VOLVIENDO A VIVIR-Mjari13

Sólo es sexo

CAROLINA

-Debemos ser pacientes, él está muy afectado la única persona que conocida en todo este tiempo ha fallecido, le ha en engañado con respecto a su identidad es lógico que se sienta mal.

-Tienes razón Carolina, mientras él se quede aquí cuídenlo por favor y permítanme visitarle.

-Por supuesto Blanca, esta es tu casa también, ven las veces que sea necesario.

-Gracias Fernando-dice el Señor Roberto.

-No hay que aclarar por supuesto que el contrato que se firmaría esta noche queda anulado.

-Muchas gracias Carolina, esperaremos para llevarlo a un médico y analizar su situación.

-Es lo mejor Roberto-dice Fernando poniendo una mano en el hombro del otro.

-Ahora debemos irnos para que descansen.

-Una última cosa. Mañana iré con él a la playa a repartir las cenizas de Melissa, luego seguro él ira a su casa a buscar sus documentos, por qué no me dan su nombre completo, para comparar con un certificado de nacimiento que lo realizaré mientras se hacen las pruebas de ADN?

- Está bien Carolina su nombre completo es Andrés Roberto Borgues Linarte

-Anótelo aquí, por favor-Fernando le pasa una agenda y un lapicero.

-Cuídalo mi niña, no quiero volverlo a perder yo iría con él, pero sé que para el soy una desconocida, pero sabré esperar...

-Tranquila Señora Blanca él estará bien, yo lo traeré de regreso-le di un abrazo tranquilizador-¿vaya... yo dando abrazo? miro a Fernando y él sonríe levemente.

La pareja se fue y yo me quedo de pie y con un asombro inmenso ¿Cómo en un día se derrumba la vida de una persona?

-Yo me retiro a descansar ¿Hija te quedas? ya es muy tarde para irte...

-Si padre, me quedaré.

-Oh, ¡hija nunca me llamas padre! me encanta escucharlo

-Aprovéchate del aire sensible que quedó en esta sala, ven padre y te doy un abrazo de buenas noches...-Fernando me abraza tan fuerte y lleno de cariño.

-Descansa hija mía...- yo me fui a la cocina, tenía hambre, la cena se esfumó y nadie comió nada, me sirvo algo de lo mucho que hay en la cocina que era para la cena y pienso en todo lo sucedido ¡pobre hombre! ¿Ahora que será de su vida? ¿Tendrá cura su pérdida de memoria? y recuerdo que él tampoco probó bocado...

Preparo algo liviano en un plato y le llevaré por si acaso está aún despierto, me quito los zapatos de tacón en la cocina y subo descalza las escaleras, entro sin querer hacer ruido a su habitación y él está dormido.

Que guapo que se ve mientras duerme. Suspiro, ¡que fatal la está pasando! me giro sobre mis talones con el plato y un vaso de leche en mis manos y escucho su vos:

-¡¿Caro?!

-¡Hey!...hola.. lo siento no quise despertarte-le digo en un susurro-te traía algo de comer.

-No pasa nada y si estoy muy famélico como un animal felino- yo sonrió-¿te he dicho que tienes una preciosa sonrisa?

-No sigas, no es momento para...

-Ya sé estupideces...- me interrumpe herido

-No iba a decir eso...- trato de rectificar al ver su mirada deshecha.

-No digas nada. Ven y dame lo que me traías- dice con una sonrisa pequeña, yo me acerco a la cama y él se sienta toma el plato y me dice

-Hmm que rico, gracias ¿tu corazón se esta descongelando?-ese comentario me molesta un poco y él lo nota