Anécdota de la Guerra del Invierno

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Durante la Segunda Guerra Mundial, fui reclutado junto con muchísimos hombres para la Unión Soviética, no tenía conocimientos de armas ni de entrenamiento, pero por el periodo de un mes me entrenaron para poder manejarme en estas cosas, aunque admito que mucho no podría haber hecho en casos extremos.

Esto que les contare les helara la sangre, como muchos saben hay millones de horrores anónimos durante toda esta época, la mayoría cree que solo fue un terrible holocausto, pero hubo misterios más allá de todo esto, cosas que jamás fueron resueltas para dar paz a los que lo sufrieron.

Dentro de esta Guerra Mundial, hubo una pequeña guerra entre Finlandia y La Unión Soviética, se la llamo La Guerra del Invierno y duro tres meses. Los finlandeses ganaron, intentábamos invadir el país, pero este no es un sitio fácil, es un desierto helado en su mayor parte, una tundra muy fría.

Yo había recibido entrenamiento, pero muchos de mis compañeros eran campesinos que no recibieron entrenamiento y había hasta jóvenes considerados niños y no hombres. El comandante Soviético que era muy ambicioso no escucho las advertencias de los pobladores de que, en Finlandia en los bosques, se oculta un monstruo que lo despedaza todo y que es imparable. El las tomo como estrategia para no invadirlos porque tenían un pequeño ejército y nosotros uno mucho más grande. Podía escuchar las burlas del comandante hacia todos ellos, desprestigiando esas historias. Las autoridades finlandesas informaban de esto también, que nadie se atrevía a ir a cazar a los bosques, preferían morirse de hambre o frio antes que eso.

Con mucho valor decidimos proceder con nuestra invasión, al cabo de poco tiempo estábamos sufriendo muchas bajas, en principio por el gran frio Finlandés, era terrible aquel clima, no estábamos preparados para soportar esas temperaturas y en segundo lugar, nuestros enemigos habían comenzado una campaña de francotiradores que había sido bastante exitosa. Pero nuestro pelotón junto con algunos más debíamos acercarnos a una de las ciudades principales, el coronel sabía que no podía ir por la ruta principal, sería un suicidio, la única forma era adentrarse en el bosque y cruzarlo de la mejor manera posible.

Aquí la historia hace un pequeño párate, no olviden que esto fue real, sucedió realmente.
Debemos contar ahora desde el lado de los Finlandeses, la inteligencia del país descubrió el secreto de este coronel soviético, sabían que estaban acercándose por el bosque con muchísimos soldados para atacar una de las grandes ciudades y juntarse con otro ejército soviético que atacaría otro lado de la ciudad.
¿Cómo se enteraron? ¿algún desertor había hablado?

Ninguna de las siguientes, sino, porque encontraron a todo el batallón muerto y masacrado en el bosque, la preocupación de los Finlandeses no fue el hecho de que hubiera pasado si llegaban a la ciudad, sino con el escenario en el que se encontraron, no podía hablarse de cadáveres simplemente, el lugar era una completa carnicería, cuerpos partidos a la mitad, desmembramientos, sangre por todos lados, inclusive había cuerpos despellejados completamente, esto un batallón de ellos no podría haberlo realizado.

El gobierno trato de ocultar esto, diciendo que los propios soldados se habían matado entre ellos por medio de un motín por la desesperación del frio, recuerden que no estaban preparados para estas temperaturas y por la falta de comida, pero fue una simple mentira, había muchas provisiones en las carpas montadas por los soldados, sino además nadie creyó que un ser humano podría tener la fuerza, la maña, la maldad y poder de hacerle todo eso a un ser humano sin piedad.

La foto que ven fue tomada durante ese tiempo, por el ejército Finlandés, lo que ven es la piel colgada y mutilada de un pobre soldado soviético que no sabía a donde se metía, solo seguía las ordenes de su comandante…

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