Las palabras que siempre te quise decir | Alvaul / Polvorones

Carta I

Alguna vez he soñado que te tenía en mis brazos y no te soltaba, que te quedabas conmigo y que podíamos hablar cada noche de cualquier cosa.

Alguna vez me he imaginado que eras capaz de ver a través de mí y que sabías hasta la parte más profunda de mi alma.

Tu voz clavándose en mi mente cada vez más sin ser capaz de quitármela de la cabeza, deseando que entre tanta oscuridad pueda mantener el único rayo de sol que me despierta.

Nunca supe cuando mi corazón dejó de ahogarse y de repente se dió cuenta de que estaba en la superficie.

Nunca supe cuando tus ojos se clavaron en los míos por primera vez e hicieron que toda mi piel se erizase.

Siento miedo de quererte y querer que me quieras porque no sé hasta dónde puedo llegar. Mi corazón no aguantaría romperse otra vez más, pero siento que contigo puedo contemplar una esperanza hacia algo bueno que antes no tenía.

Permíteme entrar en tu vida y te aseguro que no te defraudaré, sé que tú corazón fue dañado muchas veces pero yo no traigo ningún puñal para clavar, solo mi alma.

Cuanto más pasa el tiempo, más me doy cuenta de que estás aquí, pero el tiempo se acaba y no sé si tú tienes fecha de caducidad. Ojalá que no.

Déjame agarrar tu mano cuando la noche esté demasiado oscura y lo único que queden sean estrellas en el cielo.

Déjame poder sentir el tacto de tu piel solo una vez más y hacer que de repente el invierno no sea tan frio.

No quiero que confundas mis intenciones, yo siempre te he admirado y pensé que lo único que sentía por ti era algo platónico, pero lo cierto es que cada vez es más real y estoy muy asustado por ello.

Pase lo que pase, quiero decirte que me alegro mucho de haberte conocido y que eres una persona increíble. Tu alma es única y la energía que despredes es admirable.

Estas palabras dudo que te lleguen a ti personalmente, pero si de alguna manera estas palabras consigues saberlas, necesito que sepas que me importas mucho más de lo que me gustaría y que ojalá algún día puedas escuchar mi corazón.

Sé que escribo cuando no miras y que por tanto es súper improbable que algún día conozcas mis sentimientos por ti. Pero gracias por todo, de verdad.

Ojalá no seas una persona efímera y quieras quedarte a mi lado.

Pero no me enfadaré tampoco si decides decirme adiós.

Aunque yo me quedaré esperando en la puerta por si decides volver.