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37: El anuncio
El pergamino del zorro

Descargo de responsabilidad: no soy dueño de Naruto ni de Fairy Tail

"..."

"..."

Actualmente, Naruto estaba soñando y parado frente a Mavis Vermillion, la fundadora y primera maestra de Fairy Tail. No se decía una palabra.

Porque ella le estaba haciendo pucheros.

"…¿Um hola?" Dijo Naruto torpemente. ¿Estaba enojada con él? No, ella obviamente estaba enojada con él... Pero no podía pensar en nada de lo que hizo que pudiera enojar al espíritu-

Los ojos de Naruto se abrieron al darse cuenta. '¡Tonterías! ¡Han pasado semanas desde la última vez que hablamos!"

Como si escuchara sus pensamientos, el puchero de Mavis se intensificó. "Mumumumu... ¡He estado esperando que vinieras aquí durante semanas! ¿¡Por qué no has venido!?"

Naruto retrocedió inconscientemente mientras reía nerviosamente. "B-bueno... Una cosa llevó a la otra, y yo... un poco lo olvidé..." Murmuró.

"Para… *¡Sniff!* ¿Olvidaste?" Mavis sollozó, aparentemente a punto de llorar.

Al no ser de los que soportan el llanto de la gente, Naruto comenzó a agitar los brazos. "¡E-espera! ¡No llores! ¡Lo siento! ¡Lo siento! ¡Por favor, no llores!" Cuando la chica pareció calmarse un poco, Naruto suspiró aliviado. "Lamento haber tardado tanto en reunirme contigo, simplemente me quedé atrapado en cosas en el gremio... ¿Pero por qué no me contactaste de nuevo así?"

"¡No estoy llorando!" Mavis lo negó acaloradamente, borrando de su rostro toda evidencia. "¡Y no pude contactarte porque ese zorro astuto seguía bloqueándome! ¡Fue muy frustrante!"

Mientras la niña seguía despotricando sobre el Kyuubi, Naruto reflexionó. '¿Fue culpa del zorro? Tal vez no pudo bloquearla esta vez ya que apreté el sello...'

Después de calmarse, Mavis sacudió la cabeza y una mirada melancólica creció en su rostro. "A él siempre le gustó ayudar a los demás primero..."

"¿Eh?"

"¡Naruto!"

Naruto instantáneamente se sentó en la posición estilo seiza. "¿¡H-hai!?"

Al ver que tenía toda la atención del niño, Mavis habló con autoridad. "Esta vez dejaré de lado que olvides nuestro encuentro. A cambio..." Sus ojos brillaron intensamente. "¿Podrías contarme algunas historias de tus aventuras en las Naciones Elementales?"

La cara de Naruto se mostró culpable. Casi había esperado que el espíritu lo llevara a emprender un viaje de ensueño que le cambiaría la vida o algo así… ¿Pero una historia?

"¿Quieres que te cuente... una historia?"

Mavis asintió con entusiasmo. "¡Sí! ¡Preferiblemente cuando peleaste con ese tipo con piercings!"

'El tipo con los piercings... ¿Está hablando de Pain? ¿Cómo espera... probablemente sea algo fantasma...?' pensó Naruto con desdén, y luego se estremeció ligeramente al pensar que en realidad estaba hablando con una persona muerta. "Claro, supongo... Pero no hubo mucho después de eso antes de que yo viniera aquí".

Mavis comenzó a saltar de alegría y Naruto no pudo evitar sonreír también. Había algo extrañamente mágico en la niña feliz frente a él.

Sin juego de palabras...

A la mañana siguiente…

Naruto apenas podía mantener los ojos abiertos. Mavis lo había mantenido despierto toda la noche con él hablando de su pasado, y a pesar de que su cuerpo estaba "dormido", su mente había estado despierta hasta el amanecer. No hace falta decir que Naruto estaba mentalmente agotado.

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