Capitulo 1

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Advertencia: temas delicados en este capítulo se pide discreción y en ningún momento se incita a que realicen esta acción, si te sientes identificado busca ayuda profesional o comparte tu sentir con familia y amigos, no estás solo

Izuku de tercero de secundaria no entendía como termino en esa extraña situación pues estaba sentado en la sala de su casa con una persona muy parecida a Kacchan, solo que se veía mayor, calculaba unos 17 años, iba vestido como salido de alguna convención de comics medievales, unos pantalones rojos ajustados, su pecho descubierto, collares extraños colgando en su cuello y una capa roja.

Flashback

Izuku Midoriya se encontraba en un rincón del aula, su mirada perdida en el suelo mientras todos los demás estudiantes se retiraban. Los murmullos de burla resonaban en sus oídos, recordándole constantemente que era considerado un don nadie, alguien sin valor en el mundo de los héroes.

La gota que derramó el vaso fue cuando Katsuki Bakugo, su ex amigo de la infancia, se acercó a él. Con su típica actitud arrogante, Kacchan tomó el cuaderno de Izuku, ese cuaderno donde anotaba sus pensamientos, ideas y sueños, cosas que para él eran fundamentales. Lo hojeó con desdén, leyendo algunas de las notas de Izuku en voz alta para que todos pudieran escuchar.

Izuku, sintiéndose vulnerable y acorralado, se encogió en su pupitre, evitando el contacto visual. Las risas y burlas de sus compañeros llenaban la habitación, acrecentando la sensación de soledad y desesperanza en el corazón de Izuku. A pesar de la humillación, no se atrevió a enfrentar a Kacchan, temiendo las posibles consecuencias de desafiar al chico explosivo. Al final solo quedaban él y Kacchan, este se acerco y le susurro muy cerca deberías tirarte de la azotea tal vez en tu otra vida nazcas con un don" luego le mostro la libreta que le había arrebatado y la hizo explotar quedando solo pequeños trozos. El sonido de la explosión resonó en el aula, simbolizando la destrucción no solo de un simple cuaderno, sino también de los sueños y pensamientos de Izuku.

El peliverde ya no podía más, no había nadie quien lo ayudara siempre sufrió maltratos seria mejor que simplemente ya no existiera, su mirada quedo cegada por solo oscuridad, espero a que por fin ya no quedara nadie, camino rumbo a la azotea que también era su escondite, seria su ultima vez ahí, pero no había sensación que le dijera "no lo hagas". Se paso el barandal de seguridad.

Sus ojos estaban acuosos y rojos de tanto llorar, se sentía mal pues dejaría sola a la única persona que se habia preocupado por él, pero supuso que era lo mejor, así dejaría de ser una carga para su madre, pensó en los pocos momentos felices que tuvo en su vida antes de enterarse que no tenía un don.

Cerro con fuerza los ojos y dio un paso al frente esperando que ese fuera su fin ya no sufriría, ya no decepcionaría a nadie y estaría bien. Cuando finalmente soltó su mano del barandal para dar pase a la caída libre del edificio escucho un fuerte grito de enojo.

-MALDICION – Grito el desconocido corriendo desde debajo de donde iba a caer el menor, con una increíble agilidad dio un salto, luego una explosión que lo impulso, atrapo al menor en el aire.

El joven Izuku abrió los ojos sorprendido al encontrarse a salvo y en brazos de este extraño héroe.

-¿EN QUE DEMONIOS ESTABAS PENSANDO? – Exclamo enojado el héroe, mirando a Izuku con una mezcla de preocupación y enojo, vio también en esos ojos rubies extrañamente familiares la frustración.

Izuku titubeó, sin entender lo que acababa de pasar. El héroe lo bajó con cuidado al suelo y lo soltó, pero aún mantenía una expresión severa en su rostro.

-¿Acaso no tienes idea de lo que has estado a punto de hacer? - preguntó el héroe mientras cruzaba los brazos.

Izuku, aturdido, negó con la cabeza. No podía entender cómo alguien había llegado justo a tiempo para salvarlo. La mezcla de emociones llenaba su mente, desde el miedo hasta la confusión.

Cambiando el destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora