Chapter 4

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¿Otra vez tú?

Chiara's Pov

No tiene sentido. Simplemente me niego a aceptarlo. Cómo es posible que habiendo tantas casas en Barcelona, se venga a mudar aquí.

Indi no entendía absolutamente nada, y es que siendo ella, yo tampoco entendería. Mi cara era un putisimp cuadro, lo sé y la cara de Martin y Rus, me lo confirman.

Martin- Joder, suban al auto y vamos.- Ordenó rápidamente, para sacarme de mis pensamientos, y además, para salvarme de esa situación.

No podía entender como le dió la cara para mirarme, no entiendo absolutamente nada. Lo único que sé, es que sigue igual o aún más hermosa de lo que tenía en mente. Esos ojos color café seguían igual de chocolatosos que siempre, aunque estuviese más mayor, eso que me encantaba seguía ahí. ¡¡¡DIOS, NO!!!! No puedo estar pensando esto, debo parar.

Indi- Oye chia, que fue aquello?.- Preguntó curiosa. Y es que como no iba a preguntar, si luego de cruzar la mirada con ella quedé de hielo.

-Emm, luego te cuento, va?.- Intenté alejar el tema lo más rápido posible, y para mi suerte, Indi asintió, dando por finalizado el tema.

Llegamos a la uni, pero en mi cabeza seguía aquella imagen. Ella tan radiante y hermosa como siempre, y yo. Aún no puedo creer que hayamos cruzado miradas, no tiene ningún puto sentido.

Sinceramente tenía claro que habían altas posibilidades de volverla a ver, pero ¿justo ahí tenia que ser?. No pude prestar atención a nada de lo que me dijeron en el camino, porque sin querer queriendo, no podía quitármela de la cabeza. Lo peor de todo, es que en vez de pensamientos negativos, se me vienen millones de pensamientos positivos y halagos. Es como una droga, que sabes que te hace mal, pero elijes consumirla porque para ti es maravillosa. Pues exactamente eso define a Violeta para mí.

Rus- ¡TIERRA LLAMANDO A CHIARA!.- Gritó, para luego darme un golpe en la espalda.

-Perdón, es que...

Martin- Si, no te preocupes. Lo único que quiero que sepas, es que Indi tiene preguntas al respecto.- Asentí, sabiendo que deberia sincerarme lo antes posible.-así que espero que puedas responderlas rápido, aprovecha a pensar ahora que se fué.- Y si, efectivamente se había ido y yo ni cuenta me había dado.

Rus- Vamos, ven conmigo que compartiremos salón.- Tomó mi mano y me guió por el enorme pasillo, al cual tampoco había admirado, por haberme quedado pensando en violeta. Estúpida Violeta. Por qué tiene que tener esos ojos. Y si, efectivamente había vuelto a pensar en ella.- Anda tía, apura el paso que llegaremos tarde.

Y así, corriendo en medio de los pasillo, llegamos. Se trataba de un salón no muy grande, con asientos en fila, formando un círculo, y en el centro resaltaba un gran piano.
Afortunadamente llegamos bien, y no había tanta gente dentro, así que eso nos dio opción a elegir en que sitio sentarnos. Obviamente me senté junto a Rus, pero yo elegí las ubicaciones, frente al piano, con vista al profesor.

No pasaron ni dos minutos, que se llenó a tope. Habian tantas caras nuevas, que me impresionó, mi nube de caras, solo tenía grabadas las de mi familia, la de mis amigos, las de mis profes de la académica y la de... si, ella.

De pequeña me detectaron tdah, y la verdad que no ha sido fácil convivir con ello, pero con el tiempo, logré adaptarme y pude sobrellevarlo. Por esto es que mayormente me cuesta relacionarme con el resto, y es que no entienden que no lo puedo controlar. Puede parecer que no os oigo porque estoy haciendo algo más, pero la verdad es que si que lo hago.

Our Secret Moments In a Crowded RoomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora