Lynchstonisismo

Capitulo 1

LynchStöne, era un dios un tanto egocéntrico y orgulloso pero con un buen corazón que sentía cierta empatía por los demás.

-2020 años, no a cambiado mucho desde la ultima gran guerra en su 1939.
Dije con una expresión de decepción, al ver en la ventana interestelar el nuevo conflicto que empezaba a nacer.
-¿que puedes esperar de ellos? Su instinto les pide sangre de un supuesto enemigo, pero no se dan cuenta de que todos son iguales...
Dijo Dremor, mi mejor amigo y compañero de batalla.
- no podemos hacer nada!
Continuo.
Derepente, como suele ocurrirme, me llego una alocada idea, pero temía que solo pensarla me conllevara a un castigo.
- ¿y si, vamos a la tierra?
Le dije a Dremor.
-jajaja dime que estas bromeando!
Exclamo, pero al ver que a mi no me causaba nada de gracia, se puso serio y dijo
- si kjor se llega a enterar te enviara a la tierra de la oscuridad!
- ...siento pena por los humanos, necesitan saber la verdad o se seguirán matando!
Dremor se quedo pensativo y después de analizarlo me mostró algo de apoyo.
- ve tu, yo me quedare en caso de que necesites algo de nuestro mundo, y te observare a través de la ventana interestelar.
- me parece bien.
Conteste, iré solo, sin ningún acompañante, tratare de mezclarme y veré que pasa.
Salí de la sala de la ventana interestelar y me dirigí a el hangar de la ciudad, yo solía visitar otros de los mundos, así que mi vehículo estaba siempre listo para cualquier viaje.
Mi vehículo era algo así como una aeronave exploradora, ligera con un par de cañones de luz y solo para dos pasajeros.
Sin necesidad de llevar una maleta conmigo, aborde mi nave y despegue rápido, dejando detrás de mi una centella y saliendo a toda velocidad.

Llegue a el planeta tierra y oculte mi vehículo en un bosque cercano a un pueblo.
Al ver mi nave bien escondida entre arbustos y otros seres vegetales me dirigí caminando a el pueblo, me asegure de no llevar mi armadura de batalla ni mis armas, para no llamar mucho la atención.
Al llegar al pueblo me di cuenta de las solitarias calles, las pocas personas que había acarreaban cabras, o cargaban frutos en pequeñas bolsas de tela, su vestimenta aparentaba ser vieja y descuidada. Al parecer había un manda mas, o mejor dicho dos.
En distintos lugares había carteles con inscripciones del tipo: obedezca a los líderes, los hermanos Havendish, eran unos tipos con aires de creerse superiores a la humilde gente de el pequeño pueblo.
Hutch y Geofrey Havendish, en realidad esos nombres me parecían conocidos y así era, son un par de mercenarios buscados por el universo por haber cometido muchos crímenes, originarios de el planeta de los steam's.
Camine algunos pasos por el pueblo y pude ver niños con los huesos marcados, mujeres con lagrimas en los ojos, y hombres cansados de hacer lo posible para alimentar a sus familias sin ningún resultado aparente.
Con mi nariz y mi boca cubiertos por un pañuelo negro aun podía respirar el humo que emergía de las chimeneas de las pequeñas y casi destruidas chozas, mire a una plaza abandonada y una iglesia yacía ya sin una de las torres que estaba derrumbada y los ladrillos dispersos por el lugar, mientras que al fondo del pueblo pude divisar un edificio en el que supuse que estarían los responsables de la desdicha de la pequeña comunidad.
Una edificación imponente, futurista y con cristales color turquesa en su fachada.
En ese momento una furia asesina lleno mi cuerpo y camine con paso decidido a el edificio.
Un anciano se puso frente a mi al ver a donde me dirigía.
- no lo hagas! No eres el primer valiente, créeme, los otros están allí...
Y señalo con su huesudo indice a un puente cerca de la iglesia,
Habia cuerpos colgados, unos 10 o 12, no se distinguían bien de tan putrefactos que estaban, pero, el no sabia que yo tenia el poder necesario para derrocar a esos bandidos.
- yo no soy como ellos...
Le dije apuntando a los cuerpos.
-... Yo liberare a su pueblo!
Extendí mi brazo al frente con la palma abierta y justo en frente del anciano se materializo mi hacha de batalla, un largo mango, una cuchilla puntiaguda detrás y una afilada navaja al frente, el viejo se quedo perplejo al ver tal magia, que era como ellos la conocían.
Cerré mi puño con fuerza y avance de nuevo a el edificio.

Llame la atención de varias personas y así mismo empezaban a hacer ruido, lo cual alerto a los guardias que retozaban en cómodas sillas desde donde vigilaban a la gente para que trabajara.
Un tipo grande caminaba directo a mi con la mano en su espada sin desenvainar, a penas abría la boca marcandome un alto y levantando mi hacha con fuerza hice que su cabeza volara por los aires, algunas personas se ocultaron y otras hicieron sonidos de aprobación, otro guardia un poco mas pequeño corrio hacia mi con su espada preparada para atacar, lo esquive ágilmente y quedar desprevenido recibió una cuchillada en la espalda, una alarma empezo a sonar dentro de la edificación del mal y salieron ahora guardias con armas de fuego, me advirtieron que parara pero al ver que no me importaba comenzaron a disparar, mi piel era tan rigida que sus balas solo me dejaban moretones, me acerque a cada uno y al verse indefensos trataban de golpearme con sus pistolas o solo corrían y yo les mostré la piedad que ellos tenían con la gente del pueblo.
Dejando un camino de sangre a mi paso rompí de un puñetazo la puerta de grueso cristal y entre sin que nadie mas se opusiera, subí por cada uno de los pisos, aniquilando a cualquiera que se atravesara, hasta que al fin llegue a el ultimo piso en el que encontré a los pobres hermanos Havendish, al haber visto cada uno de mis movimientos optaron por ponerse de rodillas ante mi.
- p..p..porfavor, te daremos lo que quieras! Déjanos vivir, te lo suplicamos, quieres dinero? Llévate el que quieras!!
Me dijo Hutch casi llorando, mientras Geofrey abria una caja fuerte y me daba montones de monedas brillantes, al parecer de oro.
- muestra piedad por favor!!!
Volvio a sollozar Hutch. Lo mire a los ojos y susurre
-no.

Deje caer el hacha y me acerque aun mas a los Havendish y levante a uno con cada mano, sali a la terraza de el piso y la gente ya se habia acumulado en el camino de sangre, esperando verme de nuevo, al verme salir con los havendish del cuello todos comenzaron a gritar que acabara con ellos. Mire a hutch a los ojos y le dije:
- al pueblo lo que pida.
Lo levante justo por encima de la gente, la cual se movio a un lado para evitar que el havendish callera sobre ellos, un desgarrador grito al aflojar mis dedos se escucho a algunos kilometros a la redonda, estoy casi seguro, pero no duro mucho, concluyo con el sonido de sus huesos rompiendose, para mala suerte de Hutch, la caída no acabo con su vida y al rededor suyo habia mucha gente enfadada y bastantes armas de sus guardias caídos.
Baje a Geofrey y lo obligue a que mirara hacia el cuerpo de su infortunado hermano.
- ¿que es lo que quieres? Por favor! Lo conseguiré! Te lo juro!
Dijo con voz chillona e inquietante.
-quiero justicia, y no te preocupes, yo se como conseguirla por mi cuenta.
De nuevo hice que mi hacha se materializara en mi mano y corte la cabeza de el Havendish restante.
La gente me aclamaba, como su héroe, los había salvado de la tiranía de esos tipos, por suerte los steam's no tienen habilidades muy superiores a los humanos, solo su habilidad de crear artefactos o vehículos únicos.

Aun con mi pañuelo cubriendo parte de mi rostro sonrei y aclame:
- su pueblo es libre! Ahora pueden hacer lo que gusten! Ustedes, son libres!

Justo antes de dar la vuelta para bajar el edificio observe como una aeronave luminosa bajaba del cielo,
Inmediatamente supe que eran problemas.

La ángel superior bajo con el esplendor que un ángel debe tener, seguida de dos de sus hermosas guardianas. Los ángeles solo eran figuras femeninas, los cuales se reproducen por medio de una especie de clonación, mientras que los arcángeles son androides con inteligencias artificiales, caracterizados por no tener sentimientos.
Un arcángel cualquiera me hubiera atacado apenas hubiera llegado, tuve suerte de que mandaran ángeles a por mi.
- párrafo 3, "ningún habitante de Theronig puede visitar a el mundo azul, por ninguna razon, a menos que sea una misión antes discutida en el consejo universal"
Dijo El ángel superior mientras me miraba con sus ojos negros de pupila celeste.
Encontrarme con ángeles no era algo nuevo para mi, así que solo extendí mis brazos para que me esposaran.
Una de las guardianas se acerco a mi y yo mire su rostro, no era como el resto de los ángeles, ella era diferente, estaba seguro que no era otro de esos clones que hacían en masa, ella era especial, y sus ojos eran muy distintos, eran blancos y su cornea marron claro! Eran unos ojos hermosos, dignos de ser una gema de vann, ella también me miro y no fue nada grosera, sentí un tacto amable.
Tan diferente era que por un momento olvide que era un prisionero....