Maegor Targaryen

Capitulo 4

En la noche

—Esta carta será lanzada al mar —Maegor se encuentra escribiendo una carta para Lady Laena— Baela y Rhaena, me contaron tanto de ella, me hubiera gustado tanto haberla conocido. Lástima que nunca pude hacerlo —en eso Maegor se levanta y camina hasta la ventana— Es una linda noche.

Maegor veía el cielo nocturno hasta que ve a Vhagar volando. Él no sabía lo que había pasado, pero algo le decía que tenía que ir en aquella dirección. Maegor no había sido el único que lo había visto, ya que Baela y Rhaena también vieron a Vhagar. Ellas en seguida van a la habitación de Jacaerys y Lucerys. Maegor caminaba por los pasillos rumbo al lugar donde estaba Aemond. Cuando llega, se topa con sus sobrinos y primas. Rhaena en seguida es la primera en reclamarle a Aemond por haber tomado a Vhagar, ya que era ella quien tenía que reclamar a Vhagar. Maegor solo veía y escuchaba la pelea. En eso, Aemond termina empujando a Rhaena, causando que Baela le diera un golpe en la cara. Aemond se termina molestando y empieza a pelear contra los cuatro niños. Maegor solo estaba en una esquina viendo cómo se peleaban. Él no se iba a meter, ya que eran cuatro contra uno. Maegor era de enfrentarse uno a uno, pero en eso ve cómo estaban Jacaerys y Lucerys, así que decide separar a los cuatro de Aemond.

—Ya fue suficiente —habla mientras se pone entre el medio de Aemond y los demás— Ya aprendió su lección.

—El me robó a Vhagar —Rhaena en seguida habla— Era el dragón de nuestra madre, yo debía tenerla.

—Un dragón no se hereda, se reclama —Aemond estaba con el labio roto— Yo solo hice lo que tenía que hacer.

—Eres un… —Baela estaba a punto de lanzarse contra Aemond otra vez— No me detengas, Maegor.

—Ya no podemos hacer nada —Maegor sabía que Vhagar le pertenecía a Aemond— Lamento que no puedas tener a tu dragón, Rhaena, pero Vhagar ya fue reclamada.

—Así es, ya tiene un jinete —Aemond mostraba una sonrisa burlona.

—Ya vámonos de aquí —habla mientras tenía a Rhaena del brazo— Vamos.

Maegor quería detenerlos. A pesar de que no quería para nada a su hermano Aemond, él respetaba que Aemond haya reclamado a Vhagar. Solo quería que dejara de lastimar a sus sobrinos, pero en eso Baela vuelve a atacar a Aemond, causando que Jacaerys también se metiera otra vez. Aemond, ya cansado, empuja a Baela contra la pared y termina agarrando a Jacaerys del cuello y toma una roca.

—Qué es lo que pasa, Lord Strong? —Aemond veía a Jacaerys con burla— Ahora seré yo quien les muestre el verdadero peligro.

—Déjalo, Aemond —Rhaena estaba ayudando a su hermana.

—Ya fue suficiente, Aemond —Maegor estaba mostrando una expresión enojada— Baja esa roca o algo malo te sucederá.

—Vamos, Maegor, sabes que estos dos son unos bastardos —Aemond había dicho eso con un tono de burla— Ellos merecen morir por lo que son.

—(Quítale el corazón, en señalé que no debe decir eso) —Maegor había empezado a escuchar una voz en su cabeza— (Deja que yo tome el control de esto). Sí —susurra mientras saca su daga— Aemond Targaryen, te llegó tu hora.

Aemond no había visto que Maegor había sacado su daga. Lucerys estaba asustado y en eso ve cómo Maegor va directo hacia Aemond. Todo había sucedido en cámara lenta. Maegor había atacado a Aemond con su daga, causando una gran herida en su ojo. Todos escuchan los gritos de Aemond mientras está en el suelo con sus dos manos en su gran herida. Un caballero termina apareciendo y ve lo que había pasado. En seguida, toma a Aemond y se lo lleva, mientras otro caballero aparece y en seguida se lleva a los demás niños. Maegor no soltaba la daga, se mantenía quieto en su lugar. El caballero ve esto y se acerca con cuidado a Maegor.

—Príncipe, deme la daga —el caballero veía cómo Maegor sostenía la daga con fuerza— Maegor.

—Simón —Maegor reconoce la voz del caballero— Creo que estoy en problemas.

—Eso se verá más adelante —Simón logra tomar la daga— Venga conmigo, príncipe.

Simón guarda la daga y toma a Maegor del hombro. En una sala se encuentran las personas de Marcaderiva y la familia del rey Viserys. Un maestre había terminado de curar la herida de Aemond, donde no tuvo de otra que quitarle el ojo, ya que no se podía recuperar. Maegor estaba a lado de sus sobrinos mientras abraza a Lucerys y tenía la mano de Jacaerys. En eso, la puerta principal se abre y entran Lord Corlys y su esposa. Los dos en seguida van con sus nietas. Unos segundos más tarde llegan Rhaenyra y Daemon, donde Rhaenyra en seguida se acerca a sus hijos y hermano.