IRRESPONSABLE [+18] •PAUSADA•

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La cuenta regresiva había iniciado, la Premier league estaba a tan sólo unos días de comenzar.

El Tottenham estaba preparado, el equipo técnico completo y cada uno de los jugadores ya habían llegado al país rico en petróleo.

Los chicos estaban obviamente emocionados, y alguno que otro nervioso, pero la remaban para disfrutar cada momento a partir del minuto uno en Inglaterra.

Ellos reían, jodían y eran un tanto ruidosos mientras exploraban el recinto donde se hospedaron durante su estadía en el país anfitrión.

Ciertamente el lugar era increíble y lleno de lujos, a demás que fue elegido particularmente para ahorrarse los constantes traslados de los jugadores y así poder sacarle provecho a miles de beneficios; sin lugar a dudas había sido una magnífica elección por parte del presidente.

Mientras que los muchachos estaban en su mundo jodiendo, uno de ellos estaba ligeramente apartado del grupo de futbolistas. Aparentemente nadie se había dado cuenta de la lejanía de Son.

ni él tampoco notó cuando se apartó tanto de los chicos. Su clara mirada ahora bañada en curiosidad, estaba puesta firmemente sobre la ronda improvisada a unos cuántos metros de ellos.

Una ronda cuya organización había sido por parte de ange, quien ahora se reunía con el equipo técnico, hablando de cosas que Son no escuchaba, pero que quería saber solamente por chusma.

El omega de ojos rasgados se caracterizaba por ser muy curioso, no era novedad, parecía orgulloso de eso. De forma disimulada fue acercándose al círculo humano; no iba de una porque no quería llamar la atención, pero al menos para escuchar algo de cara dura que era.

-¿Qué hacemos?

Su distracción era tanta que el susto que se pegó fue algo de otro mundo, Son casi se muere de un infarto sin exagerar, o capaz que sí.

El chico llevó una mano a su pecho y se giró de inmediato para encontrar al "gil" que lo asustó, pero sus deseos de putearlo, se esfumaron en el aire cuando se encontró con el par de ojos más lindos de todo el Tottenham, según él.

-¿Sos boludo?, me hiciste cagar todo.

El alfa rio divertido, en parte burlándose por la carita de espanto que había puesto su compañero, tal como si hubiera sido descubierto en plena trampa.

-Bue, vos también te asustas de nada -declaró dando unos pasos más cerca del delantero.

- ¿Estás chusmeando de qué hablan?

Son entrecerró los ojos y Romero otra vez se estaba riendo, era increíble la comodidad que sentía cada vez que estaba cerca del argentino. El boludeo era tan natural con él.

-Nah... Bueno, sí, estaba tratando de chusmear un poquito

respondió despreocupado Inconscientemente cambió su postura, era como que no quería dejar de verse bien bajo la mirada de Romero.

-¿Y vos qué onda?

-Nada, estaba hablando con los pibes hasta que me di cuenta que faltabas vos.

Lo último fue en tono de broma, Son lo sabía; sin embargo, por alguna estúpida razón que desconocía, su corazón se aceleró con sólo pensar en que Cristian se había percatado de su ausencia.

Se sintió re tonto, más cuando de pronto sus orejas y cara comenzaron a acumular calor, y tuvo que disimular entre jodas.

La verdad es que a Son le encantaba el Alfa ese, si se lo preguntaran, probablemente le comería la boca sin pensarlo dos veces ahora. Le chuparía un huevo todo, si no fuera porque Cristian tenia mujer.