Viernes 13 [Soojun]

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— Terminaron las clases por hoy, que les vaya bien y no se olviden del trabajo, les doy bastante tiempo, hasta el mes que viene, aprovechen bien.— les recordó la profesora Bang, con quien tenían en su última hora así como en su tercera hora.

Soobin salió de ahí buscando a Taehyun, quien normalmente esperaba a Beomgyu afuera de su aula.

Pensaba en qué hacer para poder entregar un buen trabajo a su profesora, ya que tenían que presentar fotografías en donde debían tener a modelos que posen con ropa diseñada y hecha a mano, lo cual era muy complicado de encontrar.

Tenían que ser super originales y creativas para tener el puntaje máximo, además de la buena calidad, claro.

Para su sorpresa, no encontró a su mejor amigo y a su hermano por ninguna parte, así que simplemente se fue solo, no tenía ganas de quedarse por mucho más tiempo.

Caminó hasta la parada de autobuses, hoy no quería caminar, le gustaba, pero estaba agotado.

Salió por la puerta que daba hacia la calle, y se sorprendió al ver que habían unas cuantas nubes grises y gotas finas de lluvia cayendo del cielo.

"Que bien que traje dinero extra."

Llegó a la parada y ahí estaban su hermano y su mejor amigo abrazados y dándose besitos mientras oían música compartiendo los auriculares.

Eran muy cursis.

Pero a Soobin no le afectaba en nada, los dejaba ser, al menos ya podía estar tranquilo de que su hermano menor no estaría viniendo a llorarle sobre sus amores fallidos o que le rompieron el corazón a su mejor amigo.

Simplemente no los molestó y procedió a ponerse sus auriculares él mismo, comenzó a sonar "That's What I Like" de Bruno Mars.

Por alguna razón esta canción siempre le daba la sensación de que se sentía amado, ¿Amado por quién? No lo sabe, pero siempre la escucha, le gustaba sentirse amado.

Claro que desde que llegó Yeonjun su corazón revolotea de felicidad al oír la canción, como si fuera él quien lo amó todo este tiempo.

— Gold jewelry shining so bright. Strawberry champagne on ice. Lucky for you, that's what I like, that's what I like. Lucky for you, that's what I like, that's what I like.— cantaba en un susurro, y desde lejos estaba el lindo pelinaranja que, al igual que él, sentía esas emociones al oír tal canción.

La escuchaban a escondidas porque sus madres decían que era obscena la letra, pero a ellos les gustaba, además de que Soobin la cantaba mientras repartía besos por su rostro y comenzaban a imaginarse en un futuro pudiendo viajar a donde quisieran y comer fresas bañadas en chocolate en un hotel lujoso.

Eran jóvenes, y unos jóvenes muy soñadores.

Pero ellos soñaban juntos, en los planes de uno estaba el otro y viceversa, claro que eso cambió y el mayor de los dos no lo sabía.