—Imagen de referencia de Katsuki con sus marcas de su semi- transformación animal
Se supone que ahora mismo estaba en la comodidad de su inconsciencia. Cuando uno sueña, está a salvo en la imaginación de su subconsciente. O eso es lo que creía Izuku, porque francamente estaba aterrado.
Su cuerpo empezó a recuperar poco a poco el control de si mismo, poco a poco iba despertando. Sentía que estaba acostado sobre un piso rocoso en un aparente estado de desnudez. Pero aún con los ojos cerrados, y aún estando en el borde de la inconsciencia, Izuku tenía miedo.
Podía sentir como al lado de él había un peligro que crecía con cada segundo que pasaba, no quería despertar. No quería tener que enfrentar a esa bestia pero podía sentir claramente su mirada fija sobre él. No recordaba exactamente que había pasado, no sabía muy bien donde estaba.
De pronto los recuerdos de hace unas horas llegaron a su cabeza. Estaba frente a ese tigre, y todo en su ser le suplicaba huir.
Izuku mantuvo los ojos cerrados intentando fingir que seguía dormido. Quizás si esperaba un poco, podría ser que el alfa se aburriera y lo dejara solo un poco de tiempo. El suficiente tiempo para huir.
—Se qué ya despertaste, mocoso.
Pero parecía que su plan había fracasado antes de empezar.
Sin tener otra opción, abrió los ojos poco a poco con cautela. Lo primero que su mirada logró captar fueron los brillantes ojos carmesí que lo veían desde las sombras de ese lugar. La simple presencia de ese sujeto era imponente, ni una fibra muscular de su cuerpo era capaz de hacer un movimiento frente a tal depredador.
Sus iris verdosas recorrían el lugar de manera lenta intentando analizar dónde estaba, pero sin perder de vista al hombre frente a él. Estaba en un lugar oscuro, no sabía muy bien que sitio se encontraba aparte de la enorme cueva, la cual estaba llena de una pila de huesos de personas y animales, y encima de esa pila se encontraba Katsuki con su imponente mirada carmesí estudiando cada movimiento de Izuku.
La oscuridad reinaba en ese lugar, de no ser por su visión nocturna no sería capaz de ver nada.
—¿Dónde estoy? —apenas terminó de formular la pregunta, Izuku soltó una bocanada de aire, que llevaba todo el tiempo aguantando la respiración por el temor.
—No te sirve de nada saberlo — Katsuki sonrió lamiendo la punto de sus enormes colmillos—. Después de todo, este será el lugar dónde morirás.
Izuku intentó no mostrar miedo escuchando su respuesta, pero parecía que Katsuki hablaba muy enserio. El Omega sabía que el Alfa era perfectamente capaz de cercenar su garganta con un movimiento de su brazo. Pero había algo que lo aterraba más que la muerte, el ser abusado por Katsuki.
Sabía que su muerte no sería lenta. No tenía sentido que el alfa lo hubiera arrastrado hasta ahí solo para matarlo en un movimiento. Probablemente lo torturaría de todo tipo de maneras antes de terminar con su existencia.
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𝐀𝐑𝐑𝐈𝐄𝐒𝐆𝐀𝐃𝐀 𝐀𝐓𝐑𝐀𝐂𝐂𝐈Ó𝐍 [BKDK]
Fanfiction¡UA OMEGAVERSE! Katsuki, el poder mismo en su máxima expresión. Tan místico, tan fuerte, tan cruel, y tan déspota. Todo a su alrededor era consumido por esa maldad inconmensurable que contenía dentro de si. No necesitaba a nadie más que a sí mismo...