Un corazón por sanar

3. Solo una condición.

Joseph's PoV.

Regla general: No es una apuesta, y tampoco lo hago para entretenerte, que conste y quede super claro. Quiero estar con ella  porque siento que me gusta. Fin. *espacio para burlarte de mi y hacerme bullying por sonar tan cursi, sé que lo harás*

Ese fue la nota que le envié a Luke hace unos días en la hora de clase antes del recreo. Y el idiota no perdió tiempo, lo tengo pegado como chicle, burlándose de mí desde ese momento. Sabía que lo haría. Y aquí está la duda existencial: ¿Por qué demonios no lo he mandado al carajo y sigue siendo mi amigo? Nunca habrá respuesta a esto. NUNCA.

Con Lucía hay avances (si es que se le puede llamar así) pequeños, ya ha pasado un tiempo desde que me presenté con ella el primer día y la veo seguido, nos saludamos y hablamos un poco entre clases salvo cuando estamos en recreo, allí es cuando la pierdo de vista.

Luke sigue fijado en la morena nueva que vio cuando llegamos. La chica es bonita, para que negarlo, pero no parece muy interesada en lo que mi amigo le diga. Emma, ese creo que es su nombre, ha hecho de todo para no verlo ni en pintura. Parece que ya se ha cansado de su insistencia.

Así que aquí estamos ahora, caminando a las canchas de fútbol, supuestamente; aunque en realidad estoy consciente de que él observa el pasillo tratando de encontrarla. Resumiendo, esto nos deja en que estamos en busca del amor prohibido de Luke. Sí, yo también aproveche para hacerle bullying.

Cuando la ve, se acerca a ella y la amiga con la que siempre anda, una rubia que llegó atrasada el primer día de clases. Creo recordar que se llama Emilia.

Yo me quedo parado a cierta distancia de ellos, no me gusta ver a Luke en acción con las chicas, se pone en modo ridículamente ''galán" y da risa. ¿Ven? Soy tan grandioso amigo que lo dejo solo para que mi risa mal disimulada no le arruine nada. Creo merecer un premio.

Estaba viendo mi teléfono cuando se fue a hablarles, y ahora, cuando levanto la vista, mi amigo está tirado en el suelo.

¿Qué demonios...? La amiga de Emma lo ayuda a levantarse, intercambian unas palabras y él se da la vuelta viniendo hacia donde estoy yo medio cojeando y sonriendo.

¿Qué hace sonriendo si estaba tirado en el suelo hace cinco segundos? Sé que mi amigo no es normal, pero esto raya la rareza.

—No te lo vas a creer... —me dice riendo cuando llega hasta mí.

Y ciertamente, no me lo creo.

Luke's PoV.

Emma Lancaster, me volverás loco.

Llevo días tratando de sacarle un sí para una cita conmigo. ¿Y a qué no adivinan lo que lo me responde siempre? Dice que no.

¡¿NO?! Es la primera vez que le dicen que no a Luke Rebwoth. Así que estoy usando mi plan B: seguir insistiendo. Creo que ese era el plan original, pero no importa.

Ahora estoy buscándola para hacer otro intento, Joseph está a mi lado, se supone que estamos de camino a la cancha de futbol pero yo tengo mis sentidos puestos en encontrarla en el camino. Creo que se ha dado cuenta ya de mi actual estado, pero no dice nada y mira su teléfono todo el rato.

Cuando la veo está caminando con Emilia, una amiga suya, a algún salón.

—Hola, lindura —le digo a Emma cuando llego a su lado. Ella se limita a rodar los ojos. Joseph se ha quedado más atrás esperándome con la vista en su teléfono.

—Hola, Rebwoth. ¿Se te ofrece algo? —dice en tono cansado. Emilia está a su lado atenta a toda nuestra conversación.

—Sí, quiero que aceptes una cita conmigo. Y la respuesta tiene que empezar en una s y terminar en una i.