-No sabemos si sobrevivirá...-. Cualquier rastro de molestia o dolor se esfumó ante esas palabras, sin soltar a su bebé, se vistió con su bata mientras se levantaba de la cama –Mi señora, no se esfuerce, debe descansar-
-Q-Quiero verlo, Tao, llévame con él-
Miró a Xiao, en búsqueda de una respuesta salvadora, pero así como él, sabían lo terca que podría ser Mulan –Llévala cargando, Mao, no dejes que se esfuerce-. El mencionado la tomó en sus brazos con sumo cuidado antes de salir de la casa; ella presenció los resultados del ataque... Varias casas quemadas, carretas destruidas con los objetos que cargaban tirados a su alrededor, y los más heridos siendo atendidos por sus compañeros. La primera nevada había caído hacía pocos días, así que Mulan protegió a su bebe del frío con su abrigo. La llevó hasta una pequeña choza, con ayuda de 2 compañeros, le abrieron la puerta
Ahí estaba su esposo, con la espalda y cintura cubiertas con vendas, un trapo húmedo reposaba en su frente. Inmediatamente, Mulan bajó de los brazos del soldado y se sentó al lado de su esposo –Mi señora... Capturamos a 3 de los responsables de que nuestro señor fuera herido. ¿Qué hacemos con ellos?-
-Los quiero vivos por ahora, ya pensaré que hacer con ellos-. De pronto, Shan Yu se removió mientras soltaba un quejido –C-Cielo...-
-Mi flor de loto- susurró con una débil sonrisa, aún a pesar de sus heridas, su actitud no había cambiado en nada. Con cuidado de no lastimarlo, su esposa lo abrazó, recibiendo a cambio un beso en su frente
-Shan Yu, hay alguien que quiere conocerte... Akame, él es tu padre-
Padre e hija se miraron por varios segundos, meses en los que el líder de los Hunos le habló a su vientre, donde el único contacto que mantenían era por los movimientos que sentía en su piel. Ahora por fin podía mirarla, era tal y como lo había soñado –Es tan hermosa-
-Eso es lógico, querido, yo la hice-
-No hiciste todo el trabajo tú sola, preciosa-
-Lo sé, lo sé, tú también ayudaste-. Suspiró al ver sus vendas, recordando el porqué estaba ahí –Las ratas imperiales siguen con vida, ¿Eh?-
-Son difíciles de eliminar, preciosa. Tal parece que la persona que los dirige es el general Shang-
-Eso no puede ser, yo maté a ese tipo, aunque... Mierda, debí haber apuntado a la cabeza-. Tratando de controlar su enojo, Shan Yu besó su mano –Te prometo que esto no se quedara así-
-Ni siquiera pienses en ir tu sola a buscarlo, no mientras yo esté en cama-
-¿Acaso planeas acompañarme?-
-Yo inicie esto contigo, lo terminaremos juntos- dijo mientras tomaba su mano, sonriéndole, Mulan se recostó a su lado, colocando a la bebé entre los 2. Solo bastó una leve mirada hacia sus hombres para saber que deseaba estar a solas con su familia, todos se retiraron en silencio –No sabes cuanta rabia me da no haber estado contigo-
-No fue tu culpa, cielo, no habría forma de saber que nos atacarían-
-Aun así... Me hubiera gustado verla nacer-
-No creí que dar a luz fuera tan complicado, aún me siento débil por la sangre que perdí-
-Mi flor...- susurró acariciando su mejilla –No debiste esforzarte, te hubieras quedado a descansar-
-No podría hacerlo sabiendo que estabas herido, además, tú hubieras hecho lo mismo. Eres tan necio como yo... Es tan rato que Akame aun no haya pedido de comer-. Justo como si su bebé pudiera comprenderla, con sus pequeñas manitas trató de bajar su camisa
-Hablaste demasiado rápido, preciosa- dijo con una sonrisa mientras acomodaba a su pequeña, no tardó mucho en adherirse a su pecho, comenzando a degustar su primera comida. Hacía un pequeño sonido al comer, mientras tocaba su pecho
-P-Papi-. Ambos voltearon hacia la entrada de la carpa, ahí estaba Lin, de pie mientras los miraba con los ojos acuosos
-Ven aquí, pequeña- susurró con una sonrisa, a lo que su hija se acercó hacia ellos con paso lento. Ahora su mirada se posó en la pequeña bebé, quien también la miraba sin dejar de comer –Lin, ella es tu hermanita, Akame-
Con bastante curiosidad, tocó una de las mejillas de la bebé; casi al instante, ella tomo su dedo con una de sus pequeñas manos. La conexión entre las hermanas fue inmediata, la sonrisa que Lin le dirigió provocó una leve risita en Akame. Decidió unírseles, recostándose a un lado de su padre –Papi tiene sueño-
-Deberías descansar, cielo-
-No te preocupes, mi flor, yo cuidare de ustedes-
-Tranquilo, estaremos aquí cuando despiertes. Pero ahora debes descansar por tus heridas-. Bastó solo una caricia en su mejilla para convencer al enorme guerrero, cayó dormido, con la imagen grabada de su esposa y sus pequeñas recostadas a su lado
Pasaron algunos días desde el ataque, la aldea se restauró casi al instante; para sorpresa de algunos, las heridas de su líder se curaron a una velocidad sorprendente. Fue "dado de alta" y por fin pudo regresar a su casa –Tao, quiero que traigas a esos 3 soldados-
-Sí, señor-
Shan Yu decidió dejar ese momento en manos de su esposa, así que cargo a su pequeña bebé mientras tomaba asiento para disfrutar del espectáculo. 3 hombres entraron a la habitación, siendo hincados frente a la pareja con las manos amarradas. 2 de ellos agacharon la mirada gracias a la presencia del Huno -¿Qué tenemos aquí? 3 ratas imperiales-
-M-Maldita- murmuró el único que mantenía la mirada en alto, recibiendo a cambio un corte en su mejilla
-No te di permiso de hablar. Ahora... ¿Quién los envió?-. Ninguno dijo una sola palabra –Lo repetiré de nuevo... ¿Quién los envió?-
-No eres más que una perra traidora-
-Será mejor que cuides tu lengua, estoy siendo bastante amable con ustedes, imbéciles. Así que comiencen a hablar si no quieren verme de malas-
-¿Qué puede hacer la puta de este imbécil?-. Una leve risa de Shan Yu prometía respuestas interesantes, si bien no hubo palabras, la cabeza de aquel soldado fue atravesado por una de las flechas de Tao; cayendo al suelo muerto
-¿Seguirán sin hablar?- susyurro con una sonrisa burlona a los 2 soldados restantes, quienes miraban el cuerpo de su compañero aterrorizados
-F-Fue el General Shang...-
-Buen chico, ¿En dónde se encuentra?-
-E-Esta en una casa abandonada norte de aquí... El también resulto herido por la explosión-
Bajó la espada de sus rostros, lo que provocó un suspiro de alivio en ambos soldados –Tao... Mao... Córtenles la lengua, y mátenlos-
Lamento la tardanza, muchachos, ayer tuve una posada y crei que no duraria mucho, pero llegue a mi casa a eso de las 11 de la noche y ya no pude publicar el capitulo. Para compensarselo, mañana les compartire el capitulo 21. Ya saben que si quieren que los etiquete, solo deben escribir en comentarios sus opiniones o darle una estrellita, tampoco olviden compartirlo con sus amigos para que podamos seguir creciendo. Nos vemos mañana, bay!!
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The Other Side
FanfictionLa historia de una batalla o una guerra siempre tiene 2 versiones, y la que todo el mundo conoce es la de los ganadores, ¿Alguna vez has pensado lo mucho o poco que podria cambiar desde el otro punto de vista?