3- Somos manada

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Scott estaba algo cansado, de ser el alfa, veterinario, esposo, hijo, amigo y otras cosas más; no era fácil, menos si tu ciudad era Beacon Hills, donde se hallaba un árbol con magia que atrae todo lo sobrenatural, aún más si tu mejor amigo, hermano, confidente y ex emisario no había dado señales de vida por semanas. Quería ir a buscarlo, pero no podía, tenía obligaciones que cumplir y porque tal vez, este se encontraba en una de sus tantas misiones secretas de las cuales él se enteraba casi 3 meses después..

Pero dejando eso de lado, hoy casualmente tenía el día libre; y quería pasarlo con su querido esposo, para luego cenar con su madre y Cris. Así que, primero iría a despertar a Isaac antes de que el desayuno se enfríe, este último se encontraba extraño desde hace unos días, tanto que la noche anterior, cuando Scott quería ser un poco "feroz" casi fue mordido por el lobo, Isaac se disculpó y le dijo que eran "cambios de la luna", pero eso no tenía sentido, él también era un lobo y no tenía ningún cambio; aunque ahora que lo piensa, su lobo le pedía ser más cariñoso con Isaac.

Nada era normal en su vida, se dice mientras sale de la cocina, dirigiéndose al dormitorio, pero antes de subir recibe un mensaje y al tomar el celular ve que se trata de Stiles.- Scotty, necesito a todos en la casa de Peter y papá, diles que son cosas de manada, a las 11. Yo me encargo de Lydia y Jackson.Te quiero. SS.- Adiós día de descanso, hola vida de Alfa con lobos enojones y cachorros problemáticos.- Suspira mientras sube las escaleras, al menos podría cenar con Isaac. Al fin algo bueno.


Reunir a la manada no era algo fácil, ya no eran adolescentes (la mayoría) que podían salir de clases y correr por el bosque mientras atrapaban a los malos; ahora eran adultos, con responsabilidades, nuevas metas, lugares que querían visitar y el deseo de establecerse y formar una familia en la ciudad que los vio correr, crecer y morder..

Un claro ejemplo eran Jordan y Malia, una pareja que comenzó con encuentros casuales y sin ataduras, y que con el pasar de los años se volvieron más cercanos, a tal punto que hace casi dos años, un día que la manada decidió salir a comer, anunciaron que se casarían y que serían padres. Si, padres, en ese momento todos en el comedor dejaron de hablar y los miraron como si fuera una broma, pero ellos nunca bromeaban o al menos no con algo así. Mientras intentaban procesar la noticia, Peter se levantó y fue a abrazar a Jordan para luego comenzar a oler a Malia hasta que lo sintió, leve pero ahí estaba, un pequeño latido junto a un olor a castañas. 

Y comenzó a llorar, no Malia, ni Parrish, sino Peter, sí, ese Peter, el ahora "abuelo lleno de lágrimas" Peter Hale, quien tras años de idas y vueltas logró mejorar su relación padre-hija, quien fue perdonado por la manada y que ahora tras meses de estar molestando o como decía Peter "conquistar al guapo sheriff" vivía junto a Noah como una pareja feliz. Algo confundida y un poco emotiva, tal vez por las hormonas, Malia lo abrazó e intentó calmarlo, y al no lograrlo decidió que enviaría el problema a Noah; quien arrastró al nuevo abuelo a su sitio y le dijo que se comportara porque sino Malia lo golpearía y eso no sería bueno para su nieto o nieta; aquello provocó risas en la manada que comenzó a felicitar a la pareja por el nuevo integrante y hacer apuestas de si sería un bebé humano, coyote, hellhound o si al pertenecer al largo legado lobuno Hale, tal vez sería un lobo.

Y luego de tanta espera, resultó ser un niño coyote a quien llamaron Tyler Parrish Hale, que ahora a sus casi 2 años, era una mezcla rara y hermosa entre Parrish y Peter. Cuando comenzaron a ver el parecido, Malia estaba enamorada de su bello hijo, pero horrorizada de que se pareciera a su papá, la pareja solo esperaba y rogaba que su pequeño no tuviera el sentido de humor del mayor o sus días ya no serían tan tranquilos.


Y viendo cuán felices eran ellos, Erica y Boyd intentaron quedar embarazados, cabe recalcar que se esforzaron en intentarlo y lo lograron, fueron los 5 meses más hermosos para la pareja; hasta que un día, mientras la manada entrenaba, la pareja lo sintió, todos los sobrenaturales ahí lo sintieron, los latidos habían cesado. El llanto de Tyler los hizo reaccionar y se dirigieron hacia el hospital; mientras Scott llamaba a su madre para que estuvieran preparados, pero al final no se pudo hacer nada.

Fue la primera vez que vieron llorar a Boyd, estaba desconsolado; Erica era todo lo contrario, no lloró, ni gritó y eso fue aún más preocupante, el doctor dijo que estaba en shock. Esos días en el hospital se sintieron como años, todos se turnaban para no dejar a la pareja sola, y cuando Erica fue dada de alta, Boyd les dijo que querían estar solos y conversar, y así lo hicieron. Estando en su casa, subieron las escaleras hacia el cuarto que habían preparado y que estaba lleno de pequeños y grandes juguetes(regalo de la manada) Erica explotó, destrozó todo en cuestión de segundos, mientras lloraba y maldecía porque la vida les quitó a su pequeña, una niña, los doctores dejaron que la vieran y así despedirse.

Ese fue un tiempo oscuro donde ninguno de los dos salió de casa, y luego, a insistencia y preocupación de la manada comenzaron a ir a terapia, contando a desconocidos sobre su dolor y escuchar que no eran los únicos, que dolería, que siempre dolería, pero que con el tiempo volverían a sonreír y que juntos podrían salir adelante.


Después de meses, se comunicaron con la manada para almorzar, y mientras veían como Tyler intentaba levantarse usando sus lindas y pequeñas manos, dijeron que dejarían la idea del bebé, que debían sanar y por el momento serían solo ellos. Centraron su vida en las preparaciones de su boda, fue un acontecimiento hermoso, rodeado del bosque y de quienes los querían; para después centrarse en su trabajo como policías. Y la vida continuó su curso, el dolor aún estaba, algunas veces lloraban en la cocina, en el trabajo o mientras compraban los víveres de la semana; pero sabían que podrían superarlo, juntos lo harían, porque se lo prometieron el uno al otro

"Estoy dispuesto a convertirme en tu apoyo en la vida, en un miembro de tu familia, en tu única y eterna pareja.

Tu sonrisa calentará mi corazón, tus lágrimas la romperán. 

Ya sean en tiempos de dolor y sufrimiento, o en tiempos de alegrías te apoyaré y te acompañaré.

Hasta que el cielo se caiga y la tierra envejezca.

Y hasta que los océanos se sequen." 



Y de eso casi un año.




**Los votos no son creación mía, sino unos que leí en una Novela Ligera hace unos 3 años, me encantaron tanto que hasta ahora lo tengo guardado. La verdad no sueño con casarme, pero si algún día lo hago, quisiera decir eso a esa persona "especial".

A tu lado-SterekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora