Acto 10

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Los meses pasaban, el semestre no tardaba en terminar y la obra estaba lista, medida en el escenario con actores, listos para comenzar, para presentar aquel proyecto.

—Buen trabajo chicos —Dongwook llamó la atención del numeroso grupo que había logrado formar para su obra—, concentren todo en sus exámenes finales, los veré una semana antes de comenzar el siguiente semestre, para ensayos generales, ¿está bien?

—Si, profesor —contestaron al unísono.

Todos se retiran luego de despedirse y tomar sus cosas, y como era costumbre, Félix caminaba al lado de Hyunjin. En realidad no habían cambiado mucho, seguían teniendo esa batalla de miradas, se molestaban con la existencia del otro, pero dentro de ellos, era otro tema.

Hyunjin seguía investigando las emociones de Félix, eran distintas a las de Jeongin o su hermana, sentía que Félix era sincero de una manera única, pero tampoco podía decir mucho al respecto, no era capaz de ver otra faceta del menor que no fuera molesto, al menos ya distinguía cuando lo miraba molesto.

Félix, por otro lado, quería evitar que Hyunjin lo viera con tanta intensidad, era incómodo, aun más cuando estaban en clase y este simplemente clavaba la mirada en él durante las horas de clases y se detenía una vez que culminaba la clase, dentro de él no sabía cómo podría pasar los exámenes finales.

Llegaron a su aula, Félix corrió hasta su amiga quien lo recibió con un abrazo.

—Te tengo buenas, muy buenas noticias —decía la chica con una enorme sonrisa—, pero es sorpresa y no puedo decirte ahora.

—¿Qué es? —Félix estaba curioso, pero fue contagiado por la alegría de su amiga, sonriendo a la par.

—Lo veras después de clase.

Félix insistió a la joven que le dijera, a veces haciendo carita de perrito o tomando su brazo y sacudiendola con delicadeza, pero ella no cedía, sabía que la pequeña sorpresa alegraría a su amigo, más que otra cosa en el mundo.

Fue a su asiento, donde ya estaba Hyunjin, revisando sus notas sin expresión alguna. Félix lo miro unos segundos mientras sacaba sus cosas, seguía curioso por entenderlo, entender esa mirada, aunque hasta el momento no tenía idea de donde venía esa expresión tan sería y vacía, al menos, cuando actuaban, su rostro fingía una sonrisa, un falso brillo llenaba sus ojos, pero su mirada seguía siendo vacía, había algo que ocurría en él.

Dejó de verlo, miró su libreta y nuevamente la idea de que estaba junto a un psicópata, venía a él. Según dramas, documentales y páginas que, alguna vez llegaron a él, los psicópatas solo podían sentir algo por si mismos, y aunque su único fundamento era que Hyunjin afirmaba, siempre, no entender a los demás, la idea seguía en su cabeza. Quizá estaba delirando un poco, con esas ideas un tanto locas, pero hasta ese momento no se había concentrado en buscar enfermedades o incapacidades emocionales, ya lo haría en vacaciones... Estaba decidido a encontrar respuestas, conocer a Hyunjin y triunfar con él, porque era su compañero, alguien con quien se preparaba para culminar la Universidad y estar en un escenario estadounidenses, esa era su meta, quizá un poco codiciosa, pero su meta.

Suspiro, pensar en eso no ayudaba en nada, aun era un estudiante de primer semestre con el miedo de perder ese papel, así que era mejor dejar eso de lado e intentar pasar esa materia.

Su profesor llegó, dio una pequeña introducción y comenzó a repartir las hojas de exámenes.

A los minutos, todos ya tenían la mente puesta en leer preguntas e indicaciones, buscando respuestas en lo más profundo de su memoria, tratando de centrarse en recuerdos que les ayudarán a recordar aquel vago nombre que habían escuchado en clase o leído de sus libros de texto.

Proyecto ¿Romeo y Julieta? ﻌ [Hyunlix] ☑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora