𝗥𝗢𝐒𝐄 𝗜𝐍 𝗛𝗢𝗚𝐖𝗔𝗥𝗧𝐒, Harry Potter [1]

6. Rose 1, Draco 0

capitulo seis

NUNCA HABÍA recordado despertar tan plenamente feliz, ni siquiera se molestó cuando Hermione la sacudió para levantarla o cuando Lavender se puso histérica porque "el uniforme le quedaba espantoso", a Rose tampoco le encantaba como le quedaba, se sentía como un enorme oso de peluche con tantas capas de ropa.

Bajo junto con Hermione al Gran Comedor a desayunar esperando encontrarse con Zoe pero no la vieron en ningún lado del pasillo.

Siguieron desayunando y Rose agradeció no comer algo duro porque no tenía ganas de luchar de nuevo con los cubiertos, si no sabía cortar comida que fuera mínimamente dura.

—La primera clase es transformación, ¿No es emocionante?— dijo Rose imaginando que transformaba a las niñas en el orfanato que la molestaban en cucarachas.

—Lo es, leí todos los libros sobre transformación, es sumamente interesante— dijo Hermione.

—Creo que necesito leerlo—

—¿Sabes leer?— rio Ron junto a Harry.

—Que no sepa cortar carne, y atarme los cordones, no significa que no sepa leer —
se defendió Rose haciendo reír mucho más a los chicos y a ella misma al darse cuenta lo que dijo.

—Yo no sabía lo de la cama y los cordones— dijo Ron.

...

—Transformaciones es una de las magias más complejas y peligrosas que aprenderán en Hogwarts —dijo—. Cualquiera que pierda el tiempo enmi clase tendrá que irse y no podrá volver. Ya están prevenidos.

Entonces transformó un escritorio en un cerdo y luego le devolvió suforma original. Todos estaban muy impresionados y no aguantaban las ganas de empezar, pero muy pronto se dieron cuenta de que pasaría muchotiempo antes de que pudieran transformar muebles en animales. Después dehacer una cantidad de complicadas anotaciones, les dio a cada uno una cerilla para que intentaran convertirla en una aguja.

—¡Flintifors!— exclamó Rose que era su tercer intento en convertir la cerilla en aguja, pero está vez había logrado que el cerillo se alargará y una de sus puntas se hiciera puntiaguda.

—Bien hecho— felicito Hermione que ya había logrado convertir el cerillo en una aguja completamente

McGonagall le dió una sonrisa excepciónal a las dos niñas y le mostró a la clase las dos media agujas.