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People Watching Septiembre, 2021
QUEDAN DOS HORAS de clase. Maddy cierra su casillero con un ruido sordo, lo que hace saltar de sorpresa al chico que está junto a ella. Aunque se recupera rápidamente y sonríe. Se apoya en los casilleros, con los brazos cruzados sobre el pecho, atrayendo demasiada atención para el gusto de la chica Adair.
—Tengo una pregunta—,se pregunta Blake en voz alta, girando la cabeza para mirar a Maddy.
—¿Eh?—La morena le levanta una ceja.
—Eres la hermana de Adair—,dice obviamente.—Entonces, ¿cómo es que puedes escaparte por las grietas de esta escuela sin que nadie se dé cuenta de ti, o...? Quiero decir que dudo haberte oído decir más de cinco palabras en total en público—.
—No hace falta—,dice Maddy encogiéndose de hombros.—Tampoco quiero—.
La chica empieza a caminar en dirección a su clase, lanzando una mirada a Blake cuando éste la sigue. El chico se limita a encogerse de hombros con una sonrisa.—Tenemos Historia Universal juntos—,explica, ya que parecía que Maddy no se acordaría por sí sola.
—Oh—,sale de sus labios antes de reanudar la marcha.
—¿Ya está? ¿No vas a hablar conmigo en la escuela? Quiero decir, supongo que tiene sentido, ya que tampoco hablas con Adair o Brown, pero como que no tiene sentido para mí, ¿si sabes a lo que me refiero? ¿Por qué no hablas con tus amigos de la escuela?—.pregunta Blake, con genuino interés en su voz.
Maddy se detiene en seco y se gira para mirar al chico Dawson. Lo examina con los labios apretados en una fina línea antes de hablar.—No espero que lo entiendas—,dice, negando con la cabeza.—Pero algunos de nosotros no disfrutamos siendo el centro de atención como tú o Foosh o mi hermano. Estoy bien hablando con ellos después de clase sin que nadie esté constantemente mirando y criticando cada uno de mis movimientos.—
El jugador de fútbol se queda mirando a Maddy, procesando sus palabras. Suspira, sacudiendo la cabeza.
—Lo siento, no pretendía sonar grosera ni nada por el estilo, es sólo que no me gusta socializar. Y el hecho de que la gente nos esté mirando ahora mismo, fingiendo no hacerlo, tampoco ayuda en nada. Si fueras amigo o familiar de gente que en la escuela se considera, entre comillas, 'sexy' mientras intentas ser invisible, tampoco hablarías con ellos en público. Así que me gustaría ir a clase, si no te importa...—.
Maddy gira sobre sus talones, continuando su ya prolongado viaje hacia la clase de Historia Universal. Cuando Blake no la sigue, se relaja un poco, hasta que él vuelve a trotar hasta ella, alcanzándola con bastante facilidad. Empieza a no gustarle la gente alta y sus estúpidas piernas largas. . .
—Pero, ¿qué tiene de malo llamar un poco la atención?—,pregunta Blake. No parece que vaya a dejar de hacer preguntas pronto.
Pasándose una mano por el pelo, Maddy no deja de caminar esta vez, mirando al frente.—La gente me mira—,responde.—O peor aún, gente que piensa que pueden ser mis amigos, mientras que no planean serlo realmente. Ya sabes, el tipo de gente que simplemente habla contigo sólo para poder presumir de eso y subir en la escala de popularidad de la escuela secundaria. ¿O las chicas que intentan hacerse amigas tuyas porque quieren acercarse a tu hermano gemelo o a tu amigo?—.
—¿Por eso casi nadie sabe que eres la hermana de Adair?—.Blake se rasca la nuca, dedicando una mirada a Maddy, que asiente levemente.
—Pero al mismo tiempo, creo que todo el mundo más o menos lo sabe—,dice ella.—Simplemente lo ignoran porque no les ayudaré a acercarse ni a Beck ni a Foosh. Estarían perdiendo el tiempo intentando buscar en el árbol equivocado—.
—Oh, mierda, eso apesta—,apunta Blake, sin saber qué más decir. Mete las manos en los bolsillos de su abrigo universitario y mira a Maddy casi con simpatía.—Si te hace sentir mejor, he tenido a un montón de chicas coqueteando conmigo sólo para llegar a Brown, y ni siquiera hablábamos tanto hasta ahora. Juro por Dios que ese chico es un imán y ni siquiera lo sabe—.
Maddy se muerde el interior de la mejilla.—Bueno, es un golden retriever con forma humana, así que no puedo decir que no lo entiendo—,dice sacudiendo la cabeza.
—¿Es ahora cuando me dices que también te gusta?—.
—¿Qué? Dios, no. Somos amigos—,dice Maddy al instante, con las cejas fruncidas.
—¿Eso es un 'no me gusta así' tipo 'Dios, no' o un 'nunca lo he pensado' tipo 'Dios, no'?—,pregunta Blake, con los labios fruncidos por la reflexión.
Maddy entrecierra los ojos, sin mirar a Blake. Camina hacia delante, contenta de ver la puerta de la clase de Historia Universal. Aunque antes de entrar, se detiene, mirando a Blake.—Supongo que es la segunda. Pero tampoco pienso llegar a pensar en eso—.
No pregunta por qué le importa, principalmente porque no quiere que la vean conversando más con el chico y delante de toda la clase, pero también porque ni siquiera está segura de por qué ha respondido a su pregunta. Podría haber optado por no contestar y dejarlo en el aire.
Sentada en el fondo de la clase, junto a la ventana, deja caer la cabeza entre las manos, luchando contra el impulso de golpearse la cabeza contra el pupitre de madera. Maddy se pregunta por qué tuvo que hablar con Blake en primer lugar y por qué no se limitó a ignorarlo desde el momento en que se acercó a ella.
Ahora tiene que lidiar con su mente procesando lentamente el hecho de que nunca antes había considerado a Foosh como algo más que un amigo. Y debido a que interioriza casi todos los problemas que tiene, su mente divaga. No le gustan los posibles resultados.
Foosh es su amigo. Siempre lo ha sido. Es el mejor amigo de su hermano. Y por lo que ella sabe, hay muchas otras chicas por las que él podría ir en vez de por ella, así que incluso si de repente decidiera perder la cabeza y desarrollar sentimientos, difícilmente podría intentar engañarse a sí misma pensando que Foosh también podría gustarle.
Pero la cosa es: a ella no le gusta Foosh.
Nunca lo ha hecho... bueno... ¡ni siquiera lo había pensado antes! ¿Por qué demonios iba a empezar ahora? Es ridículo.
¿Por qué Blake le preguntó esto?
Maddy gime en voz bajacon la cara escondida entre los brazos, aparentemente tumbada sobre elescritorio.—Mierda—,maldice en voz baja.
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