Escape - PAUSADA / CASI CANCELADA

Infierno, Segunda Parte

Advertencia : contiene lemon (no precisamente consentido por ambas partes), escenas para mayores de 18 (la escritora tiene 15 así que 😐), y violencia, la lectura es bajo su responsabilidad.

Estaba acorralado contra aquella pared, el rubio sobre el, tratando de besarlo, un rodillazo en las partes bajas y logró escapar de su agarre, trató de abrir la puerta y la celda, pero estaba cerrada con llave, si tan solo tuviera su magia todo sería más fácil.
Thor de vuelta ya estaba sobre el, lo tomo por los hombros y azotó contra el frío piso, un puñetazo sobre su cara, sentía la sangre cubrirle los ojos, este no era su hermano, era alguien con su cara, su voz, pero no era el, nunca le haría nada.

-vamos loki, si no quieres hacer esto por las buenas, será a mi manera.

-púdrete

Una cachetada fue lo que recibió, mientras su propia sangre comenzaba a nublar su vista, y el rubio salia, trato de alcanzar la puerta antes de que se cerrará pero no lo logro.
Dejo de sangrar, pasaron horas y nada sucedió, probablemente se había olvidado de él, eso era lo que le suplicaba a las nornas qué pasará.

Un grupo de cinco guardias abrió la puerta, el azabache ya se encontraba de pie, preparado para pelear, aunque en su condición, no podía ganar, no tenía su magia, y estaba débil, la mediocre comida que le daban no era suficiente, aunque eso no le impidió intentarlo, aunque terminó con una paliza y encadenado a la pared, nuevamente volvió a quedar solo, sus muñecas dolían, estaban sobre su cabeza mientras el permanecía sentado, en algún momento, el sueño pudo con él.

-hola loki, que fea cortada tienes en la ceja - dijo Thor, quien se encontraba sentado sobre las piernas del azabache impidiendo que se moviera

-suéltame Thor

-no, no te moverás tanto así, además, se que te va a gustar - dijo el rubío en su oído para posteriormente morder el lóbulo y comenzar a besar su cuello en besos húmedos, y sus manos masajeaban el pecho del menor, aunque Loki se movía no era capaz de quitáselo de encima, sentía las lágrimas a punto de salir, mientras comenzaba a ser desvestido, los besos bajaron a su pecho, en donde la boca del mayor se entretuvo mordiendo y lamiendo los rosados pezones, aun, sentado comenzó a quitarle las botas, para posteriormente levantarse y quitarle el pantalón, Loki pateaba, pero no podía hacer nada, Thor era más fuerte que el, las lágrimas se habían hecho presentes bañando sus mejillas.
Una mano comenzó a masajear su miembro sobre la ropa interior, no pudo evitar que un pequeño gemido saliera.
El rubio volvió a la tarea de besar sus labios, hasta dejarlos hinchados.

-dime que no quieres esto hermanito

-por favor Thor, detente, te lo ruego - dijo el pelinegro aun llorando, pero poco servía, cuando Thor quería algo, hacía hasta lo imposible por conseguirlo.

Estaba completamente desnudo, Thor se bajó el pantalón dejando que su erección se hiciera presente, y de una estocada ya estaba dentro del menor, quien grito tan fuerte que hasta los nueve reinos lo habían oido, hasta sentir su garganta desgarrarse, los movimientos bruscos no tardaron en llegar, mientras Thor rugia y maldecia lo apretado que estaba. ¿Donde estaba el niño de cabellos rubios, aquel que era su hermano, aquel con el que creció tantos años, aquel que quería, y aquel que odiaba por ser el favorito?, esa bestia era todo menos Thor, su Thor, su hermano, el dolor no cesaba, solo aumentaba con cada estocadas, con cada movimiento hasta que todo se volvió oscuridad.

Despertó, estaba recargado contra la pared, sosteniendose de sus débiles rodillas, le dolía la cadera, le dolía en donde Thor tenía sus dedos, sentía un líquido correr por sus piernas, las estocadas fuertes y certeras le hacían temblar, las lágrimas habían cesado, sintió como su interior era llenado de un líquido caliente, y por fin Thor terminó, dejándolo sentado de una manera incomoda.

-pensé que aguantarías mi ritmo, pero no te preocupes, te acostumbraras, te dejo mi capa para que no te de frío, más tarde te traerán comida- sin decir más se marchó dejándolo solo, las lágrimas volvieron, se sentía sucio, prefería morir antes que seguir así. La capa solo cubrían sus partes. El tiempo pasó, hasta hacerse eterno, un guardia, de cabellos blancos como la nieve apareció, tenía un plato de comida.

-comida para la puta de Asgard, parece que el rey se divirtió mucho contigo, que te parece si pruebo yo también - dijo mientras tomaba su rostro. Grito nuevamente pidiendo ayuda, quizás otro guardia lo escucharía, quizás le ayudaría, quizás...

Otro guardia entro debido a los gritos

-¿qué carajos haces?

-probar este espécimen, ¿acaso alguna vez te has follado a un Jotun?

No hubo respuesta por parte del otro soldado

-si quieres puedes ayudarme a que se deje de mover, o si no largate y no escuchas nada

-¿qué hago?

-sostén sus piernas, evita que se mueva

Las lágrimas del azabache no cesaban, sus gritos tampoco, aunque no sabía en dónde estaba, probablemente nadie lo escucharía, y nuevamente, una intrusión lo invadió...