The Consequence.

Vine aquí con algo nuevo, la imagen da alguna idea, I know. La imagen corresponde a su dueño/a.

Espero le guste y aún no es 100% seguro de que será un one-shot >.< Sin más, a leer:3.

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Habíamos tenido una larga charla con mi padre sobre la fiesta de uno de los hijos de sus amigos "empresarios" y obligado tuve que ir, con la condición que me dejara llevar a mi mejor amigo porque presentía que algo malo pasaría y no había estado del todo equivocado. Cuando llegamos con Dan a la casa (que estaba algo retirada de la ciudad) notamos el exceso de alcohol y drogas que había, a pesar de ser algo normal en las fiestas se me hacia extraño, tenía un mal presentimiento.

Dan había desaparecido de mi lado para ir en busca de algo para beber que no contuviera alcohol, aunque era difícil en esta fiesta. Estaba esperándolo hasta que se me acercó el queridísimo anfitrión de la estúpida fiesta y debía admitir que él estaba algo ebrio y bastante drogado, nunca había visto esa faceta de él y desearía no haberlo hecho. Empezó a decir muchas incoherencias y a acercarse más de lo debido, no es que no me guste, solo que él no me gusta, no puedo engañarme a mí mismo pero él decidido me acorralo contra la pared para besar mi cuello y toquetearme libremente mientras yo intentaba apartarlo de mí.

Todo ocurrió de un minuto a otro. Vi a Dan encima del que era el anfitrión golpeándolo y gritándole todas las groserías que podían haber. Y al final grito que era de él y que no podía ser tocado por nadie sin mi consentimiento. Debo admitir que la relación con mi mejor amigo es algo especial...

Al final terminamos saliendo de ahí. Odiaba que las cosas fueran así.

*~*

Estaba en medio de la calle, en la carretera esperando por algún auto que pasara junto con mi mejor amigo a quien no le soltaba la mano. Tenía miedo y solo quería volver a casa, ¿Por qué acepté que papá me trajera a esta estúpida fiesta? Al menos Dan me acompañó y así no debí pasar por esto solo.

—Tranquilo... — susurró en mi oído mientras acariciaba con su pulgar mi mano.

— ¡No quería venir porque sabía que pasaría esto! — me sentía frustrado.

—Cálmate, al menos detuve al imbécil a tiempo. — gruñó mientras intentaba mirar al horizonte.

—Ya, perdón... — lleve mi mano a su cuello acariciando allí porque sabía que así se relajaría.

Abrazó posesivamente mi cintura y observó mis ojos, esto ya era algo a lo que me había acostumbrado desde hace ya bastantes años. Acercó sus labios y por primera vez dudé en besarlo, pero lo hice de igual manera. Rápidamente respondió al beso pegándome más a su cuerpo y yo no hice más que rodear su cuello para evitar alejarnos. Fue entonces cuando sentí sus manos recorrer toda mi espalda.

— ¡Vayan a un motel! — mierda, mis mejillas se han puesto rojas. Observamos de donde venía aquella voz y notamos que era una van que pasaba por ahí y eran dos hombres los que estaban dentro. No me daban confianza debía decirlo.

—Iría a uno si pudiera. — suspire. Me tomó de la cintura y me susurró cosas en el oído, cosas en las que le encontraba razón, como "son unos pervertidos", "no los mires", "no confíes en ellos"

— ¿Y por qué no te tiras a tu novio aquí dentro, eh? — fruncí el ceño.

Dan me soltó furioso y solo podía esperar lo peor. Se les acercó y empezó a gritarle miles de cosas que yo no entendía... hasta que entró a la van. Mierda Dan. Rápidamente me preocupé y desesperé hasta que lo vi salir todo sonrojado.