"Su error fue caer ante la belleza de ella"
Lianna suele trabajar de dama de compañía por las noches en un club, de ella dependen dos pequeñas las cuales llegaron de una manera no deseada a su vida. Aunque intenta abandonar ese estilo de vida no pue...
Lo que hizo cinco años atrás era imperdonable y lo sabía. Haberla dejado de esa manera fue lo más cobarde que alguna vez en su vida había hecho, JooHee confió en él en el pasado, ambos se fueron juntos de casa para vivir sin terceras personas presionándolos, se dejaron llevar por el supuesto amor que sentían ocasionando un embarazo no deseado, JaeHyun no dejaba de repetirse lo sucedido una y otra vez recalcándose así mismo que era un maldito cobarde, usar de excusa el dinero fue lo peor, sólo tuvo miedo de lo que ser padre implicaba. Tomó una bocanada de aire inclinando su cabeza hacia atrás en el mueble, estaba redactando un informe en su laptop, desde que la mañana inició no dejaba de pensar en JooHee. Si hubiera hecho las cosas bien la situación actual sería otra, miró el árbol de navidad imaginando a su ex novia allí con una sonrisa mientras la niña abría los regalos totalmente emocionada con sus padres. ¿Dejó de pensar en JooHee?, nunca, siempre la recordó en esos cinco años trayendo consigo el peso de la culpa. Era un abogado respetado que tenía un pasado que se negaba a soltar.
Y desde que escuchó la historia de la pelinegra se sintió mucho peor.
Tomó su teléfono abriendo la opción de contactos, pensó en llamarla sin saber lo que diría. ¿Era mala idea que quisiera conocer a la que era hija?, entendía que JooHee lo odiara por lo que hizo, él también se odiaba así mismo. La niña era inocente de ese asunto, había crecido sin un padre y era nada más ni nada menos que Jeon JungKook quien estaba enseñándole esa experiencia. No tenía rencor hacia él, al contrario, estaba muy agradecido por la clase de hombre que era con JooHee y las niñas, era mucho mejor de lo que alguna vez pudo ser en el pasado. Negó con la cabeza dejando el móvil a un lado, cerró la laptop sin poder concentrarse, muchas cosas pasaban por su mente haciéndole sentir ansiedad. El intercomunicador del departamento se escuchó, JaeHyun se colocó de pie acercándose al aparato junto a la puerta, presionó el botón hablando:
—¿Hola?
—Buenos días, abogado Jeong—era la voz del hombre de seguridad del edificio donde vivía—Feliz navidad. Hay un hombre aquí que quiere verlo.
—¿Un hombre?—frunció el ceño. Hizo un repaso mental estando seguro de no tener citas con ningún cliente—¿Cómo se llama, ahjussi?
—Oh Sehun—sus cejas se levantaron. ¿Qué hacía ese tipo en su edificio?—¿Lo conoce?
—Dígale que bajaré en un momento.
Recogió sus cosas de la sala llevándolas a la habitación, se cambió por una ropa más abrigadora en cuestión de minutos, no sabía que hacía ese hombre allí, ni loco lo dejaría entrar a su departamento, tampoco debía sorprenderle esa visita, apagó el televisor de la sala saliendo del lugar, aseguró la puerta para luego caminar al ascensor, bajó en aquella caja de metal donde las puertas se abrieron permitiéndole su salida en planta baja, JaeHyun distinguió a Sehun en uno de los muebles de recepción, vestía de negro, sus manos se encontraban cubiertas por guantes de cuero, la sonrisa que le dio al verlo no le gustó, era de alguien que se creía superior.
—Señor Oh—saludó con seriedad—¿Qué hace aquí?
—Es un lindo edificio, abogado Jeong—miró alrededor—Veo que se da algunos lujos también.
—¿Necesita algo?—quería que fuera al grano. Lo miró levantarse acomodando su abrigo largo.
—¿Le apetece un café mientras hablamos?, creo que esto podría interesarle—por su expresión, Sehun supo que no confiaba en eso—Tranquilo, no pienso asesinarlo ni secuestrarlo.
—¿Por que vendría a verme entonces?
—Repito, vine a hablar con usted. ¿Nos vamos?
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