VIOLET EYES [RAN HAITANI] (SIN EDITAR)

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Pasaron algunos días desde ese día. Mikey estaba serio como de costumbre, sentado en aquella mesa grande donde había muchas personas entre ellos estaba una hermosa mujer coreana,  Seo-Jun, quien miraba con atención aquella organización llamada "Bonten". Tenía ganas de asociarse con ellos pero sabía que ellos no se meten con cualquiera, sin embargo, ella no es cualquiera, es una mujer, sospuso.

~ La señorita Seo-Jun es quien ha logrado tanto en poco tiempo, tiene organizaciones ocultas en toda Nueva York, y han de saber que esta cuidad está repleta de agente del FBI, sin duda una mujer de admirar. -exclamo uno de los ejecutivos que secretamente era también su socio

Seo-Jun: ay vamos, no es nada que no se pueda hacer, solo se necesita ingenio. -actuo con modestia

~ claro, también tiene socios en México, ella ha ido más lejos, con el mercado de la marihuana y cocaína.

Seo-Jun: claro, deja muy bien dinero, y a veces encuentras a unos consumidores muy fieles -miro a sanzu- ¿Cierto Sanzu? -una voz coqueta continuaba saliendo de sus labios.

Sanzu la miro serio y algo disgustado.

Seo-Jun: el mercado de las fuentes grandes como lo son la mercancía de la cocaína y heroína es un negocio muy demandado, la gente de Japón y grandes partes de hacia han consumido una gran parte de las toneladas que he mandado hace menos de un mes, exportar por mi cuenta es muy arriesgado y también complicado.

~ Por su puesto, somos las organizaciones más grandes del norte, sur y oeste de Asia, nuestro plan y sigue a pie, todos podemos colaborar con nuestra fuente de exportación.

Kokonoi: ella es de corea, estaría ganando un dos por ciento más de lo que ganaríamos nosotros... ¿En qué nos beneficia también ser socios? -pregunto serio

Seo-Jun: Kokonoi ¿No?... Ser mi socio implica nuevas inversiones y ganancias que rondan entre los 10M en tan solo un mes, he escuchado que ustedes tienen dominada gran parte la cuidad, yo exportó alrededor de solo una tonelada al mes, se va como agua entre las manos, con ustedes cómo socios, podremos expandir el terreno.

Kokonoi: tenemos problemas con eso "terreno"... -miro a mikey.- No lo veo conveniente.

Ran: tampoco yo.

Kokonoi: es una suma tentadora pero implica muchos riesgos más de los de ahora.

Mikey: venimos hasta Nueva York para hacernos socios, no prestare mis terrenos para el cultivo de esas mierdas.

Todos los presentes se quedaron boquiabiertos.

Mikey: he prestado a mis hombres, en especial a Sanzu, no estoy satisfecho con la paga tan miserable que han podido juntar. La respuesta es no, no nos vamos a meter en el narcotráfico.

Seo-Jun: p-pero, les conviene la cantidad que les ofresco es una miseria con la que tendrán en un año, si aceptan-

Ran: Mikey dijo que no, y un no es un no.

Seo-Jun: Es que esto no..

Ran: el negocio te beneficia al 90% a ti, nosotros solo reuniremos una miseria con lo que tú ganaras en semanas.

Kokonoi: el contrato continúa como siempre, y la paga subirá al menos un 5% más.

~ ¿M-más?.

Kokonoi: les recuerdo que los que tienen más beneficios son ustedes, tenemos muchas otras organizaciones ansiosas por nuestros enlaces. A nombre de Mikey y Bonten, gracias por la invitación. -tomo sus papeles y se marcho.

Seo-Jun: ¡Hey! -se puso frente a Ran obstruyendo su paso.- Tu te ves un poco más razonable, ¿Que te parece hablarlo más tarde?... Ya sabes. -toco su pecho intentando rentarlo.

Ran: ¿A quien quieren engañar?. -Seo-Jun lo miro, extrañada y al mismo tiempo sorprendida.

Mikey y los demás ya estaban afuera.

Ran: ya se te acabaron las inversiones, y tus socios son igual o más incompetentes que tú, nosotros somos una organización con muchas fuentes y por eso te urge que aceptemos... -la como del mentón y le sonrió.- Eres una perra que solo quiere más dinero, tu problema es que no sabes cómo gastarlo, por eso te quieres pudrir en él, no vales la pena en lo absoluto.

Sus ojos desaparecieron de rabia, Seo-Jun podía ver que lo único que le provocaba era repulsión y lastima, se sintió una miserable.

Ran: y no me toques así -sostuvo sus muñecas apartandolas de su pecho.- A mi mujer no le va a gustar saber que otra mujer me toca. -sonrió orgulloso.

La puso a un lado y camino hasta la gran puerta de cristal, salió y camino a un lado de Kakucho quien estaba atrás de Mikey.

Seo-Jun se quedó parada viendo como se marchaba su oportunidad de ganar mas dinero, frunció el seño, se sentía humillada, apretó sus puños y mordió su labio inferior, sentía tanta rabia e impotencia.

Seo-Jun: me las vas a pagar Ran Haitani...

  [ … ]
El teclado de Ran era lo único que se escuchaba en la habitación, estaba chateando con tn, tenía una sonrisa en su rostro, su felicidad era evidente.
Rindou por otro lado intentaba ver la televisión pero el "Tak tak" lo escuchaba cerca y no podía estar en paz.

Ran y tn pudieron hablar más, a lo largo del viaje, ya que el contrato no se firmó solo Kokonoi se encargaría de organizar el nuevo contrato.

Ran: ¿Sabes cuándo volveremos?

Rindou: tenemos un trabajo mañana, si lo terminamos rápido, esa misma noche nos vamos o por la mañana. -dijo y bebió un trago que sostenía su mano.- ¿Ya te urge irte?

Ran: algo así. -suspiró y dejo su teléfono a un lado.- ¿Que hay de ti? ¿No te quieres ir ya?

Rindou: me da igual

Ran: ¿No extrañas a Nahomi?... -rindou no respondió.- Sabes hermanito, creo que también es hora de que vayas buscando a la madre de tus hijos, aún estás en tus veintes, puedes encontrar a una linda chica que quiera cargar en su vientre a un nuevo Haitani. -sonrió.

Rindou : ¿Eso piensas?...

Ran: claro, ya es hora de que dejemos de ser solo nosotros... -se levanto camino hasta el sofá donde estaba su hermano.- Yo ya entre en mis treinta, pero encontré a la que llevará consigo a los y las nuevas Haitani. Ya estuvo de ser solo nosotros.

Rindou: tu estás loco. ¿Cómo crees que vamos a hacer eso?...

Ran: piénsalo un momento ¿No te gustaría una familia? Una mujer que te quiera y un hijo o hija que ame verte llegar a casa...

Rindou callo y pensó.

Ran: a mí me encantaría, hagamos nuestras vidas, nuestras familias... -hubo un ligero silencio.- A mí me encantaría verte pequeño de nuevo, tenías unos cachetes muy lindos~

Rindou: ¡RAN! -quito la mano de Ran de su hombro con brusquedad, tenía un ligero y muy pequeño rubor en sus mejillas, y debido a su reacción Ran se soltó a reír.