-El reloj y dulces- (Clorivia)

♡Capitulo Único◇

1663 Palabras-
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Las cosas se calmaron en Fontaine, ahora sin un arconte, la gente se las arregló para seguir después de la subida del agua, las cosas se tranquilizaron, pero para Poisson no era así

Navia estaba cargada de trabajo, debido a la destrucción que sucedió en Poisson, y la pérdida de varios, su tiempo libre era poco, y al ir a casa estaba demasiaso cansada…

“Quisiera tomar té contigo, puede ser en tu casa si lo deseas”

Esas palabras rondaban por la cabeza de Navia, luego de lo sucedido con el caso de las chicas desaparecidas. Ella y Clorinde se hicieron amigas, tomaron té juntas varias veces, hasta lo que sucedió en Poisson, donde Navia ya no tenía tiempo de hacerlo

-Vaya…por alguna razón… no hay demasiado que hacer hoy-

Penso Navia al notar como todo estaba tranquilo, recordó las palabras de Clorinde, quizá debía aceptar, y darle un té en su casa
Camino un rato por Poisson, donde la encontró

"Clorinde!"

Navia expresó, acercándose a donde estaba
"Creo que….si, te daré un té en mi casa….como antes"

Sono algo apresurada, Clorinde le miro con sorpresa, pero luego solo asintió

"Bien, estaré allí a las 7"

Respondio, siempre tan corta con sus respuestas

"Te esperaré!"

Navia emocionada se fue, como una niña pequeña, supongo que no quedaba demasiado tiempo para las 7, para conversar

"Conversar…."

Navia miro su hogar al llegar, ella había desarrollado ciertos sentimientos, que decidió ignorar, pero el volver a juntarse con Clorinde, sentia que volverían, vaya….quien diría que se enamoró de su propia amiga

◇♡

El tiempo pasó, tan rápido que nisiquiera Navia lo noto, preparando algunos dulces con amor, y un té, que sabia que a Clorinde le gusta, Navia lo sabia

“Toc toc”

Navia reaccionó, justo terminó de poner la mesa, 2 tazas, con varios platos llenos de dulces y al medio una tetera

Camino con rapidez, sin siquiera quitarse el delantal que ella estaba usando al cocinar, la puerta se abrió, los ojos de Clorinde se abrieron con un leve espanto, luego de unos segundos solo soltó una suave y cálida risa, algo que Navia amaba

“Navia…estas llena de masa y crema”

Navia se sorprendió y luego se miró, notando que ella estaba en lo cierto, incluso su ropa se manchó, quizá fue su emoción la que hizo que no lo notara, pronto Navia se sonrojo avergonzada

“Entra! Eh…me cambiaré, ya está puesta la mesa…donde siempre”

Navia dio un suspiro antes de entrar en la casa, caminando rápidamente a su habitación, donde al entrar rápidamente buscó ropa para ponerse

Por otro lado, Clorinde, que cerró la puerta detrás suyo, vio la casa, llevaba un tiempo sin venir, así que miro cada detalle, las flores, cuadros, luces y demás. Finalmente llegó a la mesa, viendo unos dulces, galletas, panqueques y una torta

“Como podría ella cocinar esto tan rápido?”

Se cuestionó, y luego se sentó en la silla, sintió el olor del té, se dio cuenta que era su favorito, sonrió al saber que Navia se preocupaba por eso, sintiendo sus mejillas arder levemente
Ella también amaba a su amiga, pero nunca dijo nada, pensando