El nudo en la garganta le hacía que fuese imposible siquiera expresar algún sonido.
Eso que le había hecho Lady era traición.
O al menos él así lo consideraba.
¿Cómo siquiera se le ocurrió entregarle su corazón en algún momento?¿En qué carajos pensaba cuando decidió confesarle lo mucho que la amaba?¿Cómo pudo aceptar el sentimiento mutuo sin saber las consecuencias que esto tendría?
La confianza y el amor que formó con ella por años lentamente se desmoronaba, el dolor llenaba lentamente su ya roto y fragmentado corazón. A pesar de que lo habían apuñalado, empalado, cortado, electrocutado, cercenado y muchas más situaciones dolorosas está punzada al corazón había sido una de las más dolorosas en su vida, quizás solo comparable con la muerte de su madre y la desaparición por décadas de su tan querido hermano Vergil.
Ella solo lo habia utilizado, pero que podía esperar de una chica como Lady, tan directa, tan dura, tan ella...Dante no podía negar que cada día su amor por ella creía tanto como estaba creciendo su dolor ahora mismo. Quizás, debería volver a su antigua vida donde nada importaba, dónde no le importaba vestirse bien, dónde era poco importante tener una barba de días, el cabello desaliñado y apestando a sangre y viceras de demonio; si, quizás cerrar nuevamente su corazón a la debilidad, a la debilidad por ella sería la mejor decisión para superar este dolor creciente que lo carcomía.
Dante estaba sentado en el sillón del negocio que ahora compartían juntos, pensando en la cadena de plata que pensaba regalarle hace algunos días con tanto entusiasmo, sabía que el que antes tenía se había destruido a causa del último trabajo que habían tenido juntos, creyó que sería un buen regalo pero ahora...
¿Que hacía con el? Quizás empeñarlo para pagar las cuentas fuera una buena idea ahora.
Ahora mismo ella no era ni "Mary" ni "Lady" solo era un traídora sin escrúpulos y sin remordimiento. Si, era su nombre: "Traidora".
-Te dije que esto pasaría, Dante- allí estaba ella y su voz llena de frialdad, casi como si lo odiara. Cómo si le escupiera.
Su ceño fruncido hacia que sus ojos heterocromaticos se vieran más hermosos, sin embargo no podía caer otra vez en sus encantos, ya había perdido tanto confiando en ella la primera vez.
El la miro con sus ojos enmarcados en una tristeza. -te amaba, pensé que tú también lo hacías, pensé que éramos un equipo, que era verdadero...
El bufo de Lady se hizo notar, demostrando su intención de detenerlo. -No seas dramático, aún te amo y se que tú me amas.
Las palabras de esa desconocida ahora para el eran....tan frías, dolorosas, eran peor que los cortés de la Yamato de su hermano o que los golpes de Nero. Nunca se pudo imaginar que la mujer a la que le entrego su corazón lo engañara de tal forma.
Si, ella realmente había roto su hogar, su pequeño nido de amor y de confianza, todo reducido a nada.
Merezco al menos una explicación, ¿Que hice para merecer esto?.- su voz se desgarro, casi parecía que podría llorar en cualquier momento al intentar suplicar alguna explicación sería.
Fue una tontería Dante, no lo volvere a hacer.- Dijo su ex-amada con fastidio, ¿Cómo era siquiera capaz de amenorizar su error? ¿Cómo podría confiar en ella ahora que sabe de lo que es capaz?
Luego de unos pequeños segundos ella siguió hablando.- Esto no hubiera pasado si escucharás lo que te pregunto y digo...
- ¿Dime ahora como podré confiar en ti Lady? Destruiste toda mi confianza...
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Impunidad
HumorDante nunca pudo imaginar que ella fuera capaz de hacerle algo de esas dimensiones, la traición de la que dice ser su amada fue inmensa. -------------------------------------------------- Videojuego: Devil May Cry Créditos de la imagen: @super-jump...