Dragon Ball la Novela: Saga del Emperador Pilaf

Capítulo 1: Bulma y Son Gokū

(El mediodía del 1 de septiembre del año 749...)

(La escena pasa por algunas montañas, antes de tomar un camino de tierra con un árbol lleno de enredaderas y un río a la derecha. Dos monos estaban colgándose de las enredaderas, chillando felizmente.)

Hace mucho, mucho tiempo, profundo entre las montañas, a miles de kilómetros de la ciudad... aquí es donde nuestra historia fantástica empezará...

—¡Hola, buenos días!— El protagonista de nuestra historia, Son Gokū, de pelo negro puntiagudo, vestido con un atuendo azul con un Nyoïbo* colgándole de la espalda, le saludaba a los monos entretanto estaba rodando sobre un tronco cuesta abajo.

*Nyoïbo: lit. bastón obediente.

El tronco rueda cuesta abajo, mientras Gokū estaba balanceándose encima de él con una sierra en mano.

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(La escena muestra a Gokū enfrente de la casa de su abuelo, con ese mismo tronco en el suelo.)

—¡Hmph!— Gokū gruñía mientras miraba fijamente al tronco. —¡Yaah!— Gokū entonces empezó a agarrar el tronco por sus lados y lo tiró hacia arriba. Cuando el tronco llegó al suelo Gokū le dio una patada que lo rompió en varias piezas ordenadas.

—¡Terminé de cortar la madera!— Exclamaba Gokū mientras recogía los trozos de madera dos por dos. —Tengo hambre...— Decía Gokū mientras andaba de vuelta a su casa con unos cuantos trozos de madera en sus manos.

(La escena se sitúa dentro de la casa del abuelo Gohan, en la cual había una cama con una lámpara a la derecha, una escoba, paraguas, y dos collares en los que había colgando varias nueces a la izquierda, y dos mesas al centro, una en la que reposaba, encima de una almohada morada, una Bola de Dragón de cuatro estrellas.)

—Abuelo, voy a conseguir algo de comida.— Gokū se sentó en frente de la Bola de Dragón y le rezaba. Pronto después se levanta, y sale de la casa dirigiéndose a la derecha.

—¿Qué podría comer hoy...?— Gokū se preguntaba a sí mismo mientras iba por un camino de tierra.

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(La escena se sitúa en otra parte del bosque, los pájaros cantan en el fondo. Una adolescente de pelo turquesa estaba mirando de un lado a otro, un coche verde detrás de ella.)

—Debería de estar por aquí...— Decía la adolescente, observando al parecer un radar blanco de pantalla verde, que mostraba unos puntos amarillos en la posterior. —Hmm... ¿Quizás un poco más al oeste?— Preguntaba mientras presionaba un botón en el radar que lo apagaba. —¡Tiene que estar aquí, por alguna parte!— Exclamaba ella mientras se subía al coche verde y lo condujo por un camino al lado de un precipicio.

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(La escena se sitúa en el medio del bosque, un gran pez chisqueando se escuchaba, Gokū se ve caminando cerca de un precipicio con una cascada cercana.)

—Hace un rato me comí un oso...me pregunto si hay algún tigre cerca...— Indicó Gokū, mientras caminaba más y más cerca del precipicio hablado anteriormente. Gokū oye el chisqueo del pez, y se asoma sobre el acantilado. —¡Ok! Ya era hora que comiera pez alguna vez.— Decía Gokū, el cual se tiró del precipicio y se agarró a la rama de un árbol en la base del precipicio. Cuando se agarró a esa rama, saltó dando una vuelta y se posó sobre una roca en el lago al final de la cascada. Gokū entonces se empezó a quitar su atuendo y metió su cola de mono en el agua.

—¿Hm?— Se sorprendió el pez y se giró en la dirección de la cola del niño. —¡¡Jajajaja!! ¿¡Qué tenemos aquí, un mono!? ¿¡Un gato callejero!?— Se rió el pez, y subió rápidamente a comerse a Gokū. Cuando salió de la superficie, Gokū apartó su cola del agua, y con mucha fuerza, pateó al pez y lo dejó inconsciente.