O3

689 111 34
                                    


Roier despertó a mitad de la noche, sobresaltado.

Odiaba cambiar de lugar con otros Alters esto es porque nunca sabría cuándo iba a volver a tener el control de su vida nuevamente, había muchas veces en los cuales días enteros había perdido, o su peor momento: cuando despertó para saber que habían pasado tres semanas de su último recuerdo.

Al ver el reloj en su celular vio que eran las tres y siete de la madrugada, del día siguiente.

Suspiró con algo de alivio, no había pasado mucho tiempo.

Se volteó y vio a Spreen durmiendo, en su respectiva cama, a un metro de la suya.

Recordó lo tierno que había sido el chico, muy atento, incluso cuando le había rogado que se alejara, Spreen sólo quería hacerle bien y lo sabía, y por más que el odiase cambiar de lugar, se había sentido tan bien abrazarlo mientras el mundo real se alejaba de su percepción.

Sonrió de forma honesta.

Se levantó de la cama tratando de no hacer mucho ruido en el intento, tenía algo de hambre, y fue hacia la cocina, encontró una nota sobre la mesa.

<<Hola, Roier, o Roger, estoy seguro de que será alguno de ustedes dos quien lea esto.

Melissa no quiso cenar mucho, esto es por si despertas con hambre.

Espero que te sientas mejor ♡>>

Luego de leer aquello escrito por el azabache le sonrió como un tonto al pedazo de papel, sus mejillas se pintaron de un rojo, miró el pote de sopa instantánea, y el pequeño chocolate junto a él.

—Voy a tener que agradecerle por esto.

Calentó agua y esperó hasta que se hirvió, preparó la sopa con cuidado, al rato estaba comiendo mientras revisaba su celular.

Se le ocurrió revisar sus notas, lugar en el que solían usar sus Alters para dejarle mensajes. Ya sea para contarle el contexto de dónde estaba, cuando pasa días sin el control del cuerpo, hasta pensamientos que ellos tenían.

"El chillón está afuera, que se quede afuera" – Roger.

Roier rodó los ojos con fastidio, Roger se había enojado porque ahora tenía que lidiar con Doied.

Desvió la mirada a la nota de abajo siguiente a la de su protector.

"Es agradable" – Melissa.

Sonrió, Melissa era de muy pocas palabras, además de serlo literalmente, casi nunca escribía porque ella no era de comunicarse mucho.

Normalmente, Melissa sólo se quedaba medio cerca, viendo lo que hacía de vez en cuando, pero no hacía nada más, cuando tomaba el control era cuando la situación estaba tensa o muy incómoda, más que nada cuando se trataba del contacto físico.

Era un protector sexual, pero su labor se extendía a otras situaciones a parte del sexo, siempre que alguien tuviera un poco de más contacto con él, como cuando lo abrazaban, pero este no se sentía seguro, llegaba incluso a aparecer cuando el médico tenía que tocar su cuerpo para ver su estado físico, era un poco exagerado, pero al fin y al cabo era para protegerlo.

Terminó la sopa y tiró el pote a la basura, fue a comer el chocolate y tomó una botella de agua del refrigerador.

Se sintió tonto, porque seguía pensando en Spreen Buhaje, en verdad llevaba pensando mucho más que un rato en él, incluso cuando se recostó de nuevo, y volvió a dormirse.


▬▬▬▬▬▬


THE ALTERS | SpiderbearDonde viven las historias. Descúbrelo ahora