La seducción de la bestia

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Te pones de pie y te apuras para llegar a la puerta de entrada. Mirando a través de la mirilla, ves a tu misterioso visitante

Yo: ¡¿Seonghwa?! ¿Qué está haciendo aquí? Se le ve exhausto -abro la puerta- ¿Cómo estás?

Sh: He estado mejor

Seonghwa se pasa la mano por el cabello. Se queda en silencio por un momento antes de continuar

Sh: Bunny se quedará en el veterinario. No es nada crítico, pero necesita supervisión. Encontraron restos de Ipecac. Es una droga que induce el vómito

Yo: ¡Santa mierda! ¿Quién le daría eso a un gato?

Sh: No lo sé. Tendré que revisar el video de seguridad cuando regrese a casa

Seonghwa suspira. Nunca lo habías visto tan angustiado, sin mencionar perdido

Sh: Sabes, esa pequeña bola de pelos me salvó, de hecho

Yo: ¿Te salvó?

Sh: Es una larga historia. Es realmente muy tarde. No debería haber venido. Mierda, esto fue estúpido. Debería irme. Perdón por molestarla. La veré en el trabajo

Él se da la vuelta, listo para irse

Yo: -no puedo dejar que se vaya así.... O sea, es tarde, y estoy cansada, pero parece que él necesita desahogarse con alguien. No puedo permitir que se vaya así- Seonghwa espera

Sh: ¿Qué?

Yo: Entra

Sh: No estás obligada a seguirme la corriente, ¿de acuerdo?

Yo: Lo sé, pero quiero que te quedes. Quiero estar ahí para ti

Hay cierta ternura en los ojos de tu jefe, pero aún permanece fijo en su sitio

Sh: No es parte de nuestro contrato

Yo: No todo tiene que estar por escrito, ¿sabes? No necesito que un pedazo de papel me diga cuándo tengo que ayudar a alguien que está pasando un mal momento. Así que vamos, entra ya. Y si te hace sentir avergonzado, no tenemos que mencionarlo nunca más

Él sonríe cálidamente, y finalmente baja la guardia y asiente

Sh: De acuerdo, entraré

Una vez que ambos entran, cierras la puerta tras de ti. Mientras Seonghwa se sienta en el sofá, pones la pava a calentar y buscas el té de manzanilla. Preparas dos tazas con miel y te sientas junto a él

Sh: Gracias

Yo: Entonces, ibas a contarme de Bunny

Sh: Cierto. Bueno.....estaba en el punto más bajo de mi vida. Algo pasó y me deprimí mucho

Yo: ¿Tú? ¿Deprimido?

Sh: Si. ¿Puedes imaginarlo?

Yo: Claro que puedo imaginarlo. Podría pasarle a cualquiera

Sh: Yo creí que me hacía ver débil

Yo: ¿Qué? Claro que no. Es muy difícil lidiar con esa mierda, no importa cuán seguro o fuerte creas que eres

Sh: Supongo que nunca lo pensé de esa manera

Yo: ¿Quieres decirme lo que pasó?

Sh: Llamémoslo un muy mal rompimiento. Sucio. Caótico. Luego de que pasó, no pude hacer nada. Era un desastre en el trabajo y estaba bebiendo demasiado. Luego una noche, cuando salía de un bar, escuché ese triste sonido viniendo de la esquina. Ahí fue cuando lo vi. El pequeño bastardo estaba todo mojado y sucio, sentado sobre una caja de cartón. Me miraba con esos ojos enormes, rogando que lo lleve, y lo hice. Bunny me devolvió la cordura, me hizo sentir que podía salir adelante. Sé que suena malditamente extraño, pero es cierto