Tn X Boku No Hero.
En un mundo donde los héroes y villanos se definen por sus emociones y moral, Tn es un enigma. Sin capacidad para sentir empatía, su corazón late solo para sí mismo. Con emociones que solo despiertan con el estímulo de ciertas acc...
La suave melodía de un piano llenaba el aire, creando una atmósfera serena en la casa. Tn se desperezó lentamente, sintiendo el calor de los rayos del sol que penetraban por la ventana. A su lado, Nemuri yacía, su piel brillando suavemente en la luz matutina. Un instante de paz lo envolvía, y una sonrisa se dibujó en sus labios al contemplar su belleza.
Deslizándose de la cama, Tn se levantó, disfrutando del frescor del suelo bajo sus pies. Se dirigió hacia la cocina, donde el aroma del café recién hecho pronto llenaría el espacio. Con movimientos ágiles, preparó su bebida matutina, el ritual cotidiano que siempre disfrutaba.
Mientras el café goteaba, Tn no pudo evitar volver la vista hacia Nemuri. Su figura, desnuda y relajada, era un cuadro que lo mantenía cautivado. La luz del sol jugaba sobre su piel, y cada curva parecía resaltar su naturaleza vibrante.
Tomando su taza de café, dio un sorbo y dejó escapar un suspiro de satisfacción. La calma reinaba en la habitación, interrumpida solo por el suave ronroneo de Shiva, su tigre mascota, que dormía plácidamente en la alfombra.
-¿Acaso escuchaste todo lo que pasó anoche, amigo? -bromeó Tn, mirando al tigre con complicidad. Shiva respondió con un suave suspiro, sin abrir los ojos.
De repente, un estruendo resonó a través del aire, como un trueno lejano que provenía del otro lado del continente. Tn dejó la taza vacía sobre la encimera, su sonrisa torciéndose en una expresión de curiosidad y emoción. Sus sentidos se agudizaron, el eco del estruendo reverberando en su mente.
No había preocupación en su corazón, solo una chispa de emoción. En ese instante, se dio cuenta de que sus poderes estaban regresando a la normalidad, fluyendo a través de él como un río que recupera su cauce. La tranquilidad del momento se mezclaba con la promesa de libertad, y Tn no podía evitar sonreír, anticipando lo que estaba por venir.
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En otra parte de la ciudad, Izumi Midoriya se encontraba desayunando en la cocina de su hogar, el aroma del café y los huevos revueltos llenando el aire. Su madre, Inko, se acercó a ella con una sonrisa pícara en el rostro.
-Entonces, Izumi, ¿cómo van las cosas con Tn? ¿Es tu novio oficial ahora? -preguntó Inko, dándole un codazo juguetón a su hija.
Izumi se sonrojó furiosamente, bajando la mirada hacia su plato.
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