Taeleficent ❣ TaeGi

𝖈𝖆𝖙𝖔𝖗𝖈𝖊

Efectivamente como Taehyung propone, los hados madrinos consiguen convencer a ambos padres de que se lo lleven a una casa perdida donde nadie más que ellos sepan donde se hayan, por supuesto después de comer con los Jeon, que acaban de llegar a palacio.

A regañadientes y aguantando porque Taehyung así se lo ha pedido, Yoongi se prepara debidamente para su cena con el príncipe rubio que viene a pedir su mano, poniéndose el traje más simple que tiene, tampoco va a lucir como si fuese a enlazarse en matrimonio, eso es solo para su mayor.

Baja con rostro neutro, siendo recibido por la especial sonrisa del príncipe Jungkook, que lo saluda tímido con la mano, solo obteniendo un asentimiento.

- Príncipe – Dice el pelinegro cuando llega – Bienvenido.

- E-Estás hermoso – Susurra con Jungkook, desviando la mirada.

- Gracias – Responde impasible.

Ambos menores se dirigen al gran comedor donde se va a comer con los adultos que ya los estaban esperando, tomando asiento uno enfrente del otro como manda el protocolo, cuando el rey Jeon, comienza a hablar.

- Príncipe Yoongi – Llama amablemente – Debo decirte que a cada día que pasa te conviertes en un bello hombre como lo es tu padre el rey.

- Muchas gracias, su alteza – Hace un leve sentimiento con la cabeza.

- Como sabrás mi hijo mayor está interesado en ti – Sigue diciendo, insistiendo ante la cara impasible del menor.

- ¡Padre! – Se queja Jungkook, con el rostro ruborizado.

- Mi señor – Comienza Yoongi con tranquilidad – Me halagan enormemente los posibles sentimientos del príncipe por mí, pero no creo saber a dónde se dirige con esta conversación.

- Eres muy listo, príncipe – Sonríe el monarca – Mi hijo está aquí para pedir tu mano, para que reinéis juntos cuando yo le ceda el trono.

- Eso no es lo que hablamos – Interviene Namjoon – Mi primogénito será el que reine aquí, usted tiene más hijos.

- Tengo hijas, que es algo diferente – Entrelaza sus manos, reclinándose hacia atrás – Jungkook se merece el trono por derecho, además de que solo alguien de la altura del príncipe Yoongi puede desposarse con él en matrimonio.

- Nosotros de momento no tenemos más descendencia – Interviene Seokjin - ¿Qué pretende su majestad que hagamos si por desgracia no conseguimos tener ningún hijo más?

- Ese no es mi asunto – Contesta simple – Además de que tengo entendido que tiene un hermano menor, él podría ocupar su puesto si a ustedes les ocurriese algo.

- Está desterrado – Suelta Yoongi – Mi tío Taehyung es dueño y señor del bosque, no tiene nada que hacer para con nuestro reino, dejó de tener derechos aquí cuando cometió la masacre por la que fue castigado – Frunce levemente el ceño – Mi señor no puede pretender que por el simple hecho de que quiera que su hijo y yo nos desposemos, mi pueblo se quede sin gobernantes.

El salón se queda en silencio ante las palabras del príncipe, que casi puede escuchar los aplausos que su amado debe estar dando en su castillo al vigilarle, porque sabe a la perfección que Kim Taehyung está atento a cada detalle de la conversación que están manteniendo entre ellos.

- Lo has criado muy bien, Seokjin – Acaba diciendo el rey Jeon – Mi hijo y yo estamos hoy aquí para pedir la mano del príncipe Yoongi.

- Sintiéndolo mucho – Sonríe socarrón – He de declinar su oferta, mi corazón ya tiene dueño al que entregarle mis sentimientos.

- ¡Kim Yoongi! – Gruñe Seokjin, dando un golpe en la mesa.

- Si me disculpan – El menor se levanta – Mis padres han decidido desterrarme a una casa en el bosque porque temen que me escape con mi amante – Da una leve reverencia – Jungkook, realmente lo siento mucho.

El mencionado asiente con una sonrisa triste, eso lo sabe desde hace tiempo, pero la esperanza de ganarse el corazón de ese lindo príncipe siempre estuvo ahí.

- Seokjin, si tu hijo rechaza al mío me veré en la obligación de cortar nuestras negociaciones – Amenaza el monarca.

- Padre – Llama Jungkook – Mi príncipe es libre de decidir a quién amar, no puedo obligarle a mantenerse a mi lado si no es lo que realmente quiere – Le dedica una mirada a Yoongi que le mira con atención – Aunque mis sentimientos sean reales, para mí, su felicidad es lo primero.

Una sonrisa enternecida se forma en el rostro de Yoongi al escuchar esas palabras, le remueven el corazón y le hacen desear que encuentre a la persona que merezca el amor indiscutible que el príncipe Jeon tiene para dar.

- Esto no quedará así – El rey Jeon se pone de pie, sin haber tocado la comida – Tendréis noticias nuestras, nos vamos hijo.

- Hablaré con él e intentaré hacerle entrar en razón – El príncipe imita a su padre y hace una reverencia – Yoongi por favor, no dudes acudir a mí si necesitas algo, aunque no tenga tu amor, siempre tendrás mi más sincera amistad.

- Gracias, príncipe – Asiente el pelinegro.

La familia real ve como los soberanos del país vecino se marchan, volviéndose hacia su hijo en el momento en el que desaparecen por las puertas, ambos con una profunda cara de decepción y tristeza.

- Te quedaras con los hados hasta que se te pase la tontería que sientes por Taehyung – Sentencia Jin, levantándose – Se ha acabado que hagas lo que te dé la gana.

- Acabarais antes arrebatándome la vida – Desafía Yoongi – Porque jamás dejaré de sentir lo que siento por él.

- Eso lo veremos, hijo – Escupe el mayor.

Padre e hijo se sostienen la mirada de forma desafiante, Namjoon los observa casi divertido, sin entender qué es lo que da ese hombre con el que apenas ha cruzado unas palabras para que su marido e hijo se peleen por él.

Taehyung desde su castillo, no puede estar más orgulloso de su príncipe.