Capítulo único

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Ese fue el día más feliz de mi vida. Bailábamos los dos con sonrisas en nuestro rostro, moviéndonos al ritmo de la música.

Recuerdo tu mirada, tu mirada tan cálida y amorosa que se dirigía hacía a mí.

Sonreí al verte, reíste y me sonreíste también. Besé tus suaves labios que tanto me atraían, me correspondiste y eso fue todo para saber que eras el amor de mi vida.

Eres el amor de mi vida, Auron y estarás siempre a mi lado. Siempre.

Agarrando tu pequeña no tan pequeña cintura te movía al ritmo de la canción que resonaba en el aparato. Con tu mano con la mía, ambas agarradas, te sostenía y nunca te dejaría caer.

Sonrio al verte, tan bello como siempre.

Tus piernas no se mueven, se arrastran con el movimiento que era mío, tus zapatos desgastados eran arrastrados al suelo y tus piernas se movían por mi propia voluntad.

La sangre caía, gotas y gotas de sangre cayendo al suelo, manchando más de lo que estaba y generando un gran charco de tu fluido rojo que debería de estar en tu cuerpo.

Acaricio tu mejilla, se veía como tus ojeras eran pesadas y muy notorias, junto al rastro de lágrimas secas en tus mejillas y ojos rojos, que cerrados estaban.

【•  • ♥︎ •  •】

──────Oh, cariño. Recuerdo que feliz te pusiste al enterarte que puse nuestra canción en nuestro primer aniversario.

Exclamó sonriente, moviendo el cuerpo de una lado para otro, una danza extrema donde la sangre corría por la piel, manchando el suelo.

El ambiente era suave, la luz de la luna les alumbraba a través de las grandes ventanas con cortinas rojas.

La gran quinta abandonada, arruinada y casi destrozada por completo, pero aún conservando lo mejor del lugar. La habitación central, donde estaban las mesas y un gran espacio para poder bailar.

miraba a su amado, no dudo en besarle los labios y sonreír enamoradamente.

──────Te vez adorable, Auroncito.

Besó su mejilla, la acarició suavemente. La luz de la luna alumbraba si magnífico rostro que a duras penas respiraba.

Tomó el arma que tenía en una de las mesas, aún con su amado en brazos, sujetándolo por la cintura, arrastrando sus pies y piernas que colgaban.

La tomó y miró por unos segundos, glorioso, era perfectamente glorioso, magnífico. Esto era interesante y romántico.

Miró por última vez a su dulce esposo, apuntándole con el arma.

──────Eres mío, sólo mío. Ese maldito de Reborn sólo te manipuló, querido. Yo te amo, soy tu único amor y tú el mío.

Sonrió mirándole, apoyando su frente con la de él.

──────Hasta en la muerte.

Una bala cayó, sangre se derramó, un cadáver estaba en el suelo y otro desmayado.

Se escucho la recarga de la arma y pasos firmes de un montón de gente. Policías saliendo de todos lados con armas, habían apuntado a Borja en la cabeza, matandole de un sólo tiro. Raul cayó al suelo desmayado, siendo sujetado por paramedicos y policías, que lo llevaban en la ambulancia.

──────Todo despejado, jefe.

Suspiró, respirando profundamente.

──────Perfecto.

Tomó su caja de cigarros, agarrando uno y prendiendole, para aspirar el olor como sabor a tabaco. Miró el cuerpo detenidamente, admirando todo este lío que había hecho un sólo hombre por "amor".

Un supuesto amor que era obsesión.

Borja Luzuriaga. Un chico tranquilo, casado y con una buena estabilidad económica. ¿Qué había pasado para llegar a ese punto? A ese quiebre.

No había pasado mucho desde que se casaron, todo bien, era todo perfecto, correcto por donde iban. Raul y Borja llevaban una vida linda de un año y medio de casados y de luna de miel.

Lo que quebró a ese matrimonio recién hecho fue la traición, la traición de un esposo que abandonó a otro y que por eso, el contrario decidió vengarse fingiendo estar con su mejor amigo.

Fue una lastima que el contrario no se lo haya tomado como cualquier pareja y que lo haya matado.

Luzu, Borja Luzuriga. Un asesino que mató al mejor amigo de su amado, un chico llamado Reborn que fingía ser el novio de Raul para darle celos y que aprendiera la lección. De que se quería separar por la infidelidad de Luzu.

Aquel no se lo tomó bien, para nada bien. Mató a su mejor amigo y secuestro a su marido, queriendo matarlo y matarse.

Y así estar juntos hasta en la muerte.

Pero sus planes no fueron llevados a cabo gracias a las advertencias de su infidelidad que le había delatado al escuchar todo en secreto.

Talvez no fue un buen romance, talvez la sangre fluyó de más.

Auron quedó con traumas como la pelianaranjada chica que fue cómplice de un romance secreto del asesino. Lanita.

Reborn no merecía eso, Auron no quería que pasase eso, Lanita no sabía que el estaba casado y Luzu... Luzu fue un demente por amor, un demente, un chico obsesionado que nunca habría aprendido la lección. Por qué él no quería aprender, el solo quería amar locamente. Pero no se lo permitieron.

Por qué sí no, habría más heridos...

𝐃𝐀𝐍𝐂𝐄 ❙ Luzuplay.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora