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max acababa de salir de su entrevista de trabajo para una de las empresas de periodismo más importantes y se encontraba muy nervioso.
llevaba una linda y cortita falda muy suave color amarillo pastel y una camisa blanca bien planchada y sin ninguna arruga, realmente quería estar presentable y obtener el puesto.
el único detalle es que su celo estaba por adelantarse y si no se apresuraba entraría en celo en público y eso sería un problema aunque por el momento aún podía controlarlo.
camino casi corriendo hacia el elevador entro y junto cuando la puerta estaba por ser cerrada un hombre (alfa por su aroma) la detuvo, era alguien alto, imponente, musculoso, masculino en todo el sentido de la palabra.
el ambiente estaba algo tenso e incómodo, max no sabía iniciar una conversación se sentía muy tímido y pequeño a lado del fornido hombre, además sentía que si abría la boca solo saldrían gemidos de ella.
no podía mentir ese alfa era demasiado apuesto, el solo pensar en esas enormes manos sosteniendo su cintura lo hacía humedecer, tal vez eran los efectos del celo, realmente no lo sabía.
el pelinegro se agachó a atar sus cordones y max solo tal vez alzó un poco su culo gordo.
entonces sucedió lo inesperado; el elevador dió una sacudida y se detuvo haciendo que max perdiera el equilibrio y terminará con su coño mojado sobre la cara del extraño.
el roce y la situación en la que se encontraba lo hizo gemir dulce y perezosamente.
el hombre gruño y eso solo envío vibraciones hacia su clítoris haciéndolo sentir todavía más cachondo.
comenzó a mover su coño desesperadamente por toda la cara de aquel extraño.
max se sentía como una puta pero poco le importaba, el placer estaba nublado su juicio.
el hombre detuvo los movimientos y empujó a max quedando este con la cara contra el suelo y el culo al aire.
tomo la falda de max y la quito de su cuerpo junto a las bragas, max gimió cuando el aire azotó su trasero y la entrada de su coño. "señor ¿que es lo que está haciendo?" "cállate, las putas como tú solo merecen estar cubiertas de semen" hablo sergio sintiendo la exitacion corriendo por su cuerpo y su polla especialmente.
"y-yo no soy una puta señor" max nuevamente gimió al sentir una mano acariciando su trasero.
"claro que lo eres, ¿creés que no note como levantabas el culo cuando me agache? ¿cómo te exitabas con solo mirar mis manos? eh?" sergio azotó la entrada de la vagina de max sintiendo como este temblaba.
"si~ seré su puta pero por favor tócame~"
"toda una perra necesitada de una jodida polla" sergio volteo a max y abrió las piernas de este mostrando toda su concha, perez saco su polla de su pantalón y comenzó a restregarla entre los labios vaginales de max sintiendo como está se humedecia. "¿te gustan las pollas grandes?" restregó la punta enojada de su polla en el clítoris del otro y este solo gimió. "te hice una pregunta pequeña perra, ¡responde!" sergio azotó fuertemente el coño de max haciendo que este quisiese cerrar las piernas por impulso fallando porque perez las sostuvo.
"¡si señor me gustan las pollas grandes que llenen mi coñito!"
sergio de una estocada entro en la vagina de max sin molestarse en ir lento, azotando su interior fuertemente.
max gemia fuertemente olvidando el lugar en el que se encontraba, bajo una de sus manos comenzando a juguetear con su clítoris moviendo sus dedos en círculos y de lado a lado apretando la polla de sergio.
el pelinegro gruño todavía más entrando y saliendo del coño de max todavía más fuerte.
max sentía que se iba a correr, rodaba los ojos, lloraba, apretaba los dedos de los pies, no sabía que realmente debía hacer.
perez alzó su pequeño top revelando sus pequeños pechos atacando sus pezones con su boca, ese fue el cúspide que lo hizo venirse y chorrear sobre la polla de sergio.
unas estocadas más hicieron falta para que perez dejara su semen dentro del palpitante coño de verstappen.
sergio salió de max y aún sin estar conforme llevo su boca a la vagina de este y comenzó a lamer el desastre que hizo sintiendo como este temblaba, max juro correrse por segunda vez.
el rubio arregló el cabello y la ropa del otro dejándolo algo presentable aunque el olor a sexo era evidente.
el elevador abrió dejándolos en el primer piso con las miradas de todos sobre ellos dos, aunque no era la primera vez. "michel, quiero ir a casa"
max abrazo melosamente a su novio.
"vamos cariño, el chófer está esperándonos" el magnate y dueño de la enorme empresa a la que max había solicitado un empleo lo cargo entre sus brazos sabiendo lo cansado que se encontraba.
"te amo"
"yo más cariño" sergio dió un cariñoso beso en su frente subiendo a ambos al auto, marchandose a su hogar.
