El jueves, mi día terminó COMPLICADO se podría decir... Viví una situación no muy agradable, la que hizo que mi humor pasara de estar arriba a hacer un giro de 180 grados, y pasar a estar abajo, enterrado, tapado cual fósil de dinosaurio a miles de metros bajo tierra. Pero no es lo que importa y tampoco quiero recordarlo.
Mi viernes empezó mal, con terribles dolores de cabeza por el mal dormir, con mucho sueño y malos humores. En el colegio, pasé por más problemas, a la entrada, durante las clases, en los recreos, en todo momento... Mi día iba mal hasta que me llegó un mensaje inesperado pero realmente deseado: "te extraño amiga - Tessa " decía. Mi sonrisa fue la más grande que pude haber tenido. Ella, otra de mis verdaderas amigas, de esas pocas que de verdad me hacían bien me había mandado un mensaje diciendome que me extrañaba.
Enseguida me ofrecí a ir a verla. Sabia que era lo único que me iba a hacer cambiar mi humor, después del día tan horrendo que había tenido y después de tanto tiempo sin verla.
Sonó el timbre y yo ya estaba con la mochila colgada en mi espalda. Salí casi primera del aula, corrí hasta la puerta de salida del colegio y fui de la misma manera hasta la casa de Tessa. Cuando llegué, no dudé en abrazarla lo más fuerte que pude, yo lo necesitaba y, por como me abrazó, sentí que ella también lo necesitaba igual. Pasamos toda la tarde juntas, hablando de la vida, de recuerdos, de lo que habíamos hecho desde que no nos veíamos, y de lo que extrañábamos estar juntas todos los días como a principio de año. Esto por lo que está pasando ella, nos incumbe a todos y creo que este es el momento en el que ella se tiene que dar cuenta de quienes están con ella en estos momentos difíciles. Siempre se lo dije, es mi amiga, mi vida, mi todo y tengo la obligación de cuidarla, respetarla, ayudarla, aconsejarla, mimarla, quererla y ser la persona que todo amigo necesita para estar bien.
