Nieve antes de navidad

El regalo perfecto

Quackity tenía un gran problema por delante, se acercaba la víspera navideña y no tenía ni la más mínima idea de que regalarle a Luzu, podrían decir que no es tan difícil, una taza, un suéter, incluso un beso pondría feliz a su querido castaño; Quackity lo sabía pero el no quería darle cualquier cosa, no está navidad, el quería el regalo perfecto ese regalo que uno siempre deseo pero nadie se lo ha dado, ya saben ese juguete o deseo de niño que por alguna razón tus padres nunca te cumplieron en navidad.

-Estoy perdido- Murmuró frustrado mientras cubría su rostro con los brazos, Willy y Vegetta que habían sido llamados por petición de él lo miraban con cierta diversión.

-Tal vez estás exagerando un poco- Comento Willy dándole un sorbo a su café. -Luzu estará feliz con lo que sea que le des mientras no sea un slime pegajoso- se estremeció al recordar el accidente del año pasado.

Quackity casi, casi , se ríe ante ese recuerdo, pero la preocupación por su falta de ideas para el regalo no se lo permitió.

-Vegetta, Willy, ustedes saben porque quiero hacer de esta navidad la mejor- La expresión de angustia en su rostro hizo que los dos mayores suspiraran.

-Lo sabemos- Respondió Vegetta. -Por eso vinimos a ayudarte-

-Pues... No están siendo de mucha ayuda-

Si, Willy le jalo su gorro para taparle los ojos después de esas palabras.

Vegetta que prefería pensar en un buen regalo en lugar de pelear como niños siguió tomando de su cabeza mientras trataba de recordar cualquier cosa que Luzu haya mencionado antes ¿Algo que no le hubieran dado en la infancia?

-¡Lo tengo!- Ante ese grito Quackity y Willy bajaron sus cafés lentamente, no, ellos porsupuesto que no estaban a punto de lanzarselos entre sí.

Vegetta que los miro con una sonrisa orgullosa porque tenía la respuesta del regalo perfecto cambio rápidamente a una mirada acusadora. -¿Ustedes estaban a punto de hacer una escena en la cafetería?- pregunto, aunque era más una afirmación que pregunta.

Quackity le dedicó su mejor sonrisa de "CLARO QUE NO" y Willy simplemente agachó la cabeza.

Vegetta suspiro. -Olviden sus peleas infantiles- Trato de restarle importancia no permitiría que lo sacarán de quicio tan fácilmente.

Los dos se acomodaron en sus lugar y tomaron un sorbo de sus cafés disimulando su casi acto de telenovela hace un momento, Vegetta hizo un esfuerzo por no reprenderlos.

-Bueno dijistes que "lo tenías"- Comento Willy un experto en distrae a Vegetta de sus enojos. -¿Exactamente que pensaste?-

Quackity miro al mayor con ojos curiosos, había estado tan concentrado en lanzarle su latte en la café a Willy que se olvidó de lo que dijo Vegetta.

-De pequeños Luzu siempre quizo jugar en la nieve-

-Oh cierto- Exclamó Willy como si un recuerdo viniera a su mente. -Luzu de pequeño siempre nos dijo que anhelaba poder salir mientras nevaba y hacer un muñeco de nieve-

-¿Nunca lo a hecho?- Pregunto algo confundido Quackity, como si le costará creerlo, bueno no era como si en esa ciudad la nieve fuera frecuente pero si habían vivido mínimo un par de nevadas.

Willy y Vegetta le dedicaron una mirada de "Piensa un poco, bobo".

-Seras tontito Quackity, en su estado ¿Crees que sus padres lo habrían dejado salir en una nevada?-

-Ah... Tienes un punto-

Vegetta decidió concentrarse en su café cuando Quackity se levantó y dejo un dólar en la mesa. -Entonces gracias- Dijo rápidamente antes de salir corriendo de la cafetería probablemente yendo a preparar ese regalo, después de todo hoy era noche buena.

Willy miro a Quackity alejarse. -¿Crees que el tenga alguna idea de como darle ese regalo a luzu?-

Vegetta lo volteo a ver. -Seguramente ni siquiera a pensado como hacerlo- Respondió sin dudar. -Pero... Es Quackity y ama a Luzu, encontrará una manera- Sonrió ligeramente.

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¡Feliz Navidad a todos!
🎄

Está historia será muy corta y la estaré publicando a lo largo de este día, espero que les guste, es como un regalo de navidad.