Mascotas

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Todo país tiene sus mascotas, y varias se caracterizan por ser nacionales, autóctonas, o simplemente únicas. 

Muchos creían que Uruguay no tenía mascotas, sí, tiene muchos animales autóctonos y nacionales, pero cada visita que iba a su casa nunca encontraba alguna señal de algún animalito que haya pasado por allí.

Y fue grande la sorpresa cuando se enteraron que su casa es literalmente un zoológico.

 - ¿Enserio tenes tantas mascotas?-Dijo el chileno mientras cargaba a la gata de pajonal que se refregaba en sus piernas.

- Sip, y no son todas.-El uruguayo sonrió y cargo a su pequeña perdiz que descansaba en el sillón.-¿Me acompañan al fondo? Allá tengo a los demás.-Agarró unas llaves y a su vez era perseguido por una mulita que corría con sus cortas patitas.

- Ok, a ver si son tantas.- Dijo el ruso mientras una araña pollito se trepaba por su extensa campera.

Uruguay rio por lo bajo y abrió la gran puerta que llevaba a su patio trasero con ayuda de sus llaves. Fue grande la sorpresa del chileno, del ruso, del estadounidense y del paraguayo al ver el extenso patio que a cada lado tenía varias "jaulas" enormes con diferentes especies y animales, y en cada ella, había comederos y bebederos con lo que le correspondía comer a cada especie, y varios medios de entretenimiento.

- Chile, baja a Jenny, ella sabe dónde ir.-Dijo dirigiéndose a la gata de pajonal y el chileno le hizo caso. La gata se dirigió a la primera jaula y la escalo para así meterse adentro.- Miren, la primera jaula es de mis gatos de pajonal, acá está Conaprole, Pascual y Jenny, y los gatitos chicos son Tom, Benito y Mate.-Dijo alegre mientras metía su mano a la jaula y acariciaba al pequeño Mate.

-¿Le pusiste mate?-Preguntó el gringo mientras metía la mano y Benito se le acercaba.

- Si, porque cuando llego a mi casa me tiro el paquete de yerba al piso.-Se levantó y fue a la siguiente jaula, siendo seguido por sus acompañantes, deteniéndose en una jaula techada.- Acá tengo a mis teros, que casi siempre los tengo en casa, pero por las visitas los encierro, se llaman Kiwi y Carmelo, y Kiwi puso huevos hace unos días.-Siguió caminando deteniéndose en cada jaula.- Acá están mis pumitas, Ayumi y Frida.-Pasó a la siguiente rápidamente, pero esta en vez de ser solo pasto y tierra, tenía una laguna.-Mis morrocoyos, Leo y Chita.-Vió que el chileno iba a meter la mano y rápidamente le pegó en esta.-¡No seas nabo! Muerden los nenes.

Siguieron así durante toda la tarde, pasaron por varias jaulas con ciervos, zorros, lechuzas, más gatos de todos los tipos(margays, montés, ocelotes), ñandúes, carpinteros, osos hormigueros, carpinchos, yacarés, más reptiles(ciegas, de bigotes, anaconda amarilla, serpiente de cristal, culebra verde oliva, culebra castaña de vientre rojo, etc.), incluso insectos y más arácnidos. 

Sus visitantes estaban cansados, pasaron toda la maldita tarde hablando de animales(nota mental: jamás hablar sobre mascotas con Uruguay).

- Uru... Do you have more pets to show us?- Preguntó cansado el gringo.

- Primero que nada, habla español, abombado, segundo, en mi casa no- No termino de hablar porque los cuatro presentes dieron un largo suspiro de alivio.- Pero en las casas de mis chiquilines si, ¿quieren acompañarme?

. ¡NO!- Respondieron los cuatro juntos automáticamente.

- Digo, no gracias, tengo cosas pendientes, ya sabes...- Dijo Paraguay.

- Entiendo... ¿quieren alguna de mis mascotitas? Ya saben, Otto se pego mucho a Rusia, Jenny a Chile, Chela a Paraguay y King a Estados Unidos...- Señaló a la araña pollito, a la gata de pajonal, a la rana de darwin y por último al carancho mientras los iba nombrando.

- Si no es mucha molestia...- Dijo el ruso mientras agarraba a la araña que posaba en sus hombros.

- ¡Si, si! Obvio que me voy a querer llevar a la Jenny.- Le siguió el chileno mientras alzaba a la gata.

- Chela es muy chiquito, con gusto me lo llevo.- Habló Paraguay y agarró con delicadeza a la rana.

- King es muy bello, me recuerda a mi águila, of course I'll take it!- Estados Unidos alzo su mano y el carancho se posó en ella.

- Dale, deja apronto sus cosas.

Ahora sus amigos tenían algo que lo recordara a él, que lindo, ¿no?


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