One Shots : Marvel

"YOU DIDN'T SEE THAT COMING?"

-Oye tú, plata rápida -dijo el multimillonario- deja de mirarla así 

Pietro se giró hacia Tony Stark, el cuál estaba en ese momento sacando algo de comida de la nevera. El peli-blanco tardó varios segundos de más en apartar los ojos de la nueva incorporación al equipo, para fijarlos en el hombre de hojalata. A su lado el super-soldado, esbozaba una sonrisa divertida.

-¿Qué te hace tanta gracia, rata de laboratorio? -soltó este mirándole fijamente-

El capitán ni se inmutó ante su amenaza, en su lugar apoyó los codos sobre la mesa donde estaban sentados, clavando su azulada mirada en él. 

-¿Porqué no vas a hablar con ella? -preguntó chocando el hombro con el suyo- 

-Ni de coña, no pienso hacer eso -respondió el ruso rápidamente-

-No te ofendas capitán, pero tus métodos de seducción se han quedado un poco... estancados -dijo Stark dándole un mordisco a un trozo de queso que había partido cuidadosamente- 

-Muy gracioso Tony -respondió este señalándolo- aun así creo que deberías hablar con ella

-No creo que sea necesario -murmuró Pietro tratando de dejar de ser el centro de la conversación-

-Seamos sinceros ¿Quieres? -habló Stark- no has parado de hacerle ojitos desde el día que llegó, así que, a menos que quieras que alguien te la robe, y no miro a nadie -dijo ladeando la cabeza hacia Steve, el cuál frunció el ceño negando con la cabeza- será mejor que vayas a hablar con ella

-Aunque me duela admitirlo -empezó el capitán- Tony tiene razón, deberías hacerlo 

Este lo pensó un momento a la vez que desviaba la mirada entre la chica y sus amigos. 

-Está bien -dijo señalándolos a ambos- pero no quiero que estéis aquí cuando suceda, así que...

En lo que dura un parpadeo, Steve se vio transportado al gimnasio y Tony a su despacho. Ambos sonrieron al darse cuenta de lo obvio. Pietro sabía que no se iban a perder el espectáculo, así que había decidido tomar cartas en el asunto y hacer que se fueran él mismo. Chico listo.

Con sus amigos fuera de su vista, estaba casi seguro de que podría lograr su misión. Sophie se encontraba entrenando con Visión en una sala adjunta a la cocina. Sus movimientos habían mejorado bastante en comparación a su primer entrenamiento. Pietro no se había perdido ninguno de ellos. Aunque ella no le viera, el siempre la observaba en silencio y se alegraba de sus progresos. 

Visión le vio acercarse, por lo que detuvo sus movimientos para ver que quería, pero la joven pensando que continuaban con el entrenamiento, le dio un poderoso golpe que lo mandó contra la cristalera del laboratorio. Se llevó las manos a la boca, temerosa de haberle hecho daño.

-¡Madre mía! ¿Visión, estás bien?

Este se levantó volando a la vez que se sacudía varios cristales de la capa, y asintió.

-Perfectamente -dijo mirando a Pietro- creo que es hora de dejarlo por hoy, pero te espero aquí mañana a la misma hora

-De acuerdo, hasta luego -se despidió de él mientras se alejaba-

Fue entonces cuando ambos estuvieron solos y se formó un silencio bastante incómodo.

-Hola -saludó ella esbozando un sonrisa tímida-

-Hola -respondió él de igual manera- has mejorado mucho con los entrenamientos -dijo- quiero decir, yo... te he estado observando -hizo una pausa- no en plan turbio ni nada, es decir que me alegro de que estés mejorando

-Gracias Pietro, la verdad es que si que noto la mejoría -dijo- te agradezco el apoyo 

-No es nada -respondió este rascándose la nuca- oye ¿Por casualidad no te apetecerá ir al cine, conmigo?

La pregunta pilló a la joven de sorpresa, Pietro puedo verlo en su rostro.

-No hace falta que me lo digas ahora, es solo que... -se frotó los ojos con la mano- yo, bueno, creí que...

-Si -soltó de repente haciéndole alzar la cabeza para mirarla de nuevo-

-¿Si? -preguntó para cerciorarse de que había oído bien-

-Claro que sí, iré al cine contigo tonto -soltó esta entre risas- ¿O acaso no lo viste venir? -cuestionó haciendo alusión a la frase que él utilizaba siempre que iban de misión-

-Debe ser la única vez que no lo he hecho -respondió sonriéndole- pues vale... entonces, salimos en veinte minutos ¿Te parece bien? -tanteó y ella asintió, le parecía muy tierno que le hiciese ese tipo de preguntas-

-Perfecto -respondió- nos vemos luego 

-Si, adiós -carraspeó este tratando de no sonar demasiado obvio-

Se despidieron con un gesto de la mano y ambos se fueron a sus respectivas habitaciones para vestirse adecuadamente. Steve y Tony habían escuchado todo por las cámaras de seguridad que había colocado este último por todo el complejo, debido a lo ocurrido con Ultrón, y no podían esperar a que el pequeño de los Maximoff regresara para decirle lo orgullosos que estaban de él.