la heroína perdida una historia isekai.

cap 11: despedidas.

Llegue a la posada donde el posadero me recibió con los brazo abiertos.

" Gracias a ti he recuperado a mi esposa y a mí hija, todo lo que pidas invita la casa." Dijo el posadero.

" Un médico me dio directrices exactas de que debo comer para recuperarme incluso me dijo que tomará una poción de curación al día." Dije yo.

" Eso significa que es profundo y grave. Y aún así recibiste las piedras que te lanzamos sin apartarte o pararlas con tu escudo y nos ayudaste. Eres admirable." Dijo el posadero.

" No deberías estar con tu esposa e hija." Dije yo mirando al posadero.

" Están con el resto de las mujeres bañándose. No las puedo culpar todo lo que han debido de pasar las pobres." Dijo el posadero con la voz quebrada.

" Ya ha terminado la parte donde puedo ayudar, ahora todo queda en vuestras manos, ellas necesitarán recuperarse de todo lo que han vivido. Llevará tiempo y esfuerzo." Dije mirando al posadero.

" Gracias por todo, que recomendaciones alimenticias te dio el médico.." Dijo el posadero.

" Carne, huevos y lácteos. Si es por mi agradeceré toda comida aunque no pueda notar su verdadero sabor." Dije mirando hacia abajo.

" Te ves cansada te haré una tortilla de champiñones y te pondré un plato de queso y una sidra de manzana invita la casa.." Dijo el posadero y se fue a cocinarlo.

Llegó un hombre mayor y musculado y portaba una caja y una letra sobre esta.

" Por favor heroína del escudo y la lanza. Acepta esta recompensa aunque no sea mucha." Dijo el hombre mayor y todos los presentes se sorprendieron.

" Ya dije que no quería aceptar ninguna recompensa." Dije yo intentando rechazarlo con educación.

" Soy un veterano... Cuando escuché las noticias de dun héroe depravado y pervertido me enfurecí y lance una piedra a tu rostro, aún tienes la herida que lo prueba, por favor, déjame compensarte, se que no es mucho, en este mome yo esté cofre solo contiene restos destrozados de las armaduras de mis compañeros muertos... Todos hermanos de esta aldea. Hoy has salvado a las sobrinas de muchos. Y se que si me están viendo desde el cielo ellos se sentirían avergonzados si dejara esto oxidarse, un herrero podría usar lo que hay aquí para hacerte una armadura no muy cara. Además mi propia capa de capitán... No la quiero seguir viendo como un recuerdo sino que está llegue a una nueva leyenda." Dijo el veterano de forma humilde

Yo me puse a su altura de rodillas en el suelo.

" Tú deseo es noble. Acepto esta recompensa. Y prometo que honraré el legado de este metal y de esta capa." Dije yo poniendo mi mano sobre la capa que cubría el cofre.

" Muchas gracias." Dijo el veterano.

" Gracias a ti por semejante muestra de buen corazón." Dije yo de forma amable.

Esto queda perfecto para mí. No solo me das metal sino que también una capa.

Genial.

Ahora estoy cada día más cerca de una armadura.

Además el rumor de que un veterano me la dio para honrar el legado de sus camaradas muertos y pedir perdón por haber creído las mentiras del héroe de la lanza y sus aliados. Esto no tiene precio.

Fin del cap.

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