(⁠◠⁠‿⁠◕⁠) One Shots y Reacciones SKZ (⁠ ⁠ꈍ⁠ᴗ⁠ꈍ⁠)

(⁠*⁠❛⁠‿⁠❛⁠)⁠→ Chan ⟵⁠(⁠o⁠_⁠O⁠)

La vida de Isabelle no podía ser peor, o al menos eso pensaba a sus cortos 19 años, y es que sí, aunque a esa edad nos creemos que hemos vivido mucho  no sabemos que lo peor está por venir.
La vida de adulto es una real basura si tu dinero no te alcanza y solo puedes trabajar sin descanso para sobrevivir.
Por eso cuando el día de hoy la vecina dueña del café donde trabajaba le hizo saber que estaba desempleada simplemente porque la morena que solicitó empleo está mañana tenía muchas más curvas que ella y atraería más clientes, sintió sobre su cabeza un balde de agua fría en sentido figurado.

¿Como pagaría sus rentas ahora? ¿Saben que significa estar desempleada en este tiempo? Que no sabría cuanto tiempo tardaría en conseguir trabajo.

Con pereza se estira en su cama, no le quedaba de otra que esperar a que amaneciera para poder pensar que haría de su vida.

Pasa sus delgadas manos por la sábana, talves tendría que irse de aquel lugar pronto por falta de pago.

Desearía cerrar los ojos y aparecer en otro lugar con otras oportunidades ~ comenta en un susurro mientras reproduce en su teléfono Social Path de su grupo de Kpop favorito.

El sueño va adueñandose de su cuerpo y sus párpados pesan cada vez más. Escucha el estruendo en su clóset pero se lo achaca a algún sueño vivido que tenga, realmente estaba agotada, tanto que se deja llevar hasta caeré totalmente en brazos de Morfeo.

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Aún adormilada y con el cuerpo enlentecido siente como es abrigada con una manta más gorda, su madre siempre lo hacía cuando en las mañanas pasaba por su habitación... Pero esperen un momento, su madre murió hace tres años y ella vive sola. Así que fue inevitable sentir aquel escalofrío desde la punta de su cabeza hasta sus pies dándole un puntazo en el estómago. ¿Acaso era un fantasma? Cerró los ojos con fuerza para no ver, si no lo hacía estaría más tranquila, o eso creía.

Pero entonces escuchó como alguien se tropezaba seguramente con la pila de ropa sucia que tenía al lado de su cama y maldecía por el hecho.

Era oficial, alguien estaba en el cuarto y ella no sabía quién, no tenía novio ni amigos, no porque no quisiera sino porque no tenía tiempo y los pocos que tenía ya no coincidían en horarios con ella.

Así que se llenó de valor y se destapó con fuerza mirando en dirección a donde provenía la voz. Un joven pelinegro con ojos muy abiertos la miraba, y no era cualquier chico, era aquel chico que tanto le gustaba, su bias de Stray Kids, el mismo Cristopher Bang Chan.

El chico con nerviosismo rascó su nuca y se quedó estático. Ella inevitablemente soltó un grito que lo hizo retroceder unos pasos atrás.

¿Quien eres y qué estás haciendo en mi habitación? ~pregunta ella cubriendo su inexistente desnudes debajo de las sábanas.

Él miró a todos lados sin saber que decir ¿Acaso él podía explicar que hacía allí? Por su expresión parecía que no.

Ella se pasa las manos por su alborotado cabello tenido de castaño claro y niega con la cabeza.

Si, es una tontería que pregunte algo así lo sé, sé quién eres pero no sé qué haces aquí ~suelta ella sin siquiera respirar.

Él aún en shock se señala con su dedo índice en el pecho.

¿Sa-sabes quien soy? ~pregunta el chico al fin.

Si, eres Bang Chan ¿No? O su doble entonces ~ Ella mira al techo y niega con la cabeza, ~ No no espera, no puedes ser él, es impensable que Bang Chan esté en mi cuarto. Eres una alusinación ¿Verdad? Viniste a torturar mi atormentada cabeza y no te voy a dejar así que desaparece de una vez ¿Qué comí anoche? Solo puede ser eso porque yo no bebo alcohol.

El chico la mira con atención mientras suelta su diarrea verbal, él estaba tranquilo. Cuando llegó a ese lugar pensaba que todos sus sueños se habían ido por el caño y su vida se había reiniciado -culpaba a Félix y su obsesión por los videojuegos que le había pegado esos modismos- pero al ver que ella lo reconoció suspiró con tranquilidad, aún era Bang Chan el líder de Stray Kids y eso era bueno.

Él vuelve a retroceder cuando ella se levanta de la cama, estaba vestida con ropas de andar por la casa contrario a lo que él pensó cuando la vió cubrirse tanto con la sábana.

Ya sé, eres un sueño, eres mi sueño porque anoche me dormí con una canción del grupo y por eso apareces tú aquí, solo puede ser eso ~Comenta ella invadiendo el espacio personal de él que de tanto retroceder estaba contra la puerta de su armario.

No creo ser un sueño ~dijo al fin él viendo la repentina cercanía de la chica con él.

Ella levanta su dedo índice y toca su cachete, se sentía muy real.

Te sientes real, pero ese es el secreto de los sueños, una vez soñé que halaba una soga y desperté con dolor en los dedos. ~dice ella retirando su dedo de la piel del chico y sonriendo ~ Eres producto de mi subconsciente que quiere darme un sueño bonito antes de que mañana despierte en mi estúpida vida nuevamente.

Él la ve nuevamente y su sonrisa lo contagia, pero eso último que dijo lo alarmó ¿Tenía una vida dura?

¿Tu vida es dura? ~suelta él sin pensar.

Eres producto de mi imaginación así que seguro lo sabes y vienes a consolarme así que  no voy a malgastar mi sueño contándote mis miserias. Mejor ten una cita conmigo y así olvido que tengo que despertar. ~Ella se aleja hasta la ventana con una sonrisa.

Él observa su silueta una vez más, ella era una muchacha muy bonita, en otra ocasión distinta le hubiera pedido sin ningún problema su número de teléfono, adoraba a las chicas extranjeras, pero está vez era diferente

¿Como le explicaba a esa chica que era una persona real, que no estaba soñando y que había salido de su armario que precisamente daba al armario de su propia habitación en Seúl?

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One shots basado en la serie coreana brasileña _A través del Armario_