♥𝓔𝓵 𝓒𝓾𝓲𝓭𝓪𝓭𝓸 𝓓𝓮 𝓔𝓼𝓹𝓮𝓬𝓲𝓪𝓵 𝓓𝓮 𝓜𝓲 𝓢𝓮𝓷𝓹𝓪𝓲♥

Estoy aqui

Utahime luego de desabrochar la camisa la abrió de par en par dejando ver una camiseta de mangas cortas, con un poco de dificultad saco por completo la camisa dejándolo en la camiseta de tela fina.

-Con eso bastará para que respires mejor...-

Mientras de vez en cuando remojaba la toalla, miraba su rostro y se asombrada por la belleza aunque no lo admitiría. Todavía era muy temprano y ella no había dormido lo suficiente, así que cayó dormida un tiempo después arrodillada en el piso apoyando su cabeza y brazos en la cama de gojo.

[Tiempo Despues]

[...]

Gojo poco a poco abría sus ojos, vio que ya había amanecido y luego sintió algo húmedo en su cabeza, lo tomó y vio que era una toalla humedecida. Miró confundido y luego bajo la mirada y vio a Utahime.

-Utahime...?- vio como estaba a su alrededor.

Medicinas, botellas de agua y ella sentada en el suelo apoyada en su cama dormida. Su corazón comenzó a latir muy rápido y su cara estaba completamente roja, estaba agradecido de que nadie lo viera así.

-Utah...- sonrojado comenzó a acariciar el cabello de ella.

Al parecer todavía se había curado por completo, pero si se sentía mejor. El salió lentamente de su cama y al parase se mareo pero se compuso fácilmente, tomó a Utahime en sus brazos como pudo y la dejó en su cama.

-Te enfermaras si estas ahí en el suelo también- luego se recostó a su lado y comenzó a acomodar su cabello.

Mientras la acariciaba ella despertaba poco a poco hasta verlo ahí cerca de ella, Utahime abrió de par en par los ojos.

-Gojo!?- grito

-Auch~ No grites Utahime, todavía me duele la cabeza- dijo advirtiéndole en un tono juguetón.

Ella se sonrojo.

-Idiota! Si te sientes mejor entonces es hora de que me vaya...!-

Trato de pararse pero unos brazos la rodearon y con mucha presión no la dejaban ir.

-Gojo...Déjame...ir...!!!-

Trataba de apartar sus brazos pero por alguna razón el seguía ganando aunque estuviera enfermo.

-Mmm~?, parece que aun que yo este enfermo sigues siendo débil~-

-Ugh- Cállate!- el solo soltó una pequeña carcajada.

Luego de un momento ellos quedaron en silencio mirándose a los ojos, sus corazones comenzaron a latir más rápido.