Los Imperdibles

Parte 1 Sin Título

Ya ni me acuerdo desde cuando estoy aquí, entre chicas y faldas exclusivamente, entre estas faldas escocesas que tanto odio y que probablemente esté condenado a ver para siempre, a ellas y a sus malditos imperdibles que tanto me han complicado la vida.

Soy un adolescente que fui víctima de una conspiración entre mi madrastra y mi hermanastra, no les interesaba que siguiera en el "mundo" al morir mi padre, querían que desapareciera sin dejar rastro, pero mi madrastra es demasiado cobarde para, directamente matarme, así que encontró otro modo para hacerme "desaparecer" completamente, por lo visto su hermana era y es, la siniestra directora de un internado para chicas, y como resultado de ello, y de un plan diabólico tramado entre las tres, soy ingresado en secreto en un colegio exclusivamente femenino y sin ningún contacto con el exterior, con la clara intención de que permanezca allí, oculto al resto del mundo durante mucho mucho tiempo o quizá para siempre.

Recuerdo el día que me trajeron aquí, y como le suplique a mi hermanastra, "¡no!, ¡no me hagas esto!, ¡no quiero ser una chica!, ¡no quiero estar aquí!, ¡no quiero vestir como las chicas!, ¡no quiero estar entre chicas!, ¡no quiero ser una de ellas!".

Y como mi hermana, con una sonrisa diabólica me dice, "¡éste será tu nuevo hogar!".

Y recuerdo la conversación entre mi madrastra y su hermana, la directora cuando esta última le decía riendo que, "¡él puede protestar y suplicar lo que quiera ... pero ya no puede evitarlo! jajaja ... ¡se quedará aquí!, ¡aquí con nosotras!jajaja ... ¡y éste es un lugar totalmente femenino! jajaja .... ¡y tendrá que quedarse aquí, entre otras chicas y para siempre! jajaja ... ¡él siempre estará aquí con nosotras! ... ¡aquí!, ¡y solo con chicas! ... ¡entre chicas exclusivamente! ... ¡por qué la presencia de hombres aquí no está permitida, aquí solo las mujeres pueden estar!, jajaja ... ¡así que ya solo verá chicas y mujeres por el tiempo que tú desees! Jajaja ... ¡aquí no verá a un hombre nunca! ¡Ja, ja! ... ¡y nadie lo podrá ver aquí!, ¡nadie lo buscará aquí, en un colegio de chicas!, ¡es la mejor forma de hacerlo desaparecer!, ¡y aquí ya solo verá faldas!, ¡La falda que él mismo tendrá que llevar permanentemente, y las que llevarán las otras chicas! ... jajaja ... ¡aquí verá muchas faldas!, ¡demasiadas faldas!, ¡pero solo faldas! ... ¡de ahora en adelante, verá muchas faldas a su alrededor y en todas partes, pero en cambio, ya no verá a nadie usando pantalones nunca! Buajajajaja! ".

Y a continuación, la directora ordena a dos de las alumnas, con un gesto, que me lleven con ellas al interior del internado, y dos chicas altas me agarran por los brazos y me arrastran a través de la puerta mientras yo intento resistirme y gritó, "¡noooo!".

Yo miro a mi hermanastra y le suplico, "¡ayudameee!".

Ella me responde con una cínica sonrisa, "¡adiós hermanita!".

Yo le grité desesperado, "¡noooooo!".

Y mientras se aleja me dice sonriendo maliciosamente "¡ahora, la puerta del internado se cerrará para ti y para siempre!".

La directora me mira de arriba abajo, con un aire de desprecio.

Yo le suplico, "¡yo no quiero estar aquí!, ¡no debo de estar aquí!, ¡yo soy un chico!, ¡no soy una chicaa!, ¡soy un chicooo!".

La directora, con una sonrisa maliciosa, me responde, "¡no por mucho tiempo ahora!", y con un gesto, le dice a las alumnas, "chicas, ¡quitarle la ropa!".

Las chicas me quitan toda mi ropa de chico, mientras las otras alumnas despliegan la que será mi ropa a partir de ahora.

Primero me colocan violentamente unas bragas color blanco.

Después un sujetador del mismo color.

La directora me mira fijamente, y con una siniestra expresión, me dice, "¡ahora ya eres una chica, una alumna de este colegio, y como todas las alumnas, llevarás este uniforme!".