Escucharte, es lo único que deseo en este
momento.
★ Créditos al autor de la portada
★Los personajes pertenecen a Kōhei Horikoshi
★One-short
★Kirishima x Bakugō
—Tú bastardo ¿Se puede saber dónde demonios estás?
—Eh... Algo ocupado, pero quería escucharte...
—Ya...— gruño por lo cursi que podía llegar a ser su chico —Más te vale no llegar tarde, no me moleste en hacer esos tontos Nuggets en forma de dinosaurio para comerlos fríos.
—Jaja, si... Sobre eso ¿Porque no empiezas sin mi? Llegaré un poco tarde así que...
Un quejido se escuchó a través de la línea.
Su corazón se removió dentro de él.
Algo no iba bien.
—¿Ei?— su rostro detonaba preocupación —Eijirō que pa...
—Blasty... Deseaba decirte que te amo... Te amo mucho...
Ronco, así sonaba el pelirrojo. Cada palabra que pronunciaba parecía salir forzada, como si no tuviera energía para mover sus labios.
—¿Shima? Pelo de mierda ¿que demonios te está pasando?
—Tú me amas... ¿No es así Katsuki? Por favor, dime si me has amado todo este tiempo juntos.
—Carajo, claro que sí maldición, no iba a perder mi tiempo con alguien a quien no amó ¿Porque pregun...
—Dimelo directamente, porfavor, quiero tener un último recuerdo de tu voz diciéndome cuánto me amaste...
Suspiro resignado, parecía ser la única forma en la que el idiota respondería a sus preguntas.
—Si maldición, te amo, de verdad que a veces no te...— Sus ojos se abrieron, había terminado de analizar las palabras del héroe —Shima tú... Eijirō... Eijirō que diablos pasa.
—¿Me amas tanto como yo a tí?
—¡Si carajo! Te amo, te amo tanto como para quererte a mi lado toda la puta vida, querer que seas tu quien me diga que soy el número uno, te amo tanto que a veces me asusta el cuánto puedo quererte.
Desesperación, eso reflejaba su voz.
—¿Seguro que eres feliz? Midoriya sigue un puesto sobre tí en... en el ranking.
— ¡Soy feliz! El estúpido de Deku me da igual, no estare en el puesto número uno del estúpido ranking de héroes pero no sabes cuánta mierda me importa— una risa afligida salió de sus labios —Por que tú me repites todos los malditos días al despertar que el número uno en tu mundo siempre e sido yo ¡Eijirō soy feliz porque la persona que más amo me considera el número uno!
El silencio que siguió sus desesperadas palabras se sintió eterno. El amargo sabor de las lágrimas llegó a su labios ¿Cuando les había dado permiso para salir? ¿Porque corrían como cascadas por sus mejillas? ¿Porque sus manos se aferraban tanto a ese maldito teléfono que parecía apunto de romperlo? El tenía las respuestas, pero se negaba a verlas.
Una débil carcajada llegó a sus oídos desde el otro lado del teléfono, amaba esa risa pero justo ahora le traía más desesperación a su aterrado corazón.
—Me alegro... Soy feliz de oír eso... Kats...
—¿S-si?
—Te amo... siempre lo he hecho y siempre... siempre lo haré...
Un pitido se escuchó contra su oreja. Quería golpear a Kirishima ¿Quien le dió permiso de colgar la estúpida llamada? Pero sus deseos de explotarle la cara al otro se desvanecieron más rápido que el rocio de las hojas, empezó a marcar de nuevo ese maldito número, derramando más lágrimas de las que había soltado en su jodida vida, con más desesperación que cuando un villano escapaba de sus explosiones y con un miedo terrible que apretujaba su corazón sin piedad.
La débil vibración de su teléfono le recordó lo persistente que era el rubio cenizo, no dejaría de marcar, no hasta que el respondiera y le mostrará que estaba bien.
Pero no podía.
Por más que deseara levantar su móvil y decirle a su prometido «¡Hey Blasty, estoy bien, ya voy a casa!» su cuerpo no respondía, sus piernas tambaleantes se negaban a ceder bajo el peso de su cuerpo y su temblorosas manos no se movieron ni un sentimiento.
No podía quejarse, los nueve villanos yacían a su pies en un estado aún más deplorable que el de suyo.
Pero ninguno moriría.
Red Riot se había encargado de eso.
Luego de meses persiguendolos por fin habían caído, esos idiotas dejarían en paz a la ciudad en lo que les resta de vida.
Al menos podía adjudicarse el mérito de que gracias a él Dynamight ya no tendría que arrancarse el pelo buscando pistas de esos desgraciados.
Sonrío satisfecho de su trabajo, su amado heroe podría disfrutar de unas merecidas y largas noches de descanso y sueño profundo.
O eso esperaba.
Está vez no podría acompañarlo como siempre.
Y por fin, su cuerpo se desplomó soltando un último suspiro al recordar aquellos momentos llenos de amor y cariño que vivió junto al Bakugō Katsuki.
Al recordar cuánto lo amo.
Al recordar cuánto había sido amado.
Nunca dudo de ello, pero necesitaba una excusa para llamar a su querido chico de orbes rubí y así morir con el recuerdo de su voz.
El recuerdo de escucharle una última vez.
∞•∞•∞•∞
826 palabras
★Publicado: 18/12/2023 ★Es mi primer intento de KiriBaku así que espero que lo hayan disfrutado.
★Amo el KiriBaku y de alguna forma siento que no le metí el sentimiento que deseaba pero ya está, salió de la nada al ver un vídeo de tik tok así que ni tan mal para ser escrito así de la nada.
Inspiración: créditos a su autor (ni idea de quién sea)
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.