MALDITA DIABLA #1

CAPÍTULO 2

Advertencia capitulo extra largo y con escenas sexuales fuertes. Disfrutenlo

El atemorizante y sexy semental  que tengo frente me contempla en exceso su mirada  intensa, poderosa y ardiente se posa en mis escandalosas curvas

El coño me chorrea y el corazón se me detiene dentro de la cavidad torácica, al sentirme devorada por sus fieros ojos negros

No me atrevo a mirar su entrepierna, no quiero  cometer una locura ni mojarme más.

Daissy tiene razón este hombre es tremendo

—La orden que te di fue precisa e inapelable y  apareces a la hora que te sale de los cojones —le reclama a Carlos y pasa por mi lado ignorandome, como si yo fuera invisible ni siquiera se tomo la molestia de presentarse

Muero con el olor de su perfume lo aspiro unas cuantas veces y empiezo a sentirme aturdida, es exquisito. El aroma lo asocio a la madera, a un hombre viril, a un tigre feroz .

Dos mujeres caminan tras èl una pelinegra y una rubia que parecen sacadas de películas porno por sus escultóricos cuerpos de infarto, portan unos mini, micro bikinis, de esos que son trocitos de tela tapando escasamente los pezones y la raja de su sexo

—La próxima vez que me hagas esperar, te descuartizo pedazo por pedazo, para después meter tus vísceras en el coño de tu mujer—despotrica severo

—¿Tú estás loco? —suelta Daissy

—Sí, loco en exceso, y sabes bien que mi locura puede llegar a destrozarlo sin piedad. Me gusta que se cumplan mis ordénes al pie de la letra

Tiene un carácter de perro, pero su voz es ronca, agresiva, potente, intimidante y dominante y a eso le sumamos la mirada de prepotencia criminal que le brota, sin dudas es una fuente de respeto para cualquiera.

—Tuve que retrasarme unos minutos, patrón porque ....

—Ahórrate las explicaciones no las he pedido—lo calla

Miro a Alexander quien esta detrás de mi con una copa en la mano recto, inexpresivo y con cara de piedra caliza

—Hey—llamo su atencion —¿Dónde queda el baño? —le pregunto

—Sigueme culona, te llevaré a uno de los baños exclusivos de la mansión

Caminamos por todo el lugar, The Weeknd es el dueño de la pista, las luces tenues giran alrededor de la piscina acariciando los cuerpos de las personas dentro del agua, algunas mujeres bailan delante de los tubos que están distribuidos en la tarima plateada. Chocan los gritos de placer, risas, música y el olor a cigarrillo, alcohol y otras sustacias no legales impactan contra mis fosas nasales

—Moriría por verte bailando desnuda en uno de esos tubos —suelta Alexander quien camina con las manos detrás de la espalda

Bailar en tubo es uno de mis hobbies y pasatiempos predilectos, es sexy y divertido y como ejercicio es efectivo, llevo más de dos años dominándolo. Aprendí movimientos eróticos pocos habituales en las coreografías a actuar con el rostro, a mostrarme deseosa, a mirar primero con coquetería y después con ganas de follar

—Te morirás con las ganas —suelto

—Toda una fiera la nena

—Y tù un atrevido — refuto

—Juro por Dios que está noche te veré bailando desnuda pole dance

—Amo tú perseverancia

Por el lado nos pasa una mujer morena con rastas, tatuada y de cuerpo fornido,  embutida en un corset de cuero negro, que deja al aire sus pechos de piel tostada y su depilado sexo lleva altas botas bucaneras hasta los muslos. Alexander voltea a mirar y lanza una dura nalgada en su trasero.