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Lucy apretó en sus brazos a Danrah casi ahorcándola, estaba muy feliz de volverla a ver.

—¿Cómo has estado? —preguntó soltándola.

—Estoy bien, no te preocupes por mí, ahora te toca tu boda así que deberías pensar solo en tí y en tu Alfa, Jungkook me cuida muy bien, así que puedes estar tranquila.

—Me alegra saber que te están cuidando —lo dijo mirando a Jungkook y este respondió con una sonrisa.

—Vamos a sentarnos —Tae los invitó a sentarse.

—¿Dónde está su Omega, Alfa Kim? —preguntó Sooyoung.

—Lamento que hoy no pueda verla, ya será mañana, la marqué ayer y aún se siente indispuesta —la Alfa asintió.

—Oh ya entiendo, no es igual para todas las Omegas, algunas pueden tener reacciones, así que no se preocupe mucho, esperemos que ella mañana pueda acompañarnos.

—¿Y si te aceptó? —Jimin fue directo a preguntar.

—Eso espero, Jimin, eso espero, pero por los momentos comamos que ya todo está servido, no dejemos que se enfríe.

Entre conversaciones e historias, transcurrió la noche y al terminar el banquete los sirvientes los llevaron a sus habitaciones, ya dentro Jungkook entró a darse un baño primero, tenía el olor de Irene debido al abrazo y no quería que Danrah lo sintiera de nuevo, al salir del baño no la encontró alarmandose un poco, la Omega al sentir el desespero de su esposo asoma su cabeza desde el balcón.

—Aquí estoy, ¿Por qué te alarmas? —él corrió hasta donde estaba ella para abrazarla.

—Pensé que te habías ido molesta —ella soltó una pequeña risa.

—Claro que si me molestó en ese momento, pero no tengo porque molestarme contigo, tu no te acercaste a ella —Jungkook la miró con asombro.

—¿Qué le hiciste a mi esposa? —comenzó a hacerle cosquillas.

—No, Jungkook —ella intentaba alejarse y él la buscaba hasta que tropezaron y el cayó trayendose a Danrah y ella quedando encima de él.

—Debo ser el primer Alfa cuya Omega lo somete, me tienes en el suelo, me vieran mis siervos y se burlarían de mí —ella le gruñó levemente excitandolo inmediatamente.

—Ah, pero... Al parecer te gusta cuando me comporto de esta manera, ¿O no?

—Ya me estás conociendo muy bien —ella le dió un corto beso en los labios.

—Y quiero que sepas que puedes usar el lazo cada vez que tengas dudas o miedo, no saltes a pensar que algo me ha pasado, como Alfa no debes perder la paciencia ni la compostura —asintió.

—Tienes razón, es que contigo siento que no controlo mis emociones, si es un problema de la manada puedo analizarlo con lógica.

—Por cierto, no le contastes a los demás sobre tus poderes, ni a mí me has dicho.

—No te puedo contar, eso te lo tiene que decir tu ancestro, mañana hablaré solo con ellos, prométeme que no irás.

Jungkook asintió.

—Vale, pero sales rápido porque no te quiero cerca de otros Alfas —hizo un puchero.

—Sus Omegas estarán allí también, ¿Acaso no confías en mí?

—Pero recuerda que no querías nada que ver conmigo al comienzo de nuestra relación, eso me genera cierto miedo, no quiero estar sin tí —Danrah sonrió.

—¿Qué es lo que acabo de decirte? —suspiró— Puedes sentirme, la marca te lo dirá todo, así que dejas esos miedo y actúa como el Alfa que se ganó mi confianza y mi cariño.

—Esta bien, puedo sentir que no me odias pero aún no me amas, pero haré lo posible para que llegues a amarme.

—Ahora vamos a dormir —ella se metió primero en la cama para luego meterse él, se acurrucó a su pecho y así durmieron.

Jungkook aún seguía dormido al momento de Danrah levantarse, así que después de arreglarse bajó hasta el comedor, allí ya estaban todos.

—Danrah, bienvenida a mi mesa —saludó a Taehyung y a su lado estaba Irene.

—¿Cómo está? —preguntó ella mirando a Irene mientras esta miraba la mesa.

—Bien, aún le cuesta estar a mi lado, pero espero que acepte su marca y su mate, tal como lo hiciste tú —entonces Irene levanta el rostro y ve a Danrah.

—No sé porque me pareces familiar, todo en mi cabeza es confuso, el Alfa Kim intentó explicarme pero es difícil.

—¿Qué quieres sabes? —Danrah tomó asiento.

—¿Tú Alfa vino contigo?

—Si, aún permanece en la habitación, no me atrevo a despertarlo —una sonrisa suave se formó en sus labios.

—¿Te fue fácil aceptar tu mate? Para la Omega Lucy lo fue, por eso quiero saber otra opinión.

—No lo fue, de hecho, odié que le hayan colocado un mate, quería ser libre y correr por el bosque sin tener un rumbo, estaba cansada de estar encerrada pero cuando él apareció me hizo cambiar de opinión, poco a poco se fue ganando mi cariño, ahora me gusta estar con él, aún no llego amarlo y eso él lo sabe, pero no me presiona a amarla de una vez.

—Suena como un buen Alfa.

—Kim Taehyung también puede serlo, pero no lo sabrás sino le das la oportunidad.

Irene miró a Tae y este simplemente le sonrió, Irene pudo sentir un calor en su pecho, de la nada unas manos tocaron los hombros de Danrah.

—Me alegra ver qué hablas bien de mí, amor —Jungkook le dió un beso en la mejilla.

Irene no dejaba de mirar a Jungkook.

—¿Él es tu esposo, tu Alfa? —sus mejillas estaban enrojecidas.

—Si, él es mi esposo —ella lo agarró del brazo y lo atrajo para un beso.

—Un placer, soy el Alfa de los Lobos de la Luna, Jeon Jungkook —colocó su mano en su pecho e inclinó un poco la cabeza.

—Hay algo que me gustaría hablar con ustedes, Jungkook no puede estar, aún no ha llegado su momento.

—Bien, luego de desayunar iremos a mi oficina.

—Bien, luego de desayunar iremos a mi oficina

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Wolf Pack +21Donde viven las historias. Descúbrelo ahora