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Chapter 19

La mamá de Jeongguk se queda en la ciudad por unos días más, hasta que está convencida de que no va a hacer algo estúpido como casi morir de pura terquedad otra vez (sus palabras, no las de él). Es agradable tenerla cerca; ella y Jeongguk dan varias caminatas largas juntos, hablando de nada a veces y de todo otras veces, y Jeongguk siente que está comenzando a conocerla no solo como su madre, sino también como su propia persona. También pasan mucho tiempo con Taehyung, que en su mayoría consiste en que su madre les sonríe con cariño y está eternamente encantada por la brillantez peculiar de Taehyung.

(Jeongguk conoce el sentimiento).

Ella los deja con un refrigerador completamente lleno, pasa tanto tiempo adulando a Jimin y Taehyung mientras se despide que Jeongguk interviene de mal humor y casi la empuja hacia la puerta. Él la acompaña escaleras abajo hasta su auto, lamentando su elección de renunciar a una chaqueta cuando salen al aire frío de la mañana.

Después de hacerle prometer que lo llamará al menos dos veces por semana, lo abraza con fuerza y ​​le ofrece algunos consejos de despedida:

“Él realmente te adora, cariño” dice, haciendo que el estómago de Jeongguk se retuerza. Todo este asunto de él y Taehyung todavía es tan nuevo, y las mariposas prácticamente no han parado desde que ambos admitieron sus sentimientos. “Recuerda demostrarle que tú también lo adoras.”

Todo lo que Jeongguk puede hacer es sonrojarse y asentir, porque ambos saben que tiene razón. Ella le sonríe, y él le besa la parte superior de su cabeza, y luego ella sigue su camino. Dejando a Jeongguk para que descubra qué diablos hacer con su situación con Taehyung.

Han estado bastante unidos desde que todo se vino abajo, y Jeongguk no puede decir que le importe. De hecho, le encanta, le encanta tomar la mano de Taehyung y acurrucarse con él en el sofá y, sobre todo, saber que las cosas vuelven a estar bien entre ellos. Se lo están tomando con calma, todavía no se han vuelto a besar, aunque han estado durmiendo en la misma cama casi todas las noches. Jeongguk cree que se deriva de un acuerdo tácito para sanar su amistad primero, y está tan feliz de tener a Taehyung de vuelta en su vida que está contento de esperar todo lo que sea necesario.

Aún así, no le impide pensar en ello constantemente, reflexionando sobre lo que esto significa para su relación, lo que cambiará, lo que permanecerá igual. Quiere darle a Taehyung el tiempo y el espacio que necesita, pero también quiere demostrar que está trabajando como prometió y mostrarle cuánto le importa. Si a Taehyung realmente le ha gustado Jeongguk desde que se conocieron, la idea todavía le sorprende por completo, haciendo que su interior se caliente y aletee cuando piensa en ello, entonces esto es tan importante para él como lo es para Jeongguk. Y Jeongguk realmente, realmente no quiere joderlo.

Después de algunas semanas de preocupación, una vez que las cosas se han calmado y vuelto a la normalidad, termina yendo a pedirle consejo a Hoseok. Él y Jimin básicamente están saliendo ahora, y aunque es repugnante y extraño cuando se besan frente a él, Jeongguk puede decir que están muy felices. También son las únicas personas que conoce que eran amigos cercanos antes de que se juntaran, por lo que cree que tal vez Hoseok pueda ofrecer algo de sabiduría sobre cómo cerrar completamente esa brecha con Taehyung. Además, es menos probable que él le vaya con el cuento a Taehyung tan pronto como termine la conversación.

Se reúnen para tomar un café en la biblioteca, se acomodan en una mesa de un rincón y observan cómo se eleva el vapor de sus bebidas que se enfrían lentamente. Ahora que están en la segunda mitad del semestre, la ingesta de cafeína de Jeongguk se ha disparado considerablemente, y él sabe que sólo empeorará a partir de ahora.

“Entonces, Jeonggukkie, ¿qué tienes en mente?” Hoseok pregunta alegremente, descansando su barbilla en sus palmas. Siempre ha sido una persona alegre, pero últimamente hay algo diferente en él, una ligereza que Jeongguk sospecha que tiene mucho que ver con Jimin. Se pregunta si Hoseok diría lo mismo sobre él y Taehyung.

“Quería pedirte consejo” dice Jeongguk, yendo directo al grano. Esto es algo en lo que ha estado trabajando últimamente, siendo directo acerca de pedir ayuda cuando la necesita. “Acerca de, umm, Tae.”

La sonrisa de Hoseok se amplía y se inclina más cerca, asintiendo con entusiasmo. “Te escucho.”

“Es solo que, bueno, ya sabes, dijimos que nos gustamos después de... ya sabes”, comienza Jeongguk, inquieto en su asiento. Sabe que sus amigos lo han perdonado, pero todavía odia hablar de lo que pasó. “Y las cosas han ido muy bien desde entonces, pero ¿más de una manera amistosa? Y no estoy seguro de cómo demostrarle que quiero dar el siguiente paso” suspira. “Realmente no hemos hablado de eso desde entonces, así que no sé lo que está pensando.”

Hoseok lo considera, con la cabeza ligeramente inclinada hacia un lado. “Así que quieres salir con él, ¿correcto? ¿Una relación en toda la regla?”

Jeongguk se sonroja, quemándose la lengua con su bebida cuando traga demasiado rápido. “Quiero decir, sí” admite. Todavía está pensando en la idea, pero estar cerca de Taehyung siempre lo llena con este tipo de felicidad burbujeante y vibrante, por lo que se da cuenta de que tiene que significar algo. “Eventualmente. Si él quiere eso.”

Hoseok le sonríe, luciendo como un padre orgulloso.

“¡Mi pequeño Jeonggukkie está listo para tener a su primer novio!” Hoseok chilla, encantado. Jeongguk probablemente le daría una patada en la pierna si no le hubiera aguantado tantas gilipolleces de sí mismo últimamente. “¡Y con nuestro Taetae, nada menos!” Suspira soñadoramente. “En serio, pensé que ustedes dos idiotas iban a bailar uno alrededor del otro para siempre.”

Jeongguk pone los ojos en blanco. “Eres uno para hablar” se queja.

“Ugh, lo sé” dice Hoseok con buen humor. “Por eso te voy a dar el mismo consejo que me dio tu chico cuando estaba tratando de averiguar qué hacer con Jimin.”

Jeongguk no se sonroja ante la referencia a Taehyung como su chico, no lo hace.

“¿Qué era...?” pregunta, mirando a Hoseok expectante.

“Invítalo a una cita”. Hoseok se encoge de hombros. “Baja presión, nada demasiado elegante. Pero salgan y hagan algo, solo ustedes dos.”

“¿Jimin no te golpeó cuando le pediste una cita?” Jeongguk pregunta, desconcertado.

Hoseok se estremece ante el recuerdo, frotándose el brazo inconscientemente. “Sí, y también es fuerte, apestaba” dice, sacudiendo la cabeza antes de que su sonrisa regrese. “Pero luego salimos y fue realmente genial. Y ahora... sí”. Sus mejillas se vuelven rosadas. “Valió la pena.”

Jeongguk asiente, volviendo su atención a su café. Él piensa que el consejo de Hoseok es bueno, especialmente si originalmente vino de Taehyung. Ahora solo necesita reunir el coraje para preguntarle a Taehyung y luego orar a Dios para que diga que sí.