cap.☆10☆ Ain't No particular Way

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☆Capítulo 10: No hay ninguna manera☆

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Camila POV.

Sonreí con mis ojos cerrados cuando sentí unos besos en mi espalda, justo
encima de mi columna. Ella se movió sobre la cama, y yo abracé más la
almohada y suspiré disfrutando de los besos de Lauren.

- Buenos días, granjera somnolienta.- La escuché susurrar nada más llegar
a mi oído, dejándome la piel de galina.

- Qué buen forastera, ¿eh?- Hablé con los ojos aún cerrados y escuché su
risa seguida de un largo beso en mi mejilla.

- ¿No tienes que ir a trabajar hoy? - Me preguntó al oído y yo asentí - Entonces ¿por qué no te has levantado todavía?

-¿Por qué estás desnuda como un pollo crudo y encima de mí?- pregunté
abriendo los ojos un poco irónicamente.

- Pollo crudo, ¿eso significa que parezco un pollo crudo?- Escuché un tono de diversión en su voz y asentí.

- Si, si tu piel es tan blanca como un pollo crudo y tierno.- Hablé con
naturalidad y me mordí el labio inferior cuando la sentí, rozar su cuerpo contra el mío, acercando mucho su boca a mi oreja.

- Me muero por tener tu deliciosa boca y tu mano marcándome por todas
partes.- Susurró con esa voz ronca que me dejaba con unas ganas enormes de meterme con ella.

- No porque yo mujer, tengo que trabajar- Me deslice debajo de ella y me
levanté de la cama, sentí sus ojos traviesos justo en mi cuerpo mientras
me ponía las bragas y el sujetador que estaban en el suelo.

-¿Puedo ducharme contigo? - Preguntó con naturalidad y cuando volteé a
mirarla, la niña traviesa estaba mirándome toda pícara.

Oye chica, ¿vas a mirarme así ahora?

- Mejor no, hoy estás muy traviesa,- Después de decir eso, ella se rió y
sacudió la cabeza y continuó acostada boca abajo, dejándome con su
espalda, desnuda y suave,mi señora virgen, entonces oblígame.

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Serví una buena cachaça al cliente en su mesa haciendo mi trabajo habitual, hoy iba a haber Shania Show nuevamente y creo que el precio
sería mucho mayor.

- ¡Mila! - Miré al mostrador y vi a mi jefa allí con un portapapeles en la
mano y luego me acerqué a ella.

- Sí, puede hablar reina del país.- Le sonreí pero no recuperé su sonrisa y
tragué saliva ante su cara seria, iihh aquí viene la reprimenda.

- ¿Por qué no me dijiste que intentaron sabotear tu plantación y envenenaron a tu vaca? - Puso sus manos en sus caderas y yo negué con la cabeza, un poco avergonzada.

- Señora, no tenía por qué decirselo, es asunto mío.- Dije encogiéndome de
hombros, Shania suspiró y puso sus manos en mi hombro.

- Camila, sabes que te considero a ti y a Ana como mis hijas, y todo lo que te pasa lo quiero saber. - Eso me dio vergüenza y bajé la cabeza.- Lo que le
hicieron a tu finca fue un delito grave, Ana me conto todo y vamos a avisar a la policía.

- ¡Ah, tanto¡ ¡¿Necesitas policía y todo?! ¡Lo resolveré con la escopeta! - Le
hablé poniendo cara de enojo y ella terminó riéndose.

- Camila, terminarás arrestada si matas a alguien, así que mantén las luces
encendidas y la policía decidirá.- Dijo Shania, acariciando mi sombrero de
vaquero blanco.

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