Hana; hacia la libertad.

CAPITULO 77 LA ESTOCADA FINAL

La voz de Elif la saco de sus pensamientos cuando siguió contándole más detalles de la relación entre Ashraf y Aysel.

—Ashraf y Aysel se enamoraron cuando apenas eran unos jóvenes de 19 y 16 años, ella era la joven más dulce que pudiera existir y mi primo vivía por ella y para ella. Pero él estaba comprometido con tu hermana Sura, así estaba decidido y él no podía contradecir el deseo de su padre y mi tío Endorgan jamás aceptaría a Aysel en su familia porque su padre estuvo en investigaciones, por desfalco y otras cosas, así que decepcionada Aysel decidió irse a París con su corazón destruido y así no estar presente el día que Ashraf se casara.

Pero años después se reencontraron, Ashraf estaba decidido a que volvieran pero ahora ella era quien estaba casada y rompió así el corazón de Ashraf

Ahora entendía aquel comentario cuando le dijo que las mujeres de su vida terminaron decepcionándolo.

—Eso sucedió a pocas semanas de su propio matrimonio-le aclara el panorama Elif- así que decepcionado no iba a poner ya ninguna objeción en casarse y paso lo que ya sabemos, otra decepción, su honor pisoteado, la humillación y el escarnio público y desear cobrar la afrenta y te conoció a ti una jovencita de 15 años la misma edad de Aysel cuando la conoció, físicamente son muy parecida, cabello castaño, ojos claro, piel blanca además de tener esa mirada de inocencia, no dudo que el este obsesionado contigo, pero solo porque le recuerdas a ella, y está el hecho que tú también lo abandonaste como tu hermana, como ella, Ashraf fue duramente castigado en su hombría, en su orgullo, y eso lo motivo a casarse para lavar su honor y también para usarte y cobrar venganza a través de ti, de lo Aysel le hizo y ahora vengar también el hecho que tú también lo traicionaste.

—El me ama, me lo ha dicho- quiso aferrarse a esa esperanza.

—Puede que sí, en los hombres de nuestra cultura pueden caber muchos afectos- riposto con amargura.

Elif hizo una pausa y mientras que Hana seguía en silencio absoluto tratando de digerir todo lo que la prima de Ashraf le decía, seria cierto o por alguna razón que ella desconocía quería poner en mal a Ashraf ante ella.

Elif suspiro profundo y añadió visiblemente conmovida

—De cualquier manera sea que aun quiera buscar una retribución o que te amé, sufrirás Hana porque no eres del tipo de mujer que compartirá al hombre que ama, que aceptara ser sumisa, tu eres diferente- lo dijo a modo de admiración y de anhelar ser igual a ella- pero yo debo advertirte porque no puedo permitir que mi primo te lastime, como mujer quiero prevenirte, no caigas en su juego, él puede ser muy convincente para lograr sus propósito, pero yo conozco de sus planes, una vez escuche que le dijo a su amigo Murat que iba a hacer que te enamoraras de él, y entonces iba a cobrar su venganza, va a llevarte a Turquía, te va a encerrar, te va a humillar hasta que no valgas nada, hasta que te quiebre totalmente. Él dice ahora no tener corazón y le creo, ahora solo lo mueve el odio y el deseo de venganza y tú eres su víctima.

—Cómo puedo estar segura que lo que me dices es cierto.

—Sabes que este viaje lo hice por ti pero perdí el valor y no iba a contarte esto, Ashraf se abre conmigo como no lo ha hecho con nadie, por eso se dónde estabas y las intenciones que tenía Ashraf de seducirte incluso para invalidar la anulación de su matrimonio.

Hizo una pausa y Hana presintió que lo peor estaba por venir.

Así fue cuando Elif confeso:

—También sé que el chantajeo a tu padre con hacer valer la hipoteca que había sobre tu casa, con llevarlo a la ruina si el no accedía a ese compromiso.

Hana sintió un cúmulo de emociones y ninguna buena, si esto era cierto lo dicho por teléfono y que le envió Aysel era cierto un secreto que terminaría haciéndolo odiar a Ashraf.

Porque podía perdonarle muchas cosas menos que le hiciera esto, entonces era a vergüenza lo que impidió que su padre la buscara. Estaba completamente convencida que era así.

Ahora entendía la vergüenza que vio en la cara de su padre el día que le comunico su compromiso, cuando vio aquellas lágrimas en sus ojos el día de su boda, aquellas palabras pidiéndole perdón.

Como pudo Ashraf meterse con lo más sagrado para ella, su padre, su familia. Todo dolor que sentía fue erradicado de su corazón y sustituido por un profundo odio, odiaba a Ashraf Rahamm con todo su corazón.

Elif concluyo para dar terminada la conversación

—No sé si me creas o prefieras apostar al amor, es tu decisión pero piensa que motivo puedo tener yo, para mentirte, él es mi primo, somos familia, nos criamos juntos desde niños y lo quiero pero no puedo estar de acuerdo con lo que va a hacer ni por ti, ni por él, porque el mismo terminara destruyéndose. Lo único que te pido es que no le digas que yo te lo dije, si mi tío Endorgan o mi padre se enteran no dudo que pueda enviar a uno de sus guardaespaldas a hacerme daño, incluso matarme.

—Quédate tranquila- se escuchó decir en voz baja cuando ya todo estaba dicho y su mente y corazón era un caos absoluto.

Se puso de pie y salió de allí sumida en la confusión y la desolación.

Ninguna de las alternativas podía tener una respuesta positiva

Porque si Ashraf era lo que Elif había dicho, un psicópata sin corazón, un hombre lleno de odio y deseos venganza, su vida y su libertad estaba corriendo riesgo y debía huir nuevamente.

Si Ashraf aún tenía una relación con Aysel y ella accedía incluso a ser su amante aceptando compartirlo con dos esposas, pero ella no lo aceptaría, así que debía alejarse de Ashraf.

Y lo más importante jamás podría perdonarle a Ashraf que hubiera chantajeado a su padre con llevarlo a la ruina y no dudaba que lo hubiera ejecutado, porque el Ashraf de ese tiempo estaba lleno de odio.

Pero el actual ¿estaba arrepentido? Aun eso no cambiaba 5 años separada de su familia y su padre muriendo de dolor por vergüenza por haber cedido a su chantaje.

Elif ve marcharse a una Hana derrotada y llena de odio por su esposo y esboza una sonrisa satisfecha cuando su plan dio todo el resultado esperado.

Había dado en el blanco cuando llamo a Aysel y le propuso un plan para separar a Ashraf de Hana, obviamente ella seguía enamorada y trajo consigo fotos de ellos, pero no del viaje que recientemente Ashraf hizo a París, sino de hacía dos años cuando ellos se reencontraron porque una mujer si algo no perdona una mujer es la infidelidad, siendo la estocada final revelar lo de su padre lo cual era cierto para que odiara a Ashraf y el odio es el sentimiento que es capaz de incendiar un bosque completo.