What Are You Afraid Of?

14

Al haber pasado treinta minutos caminé de nuevo hasta su puerta luego de agarrar valentía.

Grande fue mi sorpresa al ver todo intacto, la cena, las flores, la carta, Anna no lo había recogido.

Tal vez no estaba en su departamento, puedo seguir aquí y esperar a que llegue o volver mañana, pero estoy convencida de que quiero arreglar las cosas con ella.

Unas voces me sacan de mis piensamientos mientras levanto las cosas del suelo, y segundos después veo un par de pies frente a mi.

- Anna... - susurro al verla, preciosa como siempre.

- Bada - responde también en un susurro, la noto sorprendida por mi presencia, claro, yo también lo estaría.

- Kayoung, hola - la saludo fingiendo una sonrisa porque en realidad no me agradaba en absoluto que este aquí con Anna en su edificio y supongo que iban a su departamento, así que eso me agradaba menos.

- Hola, Bada, ¿cómo estás? - me pasa la mano y la correspondo con un apretón. - Anna, creo que es mejor que yo me vaya - sugiere pero la linda castaña sólo me seguía mirando.

- No, no te preocupes Kayoung, yo ya me iba - sonreí apenada, estaba sintiendo demasiada vergüenza en este momento.

Anna y Chocol estaban viniendo juntas y yo estaba parada como una estúpida con un ramo de flores, una bolsa de comida y una carta.

Vergüenza nacional.

- Bada... - vuelve a hablar Anna - ¿Qué haces aquí? - pregunta con timidez.

- Sólo estaba dando un paseo por aquí, pero ya me voy a mi casa - respondí nerviosa.

- ¿Y esas flores? - pregunta.

- Uh... eran para una amiga, pero no la encontré, supongo que las llevaré a casa - digo riendo con pena. - que tengas linda noche, Anna - le doy una sonrisa sincera - perdóname - susurré sólo para ella y me alejé despidiéndome de Chocol con la mano.

Aguanté mis lágrimas hasta estar en el auto, pero ya no pude más y me largué a llorar como un bebé.

🌊

- Nadie podrá amarte como yo, linda, entiéndelo - repite acariciando mi mejilla, cada toque suyo me dolía en este momento después de la cachetada que que me había dado hace unos minutos.

- Si me amas, ¿por qué me haces esto? - susurré entre lágrimas.

- No te hago nada, mi amor... sólo estoy enseñandote a que te portes bien, ¿no entiendes que eres solo mía, cariño? - acariciaba mi mejilla y su toque cada vez se volvía mas duro.

- Pero... pero no hice nada malo, Chae - vuelvo a llorar - lo juro, lo juro... estábamos bailando porque teníamos que hacerlo, es por la academia, lo juro - y no soporto y vuelvo a romper en llanto.

- ¡Me importa una mierda, Bada! - grita tirando de mi cabello - ¿Crees que estoy contigo para que sigas comportándote como una zorra con tus compañeras? Si quería una prostituta iría a buscar una, no eres mi novia para que sigas...

- No soy ninguna zorra - susurré.

- ¿Qué? - preguntó con una sonrisa burlona.

- Que no soy ninguna zorra, Chaeyeon - hablo más firme - es mi trabajo, sólo estaba bailando con una compañera porque tenía que mostrar la coreografía a mis alumnos, es todo, lo juro, linda.