Sentimientos No Tan Absurdos (Supercorp)

Cap 25: Todo es bonito si estás tú

~Narradora~

Salieron del ascensor y se dirigieron a la oficina de Lena. Saludaron a Jess al entrar y esta no pudo evitar fijarse en que la sonrisa de ambas brillaba.

- Buenas tardes señorita Danvers - dijo Jess saludando a la rubia.

- Hola Jess - dijo siguiendo a Lena hasta la puerta de su oficina.

- Bueno... yo... supongo que deberías trabajar ¿no? - sonrió Kara mirando a Lena.

- Si, tengo una reunión ahora, pero quería.... darte las gracias, ha sido bonito - dijo mirando el ramo de plumerias.

- Lee, todo es bonito si estás tú - dijo sonriéndole - pero si, ha sido maravilloso, que suerte que podamos repetirlo las veces que queramos - dijo viendo cómo Lena levantaba la cabeza y la miraba.

- ¿Volverías a tener una cita conmigo? -

- Una no, mil si hace falta, y si tengo la suerte de verte en falda, mejor aún - le guiñó un ojo y Lena rió.

- Bueno... a mi me gusta que me prestes tu ropa para estar por casa - sonrió admitiendo.

- Y a mi me encanta que dejes tu perfume en ella - le sonrió de la misma forma.

Se miraron durante unos segundos y mientras que Jess no miraba, Kara hizo un movimiento rápido y besó sus labios en un corto pico. Lena sonrió y alzó una ceja. Eso puso nerviosa a Kara.

- Bueno, yo iré yendo a tu casa, iré a comprar las cosas y prepararé la comida, además llamaré a los chicos para que se vayan preparando y bueno, para saber cómo está Katie - dijo separándose un poco de Lena.

- Me parece perfecto, nos vemos después Kara - le sonrió dulcemente y caminó hacia atrás en su oficina.

- Nos vemos esta noche Luthor - sonrió y se fue por dónde habían llegado, despidiéndose de Jess con un simple adiós.

~Lena~

Se sentó en su silla, se echó para atrás y suspiró soltando todo el aire que había contenido. Sin darse cuenta de que Jess la había visto.

- Hacía años que no la veía suspirar así señorita Luthor, y si me permite el atrevimiento, le sienta de maravilla esa sonrisa - admitió Jess.

- Muchas gracias por el halago Jess, pero si bien lo recuerda, estoy trabajando y usted tiene muchas cosas que hacer - dijo seriamente, Jess sabía que por mucho que Lena estuviera de buen humor, el trabajo era trabajo y ella era la jefa.

- Si señrorita Luthor, sólo quería informarle de que ya llegó el señor Gradye y está esperando por usted para la reunión - informó su secretaria.

- De acuerdo, hazlo pasar - dijo Lena y cuando salió Jess de su oficina, sonrió al recordar a su rubia.

~Kara~

Ya habían pasado 3 horas desde la cita con Lena, eran las 19:45 de la tarde, a esa hora ya el sol se estaba yendo. Kara estaba en casa de Lena, poniendo aperitivos en la mesa y terminando de preparar todo para cuando llegasen Kelly y Alex. Ya estaba allí Eliza, Lucy y Winn, junto con Katie, la cuál dormía en el carrito. Lena les llamó por teléfono y les dijo que estaba al llegar, así que sólo quedaban por llegar
James, John y las chicas. Kara se sentó en el sillón junto a su madre y sonrió inconscientemente al recordar que dos noches atrás había estado en ese sillón durmiendo debajo de Lena.

- ¿Quién pasa por tu cabeza? - sonrió su madre dándole un codazo suave.

- ¿Qué? Jaja nadie Eliza, solo estaba pensando - sonrió disimulando mientras se quitaba las gafas falsas.

- Ya claro, alguna araña anda por tu mente y varias mariposas en tu estómago Kara, te conozco - le dijo Eliza levantándose.

- Jajaja ¿araña? - preguntó confusa.

- Si, una araña y algo me dice, que caíste en su tela - sonrió sabiendo que su hija estaba enamorada de alguien.

Kara sólo sonrió y negó con la cabeza. No era una araña cualquiera, la que la había atrapado en su tela, era ni más ni menos que una señorita de ojos verdes, que pronto llegaría a su casa.

- Bien, ya llegaron James y John - dijo Lucy entrando al salón con ellos.

- Hola familia - saludó John.

- Hola - saludó James - hola Kara - dijo intentando llamar su atención.

- Lena me acaba de mandar un mensaje - dijo Kara abriéndolo - dice que en dos minutos está aquí - dijo ocultando el dulce apodo que la derritió por dentro e ignorando completamente a James, estaba más centrada en el mensaje de Lena.

Lena: "Sol, en dos minutos estoy en casa"

Kara: "¿Sol?"

Lena: "Si, tú eres mi sol 🤭"

"Entonces tú eres mi luna 🥰"

"Me gusta, nos vemos ahora"

Dejó el móvil en la mesita del salón y se unió a la conversación de sus amigos.

- Si, ha estado tranquila esta tarde, la verdad que debe ser una niña tranquila, apenas ha llorado - dijo Winn contando cómo les fue la tarde con Katie.

- Uff... pues será sólo hoy, porque la verdad que ha estado inquieta conmigo y Lena - dijo Kara recostándose en el espaldar del sillón.

- Pues que va, con nosotros no ha llorado, sino después de dormirse en el coche, pero luego ha estado tranquila y ahí está, dormida cómo un angelito - sonrió Lucy mirando a Katie dormida en el carrito.

- Jaja eso dínoslo a nosotras, que llevamos una semana entera sin dormir una sola noche, esta niña de noche es el demonio - dijo Lena entrando en el salón, seguida de Eliza, que estaba en la cocina.

- Hola Lena - la saludó Lucy y le sonrió.

- Hola a todos - sonrío dejando el bolso en el perchero - hola Kara - le sonrió yendo con ella al sillón.

- Lee ¿qué tal? - enseguida le hizo sitio a su lado.

Vieron cómo James se molestó, las miró mal disimuladamente y se levantó del sillón para no "interrumpir". Kara sonrió por el hecho de que estuviera celoso de Lena.

- Bien, terminé en la oficina por hoy, y por suerte mañana tengo el día libre - sonrió quitándose los tacones.

- Es cierto, ¿qué tal L-Corp Lena? ¿Cómo vas con la empresa? La verdad que llevar una empresa siendo tan joven debe ser estresante, creo que eres la CEO más joven de todo Estados Unidos - dijo sonriente Eliza.

- Bien la verdad, todas las reuniones e inversiones son un éxito hasta ahora y bueno, mi proyecto en Irlanda está definitivamente aceptado, sólo me queda hablar con los del gobierno de Irlanda y que me den los permisos de excavación en esa zona - dijo mientras apoyaba su cabeza en el hombro de Kara.

Kara miró dulcemente a los ojos de Lena y se sonrojó cuando Lena levantó una ceja divertida. Justo ahí fue cando Eliza se dio cuenta de que la araña era Lena y la tela, sus ojos esmeralda. No pudo evitar sonreír ante aquella aclaración tan obvia. Fue a decir algo, pero no tuvo tiempo.
Sonó el timbre y todos sonrieron, Alex y Kelly habían llegado.