El verano se nos pasó rápido, salíamos casi cada día todo el grupo, coche para arriba, coche para abajo.
Incluso Kate hizo una lista de cosas importantes que hacer antes de empezar la universidad, en el fondo todos estábamos aterrados, yo no tanto porque sabéis que la adrenalina de empezar en un sitio nuevo en el que todo sea más complicado me gustaba.
El verano acabó y empezamos la universidad, nos estaba yendo a todos sorprendentemente bien.
Kate alquiló un piso para estudiantes que pudo pagar con su pequeño sueldo cantando en pequeños establecimientos o eventos, le estaba yendo muy bien y todos sabíamos que tarde o temprano triunfaría.
Jake siguió trabajando en su estudió de tatuajes y viviendo en el antiguo piso de su tía, no quiso entrar en la universidad ya que decidió hacer un grado superior en diseño gráfico.
Leila comenzó unas prácticas en una escuela de cocina cerca de su casa, de mientras estudiaba gastronomía y vivía en su facultad.
Flynn y yo también pensamos en buscar piso juntos, por suerte su abuela vivió muchos años en nuestra ciudad por lo que aún teníamos la oportunidad de mudarnos al piso que compró cuando era joven.
Y el otoño volvió a aparecer un año más en nuestras vidas, los exámenes finales nos habían salido bien, pasarnos noches enteras estudiando y siendo solo la cafeína nuestra fuente principal de energía había tenido sus ventajas para luego aprobar.
Junto a Flynn habíamos reunido dinero de los trabajos que habíamos hecho durante el verano, lo que nos habían dado nuestras madres, algunos ahorros en huchas abandonadas y habíamos recaudado una buena cantidad de dinero para el nuevo piso.
Llevamos todo el curso a trabajando cerca de nuestra futura nueva casa para ahorrar mucho más.
Yo trabajaba en una cafetería mientras tanto Flynn en un pequeño museo turístico.
—Estos bloques son muy antiguos, pero los pisos están bien, son espaciosos y grandes, al menos para dos personas, claro, tu abuela nos hizo un favor cuando de joven decidió no venderlo.
Seguía mirando las fotos que me mandó el propietario del edificio sobre nuestro nuevo piso.
—Llevas toda la semana estresada por esto, seguro que conseguimos el piso, con mi increíble belleza, nos lo dan asegurado.
No pude evitar echarme a reír por su comentario.
Ojalá tuviese razón, el piso obviamente ya lo teníamos, al igual que la aprobación de la abuela Mery, nos faltaban las llaves y que el propietario del edificio diese el visto bueno.
—Seguro que si Flynn, tu belleza es deslumbrante, pero también necesitamos seguir trabajando para poder vivir, estudiar, salir con amigos, hacer la compra y yo que sé que cosas más.
Agarró mis mofletes haciendo pinza con sus dedos y los estiró.
—Que duele.
—En serio, todo saldrá bien, y si no es así tampoco es el fin del mundo, mi abuela ya ha dicho que lo más seguro es que nos lo den.
Me dejé caer en el asiento del coche y bufé por la desesperación. Sí que estaba muy nerviosa, pero es que quería encontrar piso ya de ya.
Aparte, la idea de mudarme con Flynn me gustaba demasiado.
Lo miré sin que se diera cuenta y estaba tarareando la canción que sonaba en la radio mientras con los dedos daba toquecitos al volante siguiendo el ritmo de la música.
Poco después salimos del coche y entramos al edificio para encontrarnos con el propietario que nos enseñaba la que iba a ser posiblemente nuestra futura casa.
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Inefable Libro uno (concluida)
RomanceInefable: Algo que no puede describirse con palabras. Inefable: Toda una vida con él. Lilith Harper, una chica que simplemente intenta vivir como todos los demás, embobada cada minuto en un libro y aprendiéndose de memoria los diálogos de Orgullo...