "Tienes razón, Mike. Pero no puedo evitar cuestionarme todo esto. ¿Es sano para Leo? ¿Es real o solo una fachada construida por su mente?"

Miguel colocó su mano robótica en el hombro de Donatello, ofreciendo un gesto de consuelo. "Donnie, a veces las respuestas no llegan con análisis y cables. Solo debemos confiar en que, sea lo que sea, Leo encontrará su camino".

Donatello asintió, agradeciendo la ayuda de su hermano. Mientras las cámaras continuaban capturando los momentos entre Leo y Yuichi, Donatello se sumió en una reflexión más profunda. ¿Cómo podía ayudar a Leo, asegurarse de que su felicidad fuera genuina y no una fuga de la realidad?

"Esto es un territorio desconocido, Mike", murmuró Donatello. "No sé si estoy haciendo lo correcto al permitir esto, pero no puedo ver a Leo sufrir".

Miguel Angel respondió con empatía. "A veces, las decisiones correctas no son las más fáciles. Solo podemos hacer lo que creemos que es mejor en el momento".

Con esas palabras resonando en su mente, Donatello continuó observando la pantalla, sumido en sus pensamientos. La dualidad de cuidar a Leo y enfrentar la incertidumbre de su situación se convertía en un dilema que solo el tiempo y las circunstancias podrían resolver.

_________________________________________

A ver qleros, por favor comenten algo o no sé, digan algo, mi historia se ve bien vacia JAHSJSJ (es con intención de pedir ayuda, me gustaría que me digan en qué puedo mejorar y demás)