COMEDOWN | L.R.H

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Sonreí observando la selfie que Luke me había mandado. Adoraba el brillo que su mirada reflejaba y sabía que estaba feliz.

Luke estaba en ensayos. La banda daría un show en un festival aquí mismo en la ciudad después de casi un año sin presentarse así que todos estaban bastante concentrados en eso.

Me emocionaba saber que por fin Sky podría ver a su papá tocar en el escenario en vivo y a todo color. Antes solo le he mostrado videos y amaba verla reconocerlo a él al igual que sus tíos favoritos.

Creo que Luke también estaba muy ansioso por poder ver a Sky desde algún punto del escenario.

Aprovechando que Liz seguía en la ciudad y tratando de no abusar de su confianza, dejé a Sky bajo su cuidado mientras atendía unos asuntos de la galería.

A pesar de no ser temporada alta, había buen flujo de ventas así que lo único que me interesaba en el momento era revisar los envíos pendientes.

De camino a la galería no pude evitar sentirme distraída. Había despertado con una sensación extraña en mi interior. Incluso Luke fue el primero en decirme que me notaba curiosa y le dije que no sabía la razón.

Aún así traté de concentrarme en llegar sana y salva a mi destino y una vez entré, sentí la tensión en mis hombros desaparecer lentamente.

Para nadie era un secreto lo mucho que amaba mi trabajo. Quizás por eso estar en mi galería no lo sentía como un trabajo si no como un pasatiempo. Encendí las luces del lugar y mantuve el aviso de 'cerrado' porque aún no era hora de abrir.

Venir sin Sky era muy silencioso. Estaba acostumbrada a escucharla balbucear palabras y tratar de decirme cosas que realmente no tenían mucho sentido aún.

El hormigueo en mi estómago continuó el resto de la mañana. Entre escribir correos y asegurarme que las obras que enviaríamos estaban correctamente empacadas, la hora de la comida llegó y con ello Dana, Rubí, Liam y Wang también.

Dana siendo la que muy seguramente le ofrecería un contrato fijo después de que termine sus prácticas. Me reflejaba mucho en ella y su manera de trabajar.

"¡Oh no! ¿Por qué no vino mi dulce Sky?" Alcé la vista de mi laptop a Dana que tenía una mueca pintada en el rostro observando el sitio vacío donde usualmente estaba mi bebé.

"Porque está al cuidado de su abuela"

"¿La mamá de Luke está aquí?" Yo asentí. "Cool. Apuesto a que Sky está siendo consentida en exceso"

"Solo un poco" Reí terminando de escribir un correo.

"Así que..." La chica tomó la silla frente a mi para dejarse caer y me miró nerviosa.

"¿Si?"

"Umm... Quería preguntarte algo, bueno, proponerte"

"Te escucho" Asentí cerrando mi laptop para darle toda mi atención.

"Umm, bueno, recuerdas el proyecto en el que he trabajado desde el año pasado..."

"¿Ya terminaste?" Abrí grande los ojos y ella asintió mordiendo sus labios. "¡Oh por Dios Dana! Por qué no me dijiste con tiempo, tenemos la agenda llena hasta el próximo año..."

"¡Lo se! ¡Y me va genial! Claro, a menos de que ya no me permitas exponer porque en diciembre terminan mis prácticas..."

"¡No! ¡Por supuesto que no! Eres bienvenida a exponer aquí siempre que podamos encontrar el momento indicado... Aww Dana" Abrí el cajón de mi escritorio sacando mi agenda.